• . ˚ * ━━ 𝐂𝐋𝐔𝐁 𝐃𝐄 𝐋𝐎𝐒 𝐂𝐎𝐑𝐀𝐙𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐑𝐎𝐓𝐎𝐒
❝Ella no tenía motivos para sonreír,
entonces él se los dio.
Su vida era negra
y él le dio color.
Ella tenía el corazón roto,
pero él se lo arregló.❞
𝐒𝐓𝐈𝐋𝐄𝐒 𝐒𝐓𝐈𝐋𝐈𝐍𝐒𝐊𝐈...
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・｡° ★━━ CAPÍTULO TRES
«observadora»
Algunas miradas eran curiosas. Otras, en cambio, parecían estar llenas de ansias por escuchar la historia que la chica castaña y con mal genio estaba a punto de contar. Claro estaba que las ansias y el nerviosismo lo emanaba Stiles, sentado frente a Tessa mientras se mordía las uñas. Ese chico casi siempre estaba nervioso.
Pero Malia no parecía estar a punto de contar nada, ya que suspiró y volvió su vista a su regazo con actitud aburrida.
—¿Ya? ¿Eso es todo? ¿Nos vas a dejar con tanta intriga? —preguntó Stiles, formando una mueca en su rostro.
—Ah. ¿Tengo que contároslo? ¯preguntó Malia confundida. Todos suspiraron pesadamente, a lo que ella pareció haber entendido como que relatara la historia—. Si, bueno..., yo tengo el corazón roto.
» Resulta que no sé exactamente lo que se siente estar enamorada, pero yo creo que lo estoy. —Malia sonrió, como si hablar de aquello la hiciera feliz pero la carcomiera por dentro—. Yo tengo, tenía —se autocorrigió— un amigo. Theo Raeken.
Tessa se sumió en sus pensamientos durante unos instantes, intentando recordar aquel nombre que se le hacía tan familiar. Y lo encontró al instante: era uno de los mejores amigos de Ethan y Aiden, que a su vez vivía pegado a Jackson Whittermore como si la vida le fuera en ello. En fin, uno de los populares insoportables.
—Theo es genial. —continuó Malia—. Y no sé por qué pensé que yo podía gustarle. Tan sólo... —la castaña cerró sus ojos con fuerza y negó con la cabeza. Tessa puso una mano sobre la suya, reconfortándola—. Él vino el otro día a clase diciéndome que tenía novia. Nueva. ¡Guay, genial! —fingió emoción.
Tessa se sintió enormemente mal por la chica, pero Malia no parecía afectada. Todos la miraban con asombro, pero ella se limitaba a jugar a un juego con su móvil. O sabía fingir muy bien o no quería que nadie notara lo vulnerable que era.
—Ya que estamos confesando nuestros secretos más oscuros, me gustaría preguntaros algo. —dijo Stiles de repente, rompiendo el silencio que inconscientemente se había formado. Se levantó de su silla y dio varios pasos detrás de la mesa—. ¿Creéis que soy atractivo para los gays?
—¡Stiles! —replicaron todos en voz alta.
—Vale, vale. Lo siento. —se volvió a sentar y miró a Liam y a Tessa con confidencia, ya que eran los únicos que le prestaban atención. Scott había vuelto a sus deberes y Malia seguía jugando con el móvil—. Ahora lo digo enserio. ¿Creéis que soy atractivo para los gays?
—Creo que eres idiota para todo el mundo. —le susurró Tessa de la misma manera en la que lo había hecho él. Stiles giró la cabeza, dando a entender que a lo mejor Tessa había tenido razón.
