7 White Y Black / N Y White

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-Ya estoy aquí- dijo la joven entrenadora, llegando al restaurante dónde N para variar, la había citado.

-Gracias por venir- no la miró a los ojos por querer evitar que ella lo viera tan rojo como estaba, aún así a pesar de la gorra White lo notó.

-¿Para qué me citaste esta vez?- aunque se hiciera la tonta con eso, ella sabía que era por lo que pasó con ellos en la Cueva Electrorroca -¿Y por qué ahora en un restaurante?-.

-Bueno- ahora la miraba a los ojos -quería hablar sobre lo que pasó en la Cueva Electrorroca- se notaba su nerviosismo.

-Eso lo imaginaba, pero de eso podrías haberme llamado los días posteriores a eso, y no un mes y medio- dijo ella algo enfadada.

-Tienes toda la razón, y también por eso que te agradezco tanto que hayas aceptado venir y no haberme dado plantón aunque me lo merecía- estaba avergonzado -pero ahora que después de hablarlo varias veces con mis hermanas, eh podido sacar el valor para volver a dirigirte la palabra, de verdad perdoname-.

Ella suspiró.

-Ok, ok, te perdono-.

-Gracias no te arrepentirás-.

-Y bien, ¿qué me ibas a decir?-.

-Primero comemos algo y después ya te lo digo-.

-¿Me tomas el pelo, o qué? Para tu información, yo no tengo nada de hambre-.

-Mientes, te he visto combatir en el gimnasio, por muy poco pierdes contra Gerania-.

Ella maldijo en su cabeza.

-Aunque hayas estado apunto de perder, has estado fantástica-.

-¿D~de verdad?- pregunto ella algo nerviosa.

-Sí, tú y tu Zebstrika habéis hecho un trabajo asombroso-.

-Pero aún no soy tan fuerte como Black o como tú-.

-¿Por qué dices eso?-.

-Porqué siempre que lucho con él pierdo siempre, nunca le he ganado aún teniendo la ventaja de tipos-.

-Eso no significa nada- él tomó una de sus manos que había en la mesa -ser más fuerte no significa la victoria o derrota, significa que tus Pokémon te quieren y los tuyos te quieren muchísimo-.

-Disculpen- el mesero atendió -¿Qué quiere la parejita?-.

-¿Cómo?- White desvío la mirada a N y viceversa y los dos se dieron cuenta de que estaba cogidos de la mano, al darse cuenta se separararon -no somos pareja-.

-Oh lo siento-.

Los dos pidieron algo ligero y al terminar se fueron del restaurante.

-Bueno ¿qué ibas a dec~?- ella no pudo terminar porque él le puso un dedo sobre sus labios.

-Vamos- la tomó del brazo y se la llevó bastante lejos de la ciudad.

-N ¿a dónde me llevas?- él la hacía caminar tapandole los ojos con las manos-.

-Shh, ya casi estamos-.

Luego de 5 minutos.

-Ahora te destapó los ojos y te aseguro de que lo que verás te va a encantar-.

N le destapó los ojos y ella al ver el palacio en el que estaban se quedó pasmada.

-Increíble-.

-Este lugar era mi antigua casa, pero por culpa por un accidente tuvimos que dejarla, de vez en cuando vengo a hablar con mis amigos-.

En ese momento varios Pokémon salvajes se les acercaron y en cuanto vieron a N todos lo abrazaron.

Mi viaje por TeseliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora