Cheater II

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Pasaron los días y todo siguió igual. No podía tomar el valor para hablarlo con mis padres, Ben me había pedido ese gran favor y cuando mis padres lo supieran él se encargaría del resto.

Pero aún así, seguía dándole vueltas a esto en mi cabeza.
Todos los viernes, como hoy, a la noche la familia comía junta. Otra vez se repetiría la secuencia de Amber con  Ben.

Durante mucho tiempo me obligue a no verle. A dejar de engañar a mi hermana. Pero fue imposible, hay algo en él que me atrae tanto que me lleva a ser la peor hermana del mundo.

Mis amigos y yo estábamos en un bar, relajandonos un poco y tomando algunos tragos mientras conversábamos.

Entonces lo vi, yo no lo conocía todavía, se acercó a mí lentamente tratando de hacer el momento más deseable.
Me invitó una copa mientras hablabamos, seguimos así por unos minutos creo o tal vez una hora.

Su vida era tan interesante y yo no podía creer que alguien como él se había acercado a mí.
El tenía 28, yo no mencioné que tenía casi diez años menos que él, porque supe que nunca le volvería a ver.

-¿Quieres ir a otro lado? -se acercó lentamente a mí para murmurar algo fuerte esa oración. Mis manos comenzaron a sudar, nunca hice esto y creía no querer hacerlo.

-Yo... tengo que preguntar algo a mis amigos, regreso en unos minutos -le di una sonrisa algo desesperada, el me sonrió mientras bebía de su copa y me miraba mientras me alejaba.

-Jenna, ven. -grite cuando divisé a mi amiga. - Ben... el chico quiere que me vaya con él... no se qué...

-¡Ve! -abrí los ojos mientras seguía desesperada.

-¿Qué?

-Ve, siquiera eres virgen. Diviértete. -sacó un condón y algunas pastillas de su bolso y me lo entregó, yo seguía sin entender nada pero los tomé para luego irme.

Ben estaba sentado allí esperándome, y cuando quise dar media vuelta e irme ya me había visto.

-¿Vamos? -tomó mi mano delicadamente, algo que hizo que escalofríos recorrieran mi cuerpo. Me sentí extraña porque nunca lo había sentido con nadie.

Estábamos por salir del bar, cuando me advirtió que deberíamos salir corriendo rápido hacia su auto porque había mucha gente que podría fotografiarnos, no lo entendí al principio.

Cuando entramos en este, lo puso en marcha rápidamente y en cuestión de segundos ya no se podía ver las luces del bar.

-Yo... tengo dieciocho... -estaba mintiendo, sí, en dos meses cumpliría dieciocho.

-Ya lo sé... -suspiré tranquila y me giré para verle.

-¿Qué? ¿Cómo que lo sabes? -él rió y apartó un segundo la vista de la carretera para mirarme.

-Lo sé, no creía que una mujer no se me tirara tan rápido...

-¿Qué estas tratando de decir? ¿Qué  soy una niña?

-No, que muchas suelen querer irse conmigo rápido, en cambió tú no. -miré hacia la ventana, tratando de no ofenderme por sus palabras. -me gusta que sean como tú, que no te tiraste a la primera.

-¿Supongo que eso es como un cumplido? -rió nuevamente pero esta vez sin apartar su mirada de frente, puso su mano libre en mí pierna, haciéndome sobresaltar ligeramente.

-Lo puedes tomar como quieras, pero sí, es una especie de cumplido. -reí y negué mientras mi mirada seguía fija en su mano sobre mi muslo. -¿dónde queda tú casa?

-No vivo sola...

-Lo sé, he vivido con mis padres hasta los veintidós. -mordí mi labio para no reír y le di mi dirección.

Estábamos casi todos en la mesa, intenté sentarme lo más apartado que pude de ellos para siquiera tener que mirarle la cara.

Estaba yo estaba allí esperando que todos se sentaran y para mi suerte Amber no había traído a Ben hoy, pero ella se sentó a mi lado.

-¿Y Ben? -su mirada se clavó en mi como alguna clase de puñal, mi cara se transformó en un gesto de sorpresa.

-¿Te importa tanto, no?

-¿Qué te pasa? -ella me tomó del brazo y suspiró.

-Lo siento, hemos tenido una discusión, estoy algo mal por eso.

-Supongo que pasará Amber, tú tranquila -ella puso una expresión de tranquilidad y asintió. Tal vez ella si estaba loca como Ben decía.

La cena estuvo tranquila, y creo que me sentí más tranquila por el hecho de que él no estaba aquí, hablé con Amber sobre su pelea y dijo que creía que Ben estaba enamorado de otra persona, pero ella no sabía que hacer porque lo amaba demasiado.

Aunque esa sí fue una situación algo incómoda, le di consejos a mi hermana, tratando de que no sospeche nada. Obviamente yo me sentía pésimo por que su novio estuviese "enamorado", creo, de mí. Pero traté de ser lo más sincera que pude.

Para cuando todos se fueron quedamos solamente nosotros tres, mis padres y yo. Era el momento perfecto para contarles sobre lo que Ben estaba tratando de sobrellevar con Amber, pero aunque no era verídico lo que él decía, decidí dejarlo pasar.

Hace algunos días había sido nuestra última conversación, ya no respondí los siguientes mensajes que me mandó durante estos días. Pero aunque estaba evitando lo inevitable llegaría el momento de afrontar la verdad.

Decidí recostarme unos segundos, pero no me percaté que había caído en un profundo sueño. Me desperté gracias a que mi celular sonaba y vibraba en mi mano.

-¿Hola?

-¿T/N?

-¿Quién habla? -la voz de la persona del otro lado de la línea se sentía acelerada y entrecortada, como si recién terminase de correr un maratón.

-Soy Ben... necesito tu ayuda.

Aquí estábamos, con las pruebas delante de mis ojos, las pruebas que todos necesitábamos para darnos cuenta de diferentes cosas.

Amber había intentado cortarse las muñecas delante del departamento de Ben, él cuando llegó del mercado la vio desmayada por la perdida de sangre delante de la puerta de su casa.

La cara de mis padres era una mezcla entre incomprensión y sorpresa, jamas se hubiesen imaginado que su hijita haya querido hacer semejante acto en contra de su vida.

Pero no estaban enojados con él, claramente, lo entendieron, Ben les explicó por todo lo que tuvo que pasar y todas las veces que tuvo que cubrir las locuras que mi hermana hacía cuando él quería dejar la relación.

-¿Podemos hablar?... -miré a mis padres que estaban sumergidos en sus pensamientos y asentí. Nos apartamos de ellos y nos sentamos en unas banquetas a unos metros de mis padres.

-Siento no...

-No tienes porque disculparte... -suspiró, imagino que esto ha de ser más que difícil para él- pero necesitaba alguien que me crea y que entienda lo que estaba pasando...

. . . . . . . . . . ... . . . . . . . . . .. . . 

Hey! He estado desaparecida, lo sé :/

Pero aquí esta la continuación de Cheater, que seguramente tendrá parte 3. Prometo publicarla entre hoy y mañana. Gracias por seguir leyendo y todo el amor que le dan <3 

Los quierooo 

One shots °Ben Hardy°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora