Entro de nuevo en el supermercado, después de haber trabajado de mañana, ya que hoy tengo turno partido. No es el trabajo de mi vida, pero tengo que llevar dinero a casa. La descerebrada que me tocó por hermana, está embarazada y no para de meterse en problemas.
Mi madre está en la cárcel, después de haber matado a mi padre, por verlo retozando con su mejor amiga. No lo dudó ni un segundo y un día, mientras dormía y nosotros estábamos en casa de unas amigas, aprovechó y lo mató a sangre fría, dejando millones de huellas tras ella.
Así fue como mi hermana gemela y yo, nos vimos viviendo solas, ya que la familia más cercana que teniamos era por parte de mi madre y está en Rusia. Los que tenemos por parte de mi padre, no quisieron saber nada, ya que mis abuelos no vieron con buenos ojos que mi padre se casara con mi madre y no se equivocaron mucho, porque años después, le quitaría la vida de la peor forma.
Me llamo Claudia, tengo 24 años. Soy un chica normal del montón, tengo el pelo rubio, ojos marrones y una bonita figura, pero una vida social inexistente, debido a los problemas que me tengo que enfrentar por culpa de mi hermana Susana. Ahora la última, es que se ha quedado embarazada de un cliente, ya que se metió a prostituta, producido por los vicios que ella tenía y por si eso fuese poco, la han involucraron en un caso de droga por culpa de su chulo. La han cogido con dos kilos de hachís en el coche y mi mundo se ha venido abajo ¿Qué más me puede pasar?...
Un buen día, harta de esta situación me fui a enfrentar yo sola al chulo de mi hermana. Le canté las cuarenta, porque gracias a él, mi hermana estaba en la cárcel y aún encima, en estado y por la pinta que tenía, iba a seguir entre rejas, durante largos años. Necesitaba una gran cantidad de dinero para pagar la fianza y no sé muy bien como ayudarla porque mi sueldo en el supermercado no es para echar cohetes. Al llegar junto a él después de pasar por encima de tres armarios empotrados por fin pude encararme con él. Pero, ¿cuál es mi sorpresa?, cuando me dice que a él también le debe dinero de las drogas que le interceptaron. Con todos estos problemas me daban ganas de suicidarme y quitarme del medio porque es un problema muy gordo para una chica tan corriente y con un trabajo normal como el mío.¿ Cómo iba poder pagarle a toda esa gente y con esa semejante cantidad de dinero, si yo lo que gano en el supermercado apenas me da para vivir?. Así que el chulo para intentar saldar la deuda. Se apiadó de mí o eso quiero pensar. Me dijo que para sacar dinero fácil, podría acostarme con clientes que tuviesen dinero. (Lo que es lo mismo de alto estanding) El tiene sus contactos, pero a mi hermana nunca se los dió, debido al vicio que tenía, porque tenia miedo a que les robase y quedase mal con ellos, porque no era la primera vez que le pasaba.
Tras mucho pensarlo, decido que no me queda otra, si quiero salvar a mi hermana de una mala vida y para darle un futuro mejor a mi sobrino/a, ya que la vida que lleva ahora mismo no es la adecuada para un bebé. Tengo que hacerlo por ellos. Por mucho que me repugne esa vida, lo tendré que valorar, ya que las deudas se están acumulando y no puedo quedarme de brazos cruzados sin hacer nada.
Así que, a pesar de todos mis valores de toda una vida. Creyendo en el amor y deseando encontrar a mi príncipe azul y un buen trabajo como escritora o diseñadora y tendré que desahecerme de todos mis sueños de un plumazo y empezar mi vida como escort. Iré haciendo un diario de cada cita que tenga para darme fuerzas para seguir. Nunca me había imaginado que mi vida diese semejante vuelco. Pero es lo que tengo que hacer si quiero conservar a la última familia que me queda. Con cada historia que vaya reflejando en mi libro en blanco será para recordarme porqué lo hago y darme fuerzas para seguir.
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Diario de una Escort (Incompleta)
RandomYa a la venta en Amazon. En Kindle y kindleunlimited!!!!📚📚📚y tapa blanda. No te quedes sin él. (Historia incompleta) Galya siempre fue una chica normal, con una vida bastante aburrida, al contrario que su hermana Susana, que siempre se metía en l...