Amores Divididos

Capitulo 8

Me quede admirando la escena un poco mas de tiempo. La verdad es que Clarke nunca me había hablado de que le gustase algún chico, y menos ninguno de los gemelos. Estaba absorta en mis pensamientos cuando note una presencia a mi costado. Gire un poco la vista y por el rabillo del ojo pude ver a... ¡GEORGE!

-¿¡Que coj**es estas haciendo aquí?!- pregunte alarmada.

-¿Como que qué estoy haciendo aquí?- pregunto confundido.

-Creia que tu eras el que estaba con Clarke- dije volviendo la vista al lago.

Sentia un nudo en la garganta, mis ojos se humedecían y mi barbilla comenzaba a temblar. No podía ser, él nunca haría eso.

-Hijo de...- oi como decía George dirigiéndose hacia Fred y Clarke.

Me aparte de esa escena. No podía seguir contemplándola más. Volvi a mi cuarto el cual estaba vacio. Supuse que Lincoln y Octavia habrían ido a otro lugar. Me tumbe en la cama. No se si pasaron minutos u horas, pero al cabo de un rato oi unos golpes en la puerta. Habia dejado de llorar hacia un rato pero la almohada seguía humeda de todas las lagrimas que mis ojos habían sido capaces de expulsar.

-¿Quien es?- pregunte intentando no llorar de nuevo.

-¿Podemos hablar?- dijo Fred desde el otro lado de la puerta.

-¡No quiero verte!- dije levantándome y yendo enfurecida hacia la puerta- ¡VETE!-

Después de aquello mis piernas no me sostuvieron y caí al lado de la puerta. Empecé a llorar de nuevo. Paso media hora y de repente la puerta se abrió. George y Octavia entraron y se pusieron en cuclillas enfrente mio.

-¿Como estas?- pregunto Octavia.

-A ti que te parece- dije recalcando que estaba tirada en el suelo llorando.

-No ha sido una buena pregunta- dijo George en bajo- Mira lo que tienes que saber es que Fred esta muy arrepentido y que Clarke también. Ninguno de los dos quiso hacerte eso-.

-Y aun asi lo hicieron- dije recordando la escena del lago.

-Si quieres hablar con ellos están abajo en la sala esperando a que salgas- dijo Octavia.

-Eso es lo que voy a hacer- dije levantándome decidida.

Baje las escaleras con la ira corriendo por mis venas. Mi enfado era mas grande que mi propia persona. Llegue abajo y los vi a los dos sentados en el sillón en el cual solo hacia unas horas yo me encontraba besando a Fred. Tenia muy claro lo que iba a hacer y no tenia ningún miedo. Me puse en frente de ambos y sin titubear dije las siguientes palabras.

-Tu y yo tendremos que hablar sobre lo que ha pasado- dije mirando a Clarke.

Ella solo asintió con la cabeza.

-Y tu y yo,- dije refiriéndome a Fred- hemos terminado-.