Capítulo V: Día en la cabaña

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Domingo 13 de Enero:

La noche estaba silenciosa, ambas hermanas seguían durmiendo tranquilamente...hasta llegar a mitad de la noche, cuando las hermanas se levantan de golpe, agitadas y con mucha sed, se levantaron y buscaron rápidamente entre sus mochilas, botellas de agua y se la bebieron todas.

-Selene: ¿Qué hora es? -cuestiona somnolienta-.
-Layna: 3:07am -responde mientras ve la molestosa luz de su celular-.

Ambas deciden volver a meterse a la cama, para seguir durmiendo, pero al cabo de unos minutos, se dieron de cuenta que era imposible, así que deciden buscar la laptop y empezaron a ver videos de Mukbangs.

Pasados unos minutos, y ambas hermanas empezaron a pensar que estaban locas, ya que estaban escuchando voces por los pasillos, y a esas horas estaba rotundamente prohibido que los estudiantes estuvieran deambulando por otra parte del colegio, que no fueran sus habitaciones.

Curiosas se arman de valor y deciden asomarse por la puerta, para ver de donde provenían las voces, pero no habia nadie...

Hasta que algo repentino las hizo asustarse, habían visto una sombra correr rápidamente entre la oscuridad, hacia los baños de mujeres. Con mucha curiosidad, deciden caminar sigilosamente, hasta llegar al baño.

Entraron decididas, aunque estuvieran temblando de miedo y empezaron a llamar, para ver si alguien les contestaba, pero no recibían respuesta alguna. Layna se acerca sigilosa a las puertas de cada cubículo y empieza a abrirlas, hasta que llegó a una, que al intentar abrirla, unas manos la detuvieron.

-Layna: Pero...¿Qué haces? -pregunta molesta-.
-Mónica: Lo siento pero no deben entrar aquí, por su seguridad -dice ella tratando sonar calmada-.

-Selene: ¿porqué lo dices? -pregunta con mucha curiosidad-.

-Mónica: Es mi amiga, aveces se pone un poco loca en las noches... ya saben sonambulismo y esas cosas -hace una pequeña risita nerviosa-.

-Layna: Eso no parecía una persona, era como un... -se detiene a pensar la forma de la sombra- como un perro... -sostiene segura de lo que vio-.

-Selene: Sí, era como un perro... un perro extraño -apoya a su hermana, frunciendo el ceño-.

-Mónica: ¿Un perro?, Nah como creen -contradice con ironía- al menos que estuviera soñando que era un perro y por eso caminaba en 4 patas... -comenta encogiéndose de hombros-.

-Layna: ¿Qué? -mira a Selene y está también estaba confundida-.

-Mónica: Yo me encargo de esto, no se preocupen -empuja levemente a Selene y a Layna, en eso alguien más se une a la escena-.

-Nella: Mónica...Mónica no encuentro a Lexie ¿la haz visto? -pregunta la chica entrando alterada al baño, sorprendiéndose al ver que su amiga no estaba sola-.

-Mónica: Eh sí, esta en el baño -Ambas chicas se miran fijamente- Está sonámbula... otra vez.

-Nella: Oh... ¿otra vez? Esa chica necesita sus pastillas -luego voltea y ve a las hermanas- Y ...¿ustedes son?...-cuestiona con curiosidad-

-Selene: Yo soy Selene y ella es Layna, mi hermana... es un placer...-dice levantándo su mano en modo de saludo-.

-Layna: Hmm -hace un pequeño bufido y empieza a mirar a Mónica y a Nella de pies a cabeza- si su amiga está sonámbula, la única forma de que no se levante y no cause problemas, es que la amarren...-explica cruzándose de brazos-.

-Nella: ¿Cómo? -Esta en shock, ya que se supone que en luna llena los lobos menos experimentados, se transforman, pierden control y las únicas maneras de calmarlos es sedándolo o amarrandolos- ¿cómo sabes eso? -pregunta con temor-.

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