Joaquín con cada paso que daba podía sentir los nervios apoderarse cada vez más de su cuerpo, estaba a unas cuadras de la casa de Emilio y la curiosidad por saber el motivo de la llamada del rizado, era más grande.
Ya estando enfrente a la puerta de la casa del rizado, Joaquín dudo tocar la puerta o irse corriendo y inventarle alguna excusa a Emilio, tomó la primera opción y tocó el timbre de la casa Osorio.
Un rizado con una ropa elegante pero también algo casual, abrió la puerta de aquélla casa.
-Bienvenido, joven Bondoni.- El rizado mostraba una aonrisa que lograba tranquilizar al más bajó.
-Gracias por el recibimiento joven Osorio.- Dijo Joaco siguiendole el juego a Emilio. -¿Me dejará pasar o me tendrá aquí afuera?.-
Emilio se hizo aún lado dejando pasar al castaño a su casa. Emilio entrelazo su mano con la de Joaquin.
-Espero que te guste todo lo que prepare para está noche.- Dijo el una delicadeza.
Joaquín podía sentir su corazón acelerarse con cada palabra de aquél chico rizado.
Ambos jóvenes ya con sus manos entrelazadas, caminaron hacía la sala donde había un hermoso decorado.
Joaquín no pudo evitar derramar una que otra lágrima de felicidad, todo era hermoso.
Una mesa para dos, perfectamente adornada, el decorado era refrescante y sutil, digno de un lugar de declaración.
-Mailo, esto es hermoso.- La.voz de del castaño salía bajita, la felicidad era enorme.
(...)
La cena estuvo rica, todo fue perfecto, pero era momento de lo más esperado de la noche.
-Estuvo buena la cena Emi, gracias por está hermosa noche.- Agradeció el castaño.
-Gracias a ti por permite hacerte este pequeño regalo, pero todavía falta una cosa.- Dijo en una voz baja y delicada.
El castaño miraba al chico rizado sin entender nad, todo fue hermoso ¿Qué faltaba más?
-Tú y yo queremos ser como las mariposas, ser libres como ellas, volar a nuestro futuro, Joaco...- Emilio se acercó al castaño sintiendo sus respiraciónes mezclarse. —¿Quieres ser mi novio? Ser mi otra mariposa.-
Joaquin estaba estático, jamás pensó que este momento llegará tan rápido. Sus lágrimas de felicidad no tardaron en llegar.
-¡Si quiero Emi! Si quiero ser tu novio, tu otra mariposa.- Joaco abrazó fuertemente a Emilio, su ahora novio.
El destinó unió a estos dos chicos para que juntos puedan sostenerse, para que no se pierdan en su vuelo, para que los dos puedan volar como las mariposas.
FIN
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MARIPOSAS ¦ ᴇᴍɪʟɪᴀᴄᴏ
Short StoryAmbos jóvenes quieren ser libres, volar cómo las mariposas, pero cada uno quiere ser libre de manera distinta. ✂-------------------------------------------- •Historia corta •Historia de mi propiedad, cualquier parecido a la realidad es mera coincid...