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Nota: Varias pidieron que siguiera, y así será, pero no se cuanto jajaja debo pensar la trama

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Wuxian no quiso pensar más y se quedó dormido ahí mismo, Sizhui completamente tomado no tardo en seguir sus pasos.

En la mañana Jingyi entró ya que no le habría la puerta su amigo, solo para encontrar al extraña escena de Mo Xuanyu abrazando a Sizhui. Inmediatamente dijo -¡Que sucede!- lo cual despertó por fin a los otros dos que se separaron, Wuxian solo podía maldecir, aunque quizá así si lo exiliarían por fin de Gusu, pero no podía dejar que A-Yuan quedara mal parado.

Se levanto solo para recordar que no se había vestido correctamente, y se cubrió como pudo -Yo solo quería divertirme un poco, y puse un poco de alcohol es mi culpa, por favor sácame de Gusu por mis pecados- dijo haciendo un tono dramático -Además solo lo moleste un poco...-

-¡Un poco! porque estas tan tan desvestido... Informaré a HanguangJun inmediatamente- dijo mientras salió corriendo. Wuxian sintió su corazón latir a mil por hora "demonios demonios" se repetía una y otra vez en su cabeza, mientas se vestía adecuadamente, eliminaba la evidencia de las botellas robadas, todo mientras Sizhui seguía en el piso viendo al abismo -¡Que demonios haces A-Yuan! levántate y vístete bien, o nos irá pero, no quiero ser azotado de nuevo en Gusu waa-

Sizhui lo volteó a ver, su cabeza le dolía de beber y no sabía si todo había pasado o no, pero al escuchar que lo llamaban así supo que todo paso. Se acomodó la ropa inmediatamente. Estaban listos para recibir el regaño, cuando comenzó  a sonar una campana. Ambos salieron corriendo, y le advirtieron que había un peligro en la torre, aquel problemático brazo que atraparon, Wuxian entró inmediatamente a ayudar.

Con toda la conmoción Jingyi pareció olvidar que los acusaría, y Wuxian estaba aliviado, pero ahora Wangji quería que lo acompañara a investigar sobre el brazo. ¿Que demonios debía hacer?, sinceramente quería hablar más con su A-Yuan de que había pasado este tiempo, y advertirle que no revelara su identidad sin más. 

Quiza la solución era huir antes, pero la curiosidad no lo deja apartarse del caso del brazo. Quizá debía hablarlo con él. Así que esa noche fue con él, toco su puerta y abrió inmediatamente -Sr. Wei...- antes de seguir le cubrió la boca, y lo metió a la habitación. -Justo de eso quería hablar, no digas quien soy, ni quien eres tu es peligroso- Sizhui estaba confundido pero sabía que tenía razón. -Por cierto, iré a investigar el caso del brazo... pero yo quería hablar más antes de partir- dijo Wuxian, -Iré con ustedes-, Wuxian lo vio con cara de susto, -Convenceré que me lleven con Jingyi si es necesario, si no... yo yo los seguiré en secreto- Wei Ying sintió una extraña sensación, hace mucho que nadie se preocupaba por él. 

-Estaré bien, volveré pronto... -

-¡No quiero que se vaya de nuevo!- dijo Sizhui dejándose llevar por sus sentimientos por primera vez.

Wuxian quedó impresionado pero asintió, -Entonces asegúrate de ir conmigo- dijo con una sonrisa que fue aprisionada por unos labios. ¡A este chico le gustaba el peligro!, ¿Acaso no podía esperar a que salieran de Gusu? Pero las piernas de Wuxian flaquearon recordando la noche anterior. 

Besos comenzaron a llevarlos al suelo, donde ambos descubrieron que su virilidad ya se encontraba dura, Sizhui no podía contenerse, por lo que desprendió de la ropa al otro tomo crema de su buro y lubricó la entrada que lo esperaba palpitante. Entró sin piedad, aún más doloroso que el día anterior, pero se sentía igual o mejor.

Tras una agitada velada, Wuxian volvió al Jingshi silenciosamente, aún cuando sabia que era imposible que Wangji no hubiera notado su desaparición, pero mientras amaneciera ahí no debería haber problema.

Al día siguiente a Lan Zhan no le quedó de otra más que aceptar a dos polizontes en su búsqueda.

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