Cap.3

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El tiempo paso lento para Jungkook, por días espero a Hoseok y este nunca apareció, de noche lloraba en silencio y en el día caminaba como sonámbulo por la casa,hasta que llegaba la hora  en la que siempre se encontraban y salía con la esperanza de volverlo a ver.

Una semana después de la partida de Hoseok, Jungkook estaba recostado en su cama mirando el vacío, había perdido las esperanzas.

No sintió cuando su hermano entro a la habitación y se recostó tras el envolviéndolo en sus brazos con ternura, Namjoon le hablo con amor.

-¿Que tiene tan acongojado a mi pequeño príncipe?, ¿acaso es porque he estado trabajando mucho estos días? Te prometo que hare un poco de tiempo para que vayamos a algún lugar que quieras ir… ahora ¿me regalarías una de tus hermosas sonrisas? – Jungkook se dio la vuelta ocultando su rostro en el pecho de su hermano y aferrándose a él con fuerza.

Él joven solo lo dejo llorar, su pequeño hermanito consentido, que ciego estaba Namjoon ante lo que ocurría frente a sus ojos.

El sábado llego Jin con toda su brillante libertad, saludos a todos con cariño y corrió al cuarto de su pequeño primo, pues había oído de los sirvientes que el chico estaba deprimido.

Lo encontró hecho un ovillo sentado en un mueble frente a la ventana, cuando Jungkook lo vio entrar corrió a sus brazos llorando con fuerza.

-Hey que pasa, ¿porque lloras así?... que te hizo el tonto de Namjoon,  ¿es por lo del compromiso?...-.

Jungkook se separó del abrazo y lo miro con confusión:

- ¿Compromiso?... ¿Qué compromiso Jin?...- ya había metido la pata.Jin sentó a su niño en la cama y solo pudo seguir lo que había iniciado.

-Bien... tu hermano y mi papa nos comprometieron con los herederos de dos poderosas familas, mi prometido se llama Mark y el tuyo es Jimin, los padres de mi prometido hacen negocios con mi padre a nivel de telecomunicaciones y los del tuyo son unos rusos que residen en esta país hace muchos años pero que tienen negocios en todo el mundo y una de las empresas que maneja sus negocios es la de tu hermano-

Jungkook se puso de pie y camino hasta la ventana, ahora era el prometido de alguien, una persona sin rostro, alguien que no conocía,  ¿qué hacía con el amor que sentía por Hoseok?, ¿y si el volvía?, ¿Cómo le diría que estaba comprometido con alguien más?.

Jim lo saco de sus pensamientos, pero sus palabas no lo alentaron, al contrario solo lo hundieron más:

– Cariño ven siéntate conmigo... veras..
si lo piensas bien no es tan malo, tendrás tu futuro asegurado con un hombre millonario que cuidara de ti… yo decidí que esto no me tomara de sorpresa, hace unos meses cuando me entere,  les dije a mis papas que iría con unos amigos al cine y me fui directo a casa de Mark, él se quedó de piedra cuando me vio en la puerta de su departamento, le dije que si íbamos a casarnos teníamos que conocernos antes pues no iba a compartir mi vida con un idiota para siempre, así que una cosa llevo a otra y ya llevamos dos meses viéndonos a escondidas y teniendo el mejor sexo del mundo…-

- ¿Sexo? … Jin tu…- Jungkook estaba perturbado sabía que él y Hoseok habían estado juntos más allá de lo permitido, pero las palabras de Jin no las entendía.

Su primo vio sus confusión respondiéndole – Si, sexo, pero no estoy de humor para explicarte lo del polen y las abejitas, me imagino que es así como Namjoon te ha de haber hablado de sexo, el retrogrado ese, además prefiero que tu prometido sea el que te quite el velo ese virginal que tienes y te cuente de las abejitas… sé que vas a estar bien cariño Jimin es muy guapo y joven-

Esa noche Namjoon le hablo del compromiso a su hermanito, cenaron juntos e Namjoon intento conversar con Jungkook que se encontraba perdido en sus pensamientos.

Una llamada telefónica interrumpió la charla o más bien monologo de Namjoon y cuando Jungkook se encontró a solas en su habitación lloro, hasta que el cansancio lo venció.

Cuando la mañana llego reluciente y brillante Jungkook ya estaba en el baño  dándose una ducha y despejando su mente, decidió escaparse esa tarde.

Tenía que buscar a Hoseok, conseguir hablar con él,  y decidió ir a los lugares que habían frecuentado.

Una hora y otra, cuando ya comenzaba a darse por vencido, de un pequeño café salió una figura conocida.

Jack salía en compañía de un guapo joven, iban camino a casa cuando escucho que alguien le llamaba, al voltear se sorprendió al ver al pequeño chico que su primo había abandonado;

– Hola ángel… como estas…- Jungkook no noto el nerviosismo del joven, estaba feliz de haberlo encontrado con emoción le pregunto.

-Jack… donde está… Hoseok… necesito verlo, hablar con el…-.

¿cómo le diría a ese pequeño que Hoseok lo había abandonado?, ¿cómo le rompía el corazón?, maldijo su suerte y solo pudo contestar con la verdad, disfrazándola un poco, después de todo una mentira blanca valía la pena por ese pequeño ángel:

– Pequeño el… bueno él tuvo que volver a Nueva York,  tenía que ir a la Universidad tu sabes la NYU, tenía que terminar el semestre para volver, el no pudo despedirse todo fue tan rápido, pero el prometió que volvería y te buscaría y Jung Hoseok siempre cumple una promesa si dijo que volvería el vuelve…- .

Jungkook volvió a su casa esa tarde con un atisbo de esperanza, había conseguido información valiosa aquel día, la ubicación de su desaparecido novio y su apellido.

- Jung Hoseok… mi querido Hoseok…- sonrió por primera vez en días, su Hoseok había prometido que volvería y lo buscaría, eso era una promesa de amor para él

¿Pero qué haría ahora con su compromiso?, ¿Qué haría si cuando Hoseok regresara él podría estar casado con otro?, no es no iba a pasar, no podía pasar.

Jin era el único que podría ayudarle pero su primo paso más de quince días si ir a su casa, estaba inmerso en los detalles de su boda con Mark.

A casi de un mes de la partida de Hoseok, Jin apareció, Jungkook ese día había amanecido muy indispuesto, de hecho llevaba una semana siendo atacado por terribles malestares.

De cierta forma le había servido todo aquello pues el encuentro con su prometido se había pospuesto hasta que el estuviera en condiciones.

Namjoon estaba de viaje pero llamaba todos los días para hablar con su pequeño.

-¿Qué tienes?-Jin se recostó con él y lo abrazó despacio.

Jungkook lo miro con sus ojos tristes y cansados respondiéndole mientras acariciaba su vientre con una seña de dolor.

–Me duele aquí… - trato de incorporarse pero de nuevo lo atacaron las terribles náuseas y Jin coloco la papelera del baño para que vomitara sin levantarse de la cama:

- ¿Comerías algo vencido?- pregunto el castaño mientras pasaba un paño húmedo por la cara de su primo.

Jungkook negó con la cabeza para luego decir.

–No he comido mucho en días, me siento muy débil y a veces me mareo, o me da por dormir, menos mal que Namjoon no está porque ya estaría internado en un hospital-

-Hay... si no te conociera diría que estas…- la mente de Jin voló en un instante con preocupación preguntó:

– ¿No te has visto con tu prometido verdad?...- Jungkook no entendió la razón de la pregunta, se limitó a negar tristemente con la cabeza,Jin ahora más preocupado volvió a preguntar.

– ¿Has estado viéndote con alguien más? ¿Sabes que te quiero verdad?, jamás te traicionaría, puedes confiar en mi… ¿confías en mi?...- Jungkook se echó a llorar en los brazos de su primo y le respondió entre sollozos.

– Hoseok… él se llama Hoseok…-

♥Corazón Inocente ♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora