El Ángel y su Estrella

54 2 0
                                    


Notas de un Alma perdida:

Siento que no puedo más. Pierdo el sueño ante las horribles cosas aparecen en mi mente durante las noches. Y si logro dormir, no puedo evitar tener pesadillas. Me rodean malos recuerdos que suelen nublarme. Los días grises parecen más oscuros de lo que realmente son. Tengo miedo de volar alto y luego caerme contra el asfalto. O tocar el sol y quemarme. Poseo inseguridades. Hay veces que la vida pierde sentido, y ya no sé qué hacer.

Notas de un Ángel guardián:

Sé con toda seguridad que esta alma puede con todo, aunque su consciente y su inconsciente estén en su contra. Es un alma que necesita amor, como cualquier alma. Hay malos recuerdos, sí; pero eso no significa que no pueda crear nuevos y mejores recuerdos. Soy tu ángel guardián, vine a despejar esas nubes, para que veas el azul del cielo, o bien, la luz de las estrellas. Tal vez así logres saber que, aunque vueles alto, vos sos como las estrellas, puesto que brillas con luz propia. Y si, aunque caigas cual estrella fugaz, no vas a estamparte contra el suelo. Solo vas a movilizarte por la oscuridad, iluminando. Y cuando te vea en ese regio movimiento llegar a mí, sabré que mi deseo se está cumpliendo.

Matías Foster:

El Ángel guardián siempre escribe más que el alma perdida. Porque no importa el caso, no importan los recuerdos malos, no importan los silencios oscuros. No importa cuántas razones malas haya, para nublarse. Siempre hay más razones buenas para brillar.

Dulce CatarsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora