—Hola tu eres el nuevo?
―Si―respondió el chico con curiosidad por saber quien era esa voz que le había hablado―¿quien eres?
―Perdóname por no haberme presentado antes mi nombre es Rachel, Rachel Love―respondió una voz suave, delicada y tierna, la cual poseía un cuerpo envidiable por cualquier otra chica del campus―¿Y tu nombre es?
El chico no podía escuchar bien sus pensamientos a causa de la belleza de la joven. Solo podía observar los ojos cafés oscuro de la chica, y un cabello marrón claro, el cual se podía observar que era suave y sedoso, un tono de piel un poco bronceado.
―¿Estas ahí?―pregunto la chica.
―Disculpa estaba pensando en unos asuntos de la casa―respondió el joven un poco nervioso―me llamo Steve Cortés.
―Y ya hiciste amigos Steve.
―No, aun no, creo―en ese momento pensó en Chloe, la chica de los libros―aun no he tenido la suerte.
―Bueno ya tienes una amiga en la que puedes confiar plenamente.
El chico aun estaba pensando en esa chica con la que se había encontrado en la mañana. Aunque halla empezado mal tenia las esperanzas de que todo podía mejorar.
―Estas bien?
―ah, si, estoy bien, solo es que algo me esta poniendo nervioso.
―Aun estas pensado en lo de tu casa.
―Si, es eso.
―Bueno, pues cuando te sientas libre para hablar aquí voy a estar.
Steve sintió curiosidad por saber mas acerca de esta chica tan confiada y tan amistosa.
*****
―Y como te fue con el chico nuevo?―pregunto una voz femenina con un toque de fragilidad al expresarse.
―Por lo que parece es tierno y dulce―respondió Rachel―pero un poco distraído, pero aun así es hermoso.
―Osea lo vas a hacer?
―Creo que si.
―Pero he oído que habrán mas chicas tratando de ganarse su confianza ¿que vas a hacer con respecto a eso?
―Bueno, supongo que tratare de arreglármelas como pueda.
―Eres demasiada confiada.
―Solo tengo fe.
―Bueno, te deseo feliz cacería.
*****
El resto del día Steve solo se paso aburrido escuchando a los profesores dar su discurso de presentación, y sin poder ver ni a Chloe ni a su nueva amiga Rachel solo esperaba a que el día se acabara.
Dieron las 3:30 y por fin se podría ir a casa y descansar de ese tan cansado día que había tenido.
*****
―Como te fue en tu día?―le pregunta el padre de Steve.
―Muy ajetreado, ¿y a ustedes?
―Muy bien gracias.
Steve sube corriendo a su habitación ya que solo tenia dos palabras en su mente: bañarse y dormir.
Y así lo hizo pero no sin antes pensar en esas dos chicas que había conocido anteriormente Chloe y Rachel.
Pero ahora solo estaba desando que llegase el nuevo día y haciéndose una pregunta ¿les gustare?