Knd para Siempre...

La Casa De La Otra Cuadra

Cargando Misión para los Chicos del Barrio.
Operación : Mansión.
Mansión
Atrae
Negativos
Sentimientos e
Importantes recuerdos
Oprimidos de
Niños

Aún después de tantos años aquella gran mansión le provocaba escalofríos, incluso sabiendo que Padre ya no estaba y que el Sector Z había vuelto.

Al llegar a la reja del frente toco el timbre con algo de nervios, Constance y Lenny habían estado felices de verle, pero eso no aseguraba que David, Ashley y Bruce lo estuvieran.

- Buenas tardes, ¿quién es y con quién desea hablar? - una voz femenina se hizo oir a travez del interfono, sabía que no era ninguna de sus "primas", sonaba más madura.

-Buenas tardes soy Niguel One, quisiera hablar con... Con Ashley -

Tras unos segundos sin respuesta la reja se abrio solo so suficiente para dejarlo entrar, camino algo cohibido por el enorme jardín hasta llegar al recibidor donde una mujer mayor, 50, tal vez 60 años le esperaba.

- Joven One, un placer recibirle, soy Lena, el ama de llaves, permitame escoltarle - dicho aquello la mujer entro a la casa con Niguel siguiéndola, quien pudo notar que el lugar estaba muy cambiado, todos los muebles, alfombras o tapices que creía recordar ya no estaban, suposo que los chicos habrían cambiado todo tras la partida de Padre.

- Puede esperar aquí, ire a informar a la señorita de su presencia - él asintio mientras veía a la mujer alejarse por un pasillo.

La sala era lo que más se parecía a sus recuerdos, los sillones, las pinturas finas en las paredes, las comodas antiguas con floreros y algunas esculturas pequeñas, la gran alfombra guinda, la chimenea, pero sobre ella ya no había un enorme retrato de Padre y sus "hijos" de ojos azules, ahora habia una fotografia, ahora  había cinco adolescentes en ella, pero ya ninguno tenía ojos azules, parecían estar en esa misma sala, Bruce parecia entretenido jugando en la alfombra con Lenny, como si lucharán, mientras que Ashley y Constance parecían tener una guerra de almohadas de un sillón a otro, incluso se podian apreciar pequeños almohadones esparcidos por todo el lugar, David leía un libro desde otro asiento, sin embargo su mirada se notaba puesta sobre sus dos hermanos. Se veian felices.

- Lena tomo la foto, insistio en que alegraría el lugar -

Uno brinco en su lugar al escuchar la voz femenina a sus espaldas, era Ashley, ella aún poseia ojos azules, pero de un tono más oscuro.

- Tenía razón - comento tratando de iniciar una conversación.

- Fue un día después que recuperamos nuestros recuerdos, dijo que no nos había visto así de felices en mucho tiempo -

- Parece alguien dulce -

- Lo es - respondio simplemente mientras se acercaba - ¿Qué haces aquí Uno? -

El chico sabia a que ella conocía el por qué de su visita, pero entendia el por qué preguntaba, antes de responder se vio interrumpido.

- Ashley esa no es manera de tratar a nuestro invitado -

De uno de los muchos pasillos que poseia aquel lugar, apareció David, mucho más alto de lo que lo recordaba, sus ojos eran cafés.

Ashley fruncio el ceño al verlo llegar, David se veía algo ebrio.

- Vaya sorpresa Niguel - se acercó para estrechar su mano.

- Espero no incomodar -

- Espero lo mismo - esa respuesta hizo que Uno se pusiera a la defensiva, ¿qué significa eso?