—¿Cómo? -no entendí lo que quería decir el chico-—Se notaba como babeabas por mi. -miré con asco y confusión a la pantalla del móvil-
—No tengo ni puta idea de lo que hablas, pero déjame decirte de que eres un egocéntrico de mierda. -realmente pensaba de que aquel misterioso chico era un idiota muy grande-
—Deberías cuidar más tu lenguaje, dulzura. -otra vez el escalofrío se hizo notar en mi cuerpo cuando leí la palabra "dulzura"-
—Eres realmente un incordio. -bufé y eché mi cabello negro hacia atrás-
—Lo soy pero eres tú la que sigue contestándome y buscándome cada noche. -mierda, podría haber jurado imaginarme a aquel chico sonriendo con victoria. Tenía razón, ¿Por qué le seguía contestando y buscando su mensaje?-
En ese instante aquel chico me dejó sin palabras así que solo pude dejarle en visto. Pensando, acostada en mi cama, se me vino una pregunta para hacerle al chico, pero no sabía si sería algo patético preguntarle después de aquella ultima respuesta por su parte.
Cogí el móvil y volví a ver su contacto. No tenía foto, pero si tenía el mismo estado.
—¿Por qué siempre hablas a partir de las tres? -escribí y envié aquí mensaje sin pensármelo demasiado y al instante respondió.
—Insomnio. -algo en mi cabeza encajó en ese instante-
—Comprendo. Perdón por volver a molestar, buenas noches. -Me volví a sentir patética por escribirle aquello-
—Lo volverás a hacer pronto. -Me quejé en voz alta y dejé el móvil. Idiota.
•💭•
No hice nada esa mañana siguiente, nada en especial. El día pasó con bastante rapidez.
Llegó día de clases. Me levanté con bastante sueño y con la cara hinchada, mas de lo normal, debido al sueño.
Me fui con mi hermano al instituto, donde nos encontramos con JiMin y los demás.
—¿Os habéis enterado de que JiMin tiene novia? -comentó Jin. JiMin río y yo solo me limité a mirar al suelo-
—Y eso que yo pensaba que estaba colado por mi hermana. -HoSeok habló. Estúpido. JungKook asintió dándole la razón y JiMin solo río incómodo-
—¿Que os toca a primera? -preguntó NamJoon-
—A y a Jin nos toca matemáticas. -respondió mi hermano, colgándose de Jin, quien este se ruborizó y yo sonreí. Estaba colado por mi hermano y todos lo sabíamos excepto el idiota de HoSeok-
—A mi y a Soo filosofía. -JiMin, como hacia de costumbre, me revolvió el pelo, haciendo que esta acción de mi parte recibiera un rechazo. No me sentía bien estar enamorado de él, que él tuviese pareja y que me de ese tipo de tratos. Sé que somos mejores amigos aún, pero sigo enamorado de él.
Nos separamos de los chicos y nos dirigimos al aula.
Nos sentamos por la parte de atrás. Saqué mis cosas, pero noté la mirada de JiMin encima de mi.—¿Qué quieres? -pregunte con un tono pesado, cosa que me sorprendió hasta a mi y a él-
—Joder, ¿qué te pasa? -JiMin me miró extrañado. Suspiré. No podía tratarle mal por mis sentimientos, vale que me gustase, pero no podía tratarle mal por tener novia-
—Solo no dormí bien. -Me volví a girar hacia mi mochila para sacar el estuche. Miré la mesa donde encontré aquel número de teléfono y para mi sorpresa estaba ocupada por un chico de cabellos negros y otro de pelo verde-
Me quedé mirando. Aquel chico alto me sonaba de algo. Sin darme cuenta, sus ojos verdes pintados de marrón se encontraron con mi mirada. Mi corazón se aceleró por el nerviosismo y me ruboricé. Él seguía mirándome, hasta que yo decidí seguir con lo mío.
—Estas roja. ¿Seguro que estas bien? -JiMin me miró con preocupación, hasta que se dio cuenta de la situación. Aquel chico alto y delgado mirándome, hasta que se puso hablar con él peliverde y yo algo nerviosa-
—Ese idiota. No me digas que te gusta. -dijo con un tono molesto-
—¿lo conoces? -mis ojos se abrieron como platos y puse atención en JiMin. Mi cabeza seguía reuniendo imágenes para descifrar quién era aquel individuo. Bingo, el chico del centro comercial. ¿Desde cuando estudia aquí? Es la primera vez que lo veo o simplemente nunca me había fijado en él, pero algo me decía que teníamos más lazos a parte de haber cruzado miradas-
—Sí, lo conozco. Nos vemos en algunas clases y sobretodo en los vestuarios después de hacer deporte. Creo que es mudo, nunca habla. Es un idiota. -rió con superioridad-
—No te metas con él, no te ha hecho nada, JiMin, tú ya no eres así. -JiMin antes era un chico con carencias emocionales, que ha podido sanar con terapias. Estaba la mayor parte de su tiempo bebiendo, drogándose, no iba a ninguna clase y le encantaba meterse en pelas.
—Sí, ya. -la clase empezó, fue bastante aburrida, como lo solía ser y cabe recalcar que no pude prestar atención por aquel chico. Algo me decía que lo conocía-
El timbre sonó, todos comenzaron a recoger y a salir al recreo. Coloqué mi mochila y me decidí salir, absorbida en mis pensamientos. JiMin había salido un poco más rápido para encontrase con su nueva novia. Juré verlos besarse en mitad del pasillo. Tenía ganas de llorar. Agaché mi cabeza y unas cuantas lágrimas se me escaparon. Nunca pensé que sería así de doloroso. JiMin era de las pocas personas que me hacían sentir bien y me gustaba como estábamos, pero eso no quita que me duela verla con una chica.
Choqué con alguien por mi despiste. Miré hacia arriba y para mi sorpresa era otra vez ese chico de ojos verdes.
—¿Te encuentras bien? -la voz del chico y su presencia hicieron que mis mejillas comenzaran a pintarse de un color carmesí. No comprendí en por que de su pregunta, hasta que al final me di cuenta. Limpié mis lágrimas, reí falsa y nerviosamente.
—Sí, tranquilo. -le dediqué una sonrisa. El chico peliverde lo llamo por el nombre de "V". El chico se dio la vuelta y me hizo una señal de "adiós" con la mano mientras se iba-
Aquel chico llamado por el nombre de "V" no tenía ninguna expresión en la cara cuando decía alguna cosa, dato que me pareció bastante extraño.
•🌪•
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Number // TaeHyung
Romance"Un número de teléfono tallado en una de las partes de la mesa" ♡ Leer: esta historia contiene contenido delicado, tales como; la depresión, autolesión y suicidio. Por favor, leer con responsabilidad.