MARIPOSAS ¦ ᴇᴍɪʟɪᴀᴄᴏ

09

¿Y dónde se supone que vamos a dormir mamá? Ya es algo tarde como para regresar a casa, agradece que mañana nadie en el colegio tiene clases por la reunión que tienen los profesores -Reprochó Renata-

Pueden los tres dormir en el cuarto dr huéspedes -Sugirió Juan-

Gracias señor pero no queremos ser una molestia para ustedes y su hijo -Contestó Joaquin de manera amable-/

No es una molestia -Contestó Juan-

Muchas gracias Juan, gracias por dejarnos quedar aquí -Agradeció Eli- Nos iremos a temprana hora

Pero mamá, ¿Y la ropa para mañana? ¿La pijama? -Preguntó Joaco-

Por eso no te preocupes Joaquin, Elizabeth puede acompañarme a la casa de ustedes por algo de ropa, podemos ir en mi auto -Sugirió el señor Osorio-

¿Y por qué mejor no nos llevas a nuestra casa? -Preguntó Renata con una mirada fría-

Pues...-Osorio no sabía que contestar-

Hija, no seas grosera con Juan, tú y Joaquin vayan al cuarto de huéspedes y esperemen allí -Ordenó Liz-

Yo los llevó, sigamen -Emilio empezó a caminar enfrente de los hermanos Bondoni mientras ellos lo seguían-

(....)

Ya todos dormían en la mansión de los Osorio, bueno casi todos, el joven Bondoni todavía no podía dormir, al estar fuera de su casa era una sensación extraña, aunque estuviera en otra casa el sentía algo de libertad.

-"Cuándo te sientas sólo en la oscura noche mira el hermoso cielo nocturno y ve las estrellas, una de esas tantas extrañas brilla más, ese seré yo cuidandote y dándote la fuerzas que necesitas"

Joaquin recordó las últimas palabras que su padre le dijo antes de morir, eso todavía lo ponía triste, su padre murió apenas hace 6 meses. Con pasos silenciosos salió del cuarto donde estaban durmiendo él juntó con su hermana y mamá; recorrió toda la casa hasta encontrar la puerta que lo llevaba hacía el patio trasero, al salir al patio sintio el frío viento de la noche chocar con su cara, el césped estaba algo húmedo eso causaba algo de cosquillas en sus descalzos pies. Con lentitud a sentó en el césped húmedo y su mirada fue directo al cielo nocturno.

Los ojitos de Joaquin tenian un hermoso brilló al ver el hermoso cielo de la noche, las estrellas brillaban pero una en especial, una grande y que brillaba más que las otras.

Papá, Hola -Habló bajito mientras veía a esa estrella-

¿Joaquin? -Una voz ronca saco a Joaquin de su burbuja- ¿Qué haces aquí afuera?

¿Eh? -Joaquin miró extrañado al chico que tenía enfrente suyo- Ah, hola Emilio, nada, sólo no puedo dormir ¿Y tú?

Tampoco puedo dormir, pero esta haciendo mucho frío aquí afuera, te vas a enfermar -Dijo con una tranquila voz- Sé que no nos conocemos mucho, pero no me gustaría verte enfermo, vamos a la cocina.

Emilio ayudo a Joaquin a pararse del pisó y se adentraron a la casa y fueron directo a la cocina.

¿Quieres agua o café? -Preguntaba Emilio mientras Joaquín se sentaba en una silla-

Agua por favor -Respondió con su característica sonrisa-

Y dime, ¿Qué hacías en el patio sentado en el césped? -Prefunto el rizado mientras servía dos vasos con agua-

Nada, simplemente no podía dormir y cuando tengo insomnio me gusta ver las estrella, es...es la única manera que siento cerca y mi papá y me sientl libre -Respondió Joaco con unas inmesas ganas fe llorar-

Acaso tu padre?....-Emilio no quería sacar ideas a lo loco-

¿Si esta muerto? Si, él murió hace 6 meses atrás -No aguanto más y empezó a llorar- Lo extraño tanto.

Yo también perdí a mi mamá hace 2 años, ella murió en un accidente automovilístico -Lágrimas empezaron a resbalar por las mejillas del rizado y sus ojitos ya estaban rojizos-

Tal parece los dos somos diferente pero iguales al mismo tiempo -Dijo el castaño con una voz bajita-

Tal parece los dos queremos ser libres, dejar el pasado atrás -El rizado miró a los ojos del castaño-

-Poder volar como las mariposas.