Llámame Luego ; Maxtul

03

Me levanté de la cama y salí rápidamente, solo había tomado un poco de esa sustancia aunque aún no podía mantenerme de pie por completo. Comencé a mirar y a buscar hasta encontrar a ese sujeto, quería golpearlo por lo que me hizo pero a la vez quería una explicación.

Me dirigí a la barra y sólo vi a un empleado más no a el.

"Oiga uno de sus empleados estaba en una habitación de este lugar ¿lo habrá visto?"

"Debe ser el nuevo, ya se fue lo siento"

"¿Nuevo?"
Pregunté.

"Si hace poco vino a trabajar aquí"

"¿Sabes a dónde fue?"

"No, disculpe debo ir a limpiar ¿me permite?"

Sin decir más me salí del lugar y tome un taxi rápidamente y fui a mi habitación. Que estaba en un edificio.

Me duché y me tiré a la cama. Agarré mi teléfono de la mesa de noche y comencé a buscar el número de Tul. Su LINE estaba en línea hace 5 minutos, lo único que podía hacer ahora es enviarle un mensaje.

~"¿qué fue lo que sucedió en el bar, podrías responderme?"

Espere a que me responda, pasaron 10 minutos y mi teléfono había sonado.

~"olvidalo"

Seguí preguntando pero no volvió a contestarme.

Deje el teléfono en la mesa de noche y me dormí, fue un día largo.

me acomode boca abajo en la cama para poder dormir, de repente las imágenes del acontecimiento anterior de hoy aparecieron.

El hombre que había estado parado frente a mi tomándome de la barbilla con sus dedos en mis mejillas, sus uñas que parecían haber estado clavadas en mis mejillas mirándome con lujuria y riendo sarcásticamente, que sin decir nada me besó. No podía olvidar los gemidos que emitió cuando lo besé, era como una canción satisfactoria para mis oídos.

No me había fijado en los pequeños detalles de ese hombre. En mi sueño estaba recordando cada centímetro de él. Su cuello tenía una gota de sudor que bajaba hasta su torso cubierto por la camisa negra abierta en los primeros botones. Sus labios tenían ese humor a cigarrillos y el traía un olor a alcohol.

Sus ojos eran tan penetrantes que podría haber quedado hipnotizado mirándolos. Su lengua caliente que exploró mi boca y sus labios suaves.

Cada centímetro de el parecía ser perfecto. Chocando y picando nuestras lenguas llegando a su punto clímax con tan solo un beso, tan solo recordar esos momentos sentía una gran ola de placer que nunca antes había sentido.

Desperté de golpe, abrí los ojos, estaba cubierto de sudor. Comencé a sentir una sensación extraña, era una mezcla de emociones pero era mejor ignorar. Ahora solo tengo cabeza para pensar en ese hombre pervertido.

¿Por qué estoy siempre pensando en eso? Mejor pienso en otra cosa.

Cogí mí chaqueta y salí rápidamente de mi habitación y me dirigí a mi trabajo.
Me senté en mi escritorio y encendí mi computador, mis compañeros me saludaron respectivamente.

"Hoy vino un postulante"

Al escuchar esa voz femenina supe de quien se trataba. Era mi compañera de trabajo del piso de abajo. Ella era Secretaría y también una gran amiga.

Su cabello era castaño oscuro y su cuerpo era muy esbelto, traía siempre una radiante sonrisa que podría enamorar a cualquiera. Su nombre era Mae.

"¿Bien?"
Respondí con sarcasmo.

"Es tu turno de calificarlo antes de aceptarlo aquí."

"Si no tengo otra alternativa"

"¿Lo has visto? ¡Es demasiado guapo!"
Dijo con una sonrisa de par en par abriendo unos papeles que dejo en mi escritorio.

"Lo veré ahora"

Al abrir los papeles mi piel se puso de punta al ver quien era el postulante. Era ese hombre cuyos ojos y cabello eran castaño y traía una gran sonrisa, era ese pervertido.

"¡Se llama Tul y vino aquí! ¡Su sonrisa es perfecta! Estoy feliz que haya venido, definitivamente me hare su amiga"

"¿Debo atenderlo?"
Pregunté.

"¡Hey! ¿Qué sucede con ese animo? ¿Lo conoces?"

"¡No!"
Respondí con entusiasmo

"Tranquilo solo vino a dejar su currículum"

"¿Entonces sólo será rápido?"
Pregunté.

"¡Si! Quería verlo yo pero tengo cosas que hacer, nos vemos"

"Espera ¿dónde está?"

"Debes esperarlo abajo en el piso principal, nos vemos en el almuerzo"
Salió rápidamente con un ánimo alegre como siempre.

"Nos vemos."

Me levante de mi asiento y fui rápido al baño. Acomode mi camisa y corbata mirándome en el espejo.

¡Mierda el está aquí! Es como si el me estuviera siguiendo o tal vez son ideas mías.

Escuche mi llamado que me ordenaba ir a abajo a atenderlo así que baje y me senté en el escritorio donde su iluminación no era tan buena.

Bien.. Solo debo calmarme solo es un tipo que juega sucio.

Comencé acomodar los papeles de escritorio, de repente escuché una voz que venía al frente mío, era esa voz, era el.

"Hola"

Subí mirada hacía arriba, el estaba frente a mí con una sonrisa que expresaba ironía. Traía puesto un terno negro junto con su corbata y un gran peinado que lo caracterizaba. Podía sentir su mirada por todas partes de mi cuerpo.

"¿Como te llamas?"
Dijo en tono sarcástico.

"Max"
Dije tragando saliva.

Al escuchar mi nombre solo mostró un gesto de sonrisa.

"¿Y eso?"
Pregunté.

"¿A que te refieres?"

"Tu sonrisa ¿dije algo gracioso?"

"No"
Dijo en tono seco.

"Mira ya deje mi currículum así que no tengo nada que hacer aquí"

"Espera no te puedes ir"

"¿Quieres ir a mi casa?"
Pregunto

Al escucharlo mi mente quedo confudida ¿el recuerda lo que paso esa noche?

"¿Por qué debería?"
Pregunté.

"Quiero conocerte mejor y necesito hablar contigo sobre un tema, no nos hemos visto desde esa noche"

"Bien"
Respondí sin rodeos.

"Te espero la dirección te la dejare por mensaje, recuerda que aún tienes mi número"

Sin decir más se retiro sin mirarme.

Que acaba de pasar ... ¿Por qué me siento de esta manera? Cielos...

La tarde pasó más rápido de lo que esperaba en todo el trabajo y en todo el día no pude evitar pensar en el incluso mordia mis labios al recordarlo y mis pelos se ponían de punta de recordar su cuello con esa gota de sudor que viajaba hacía su torso.