La muerte de mi hermana

CAPÍTULO 2🧡Despedida

A la salida del instituto el hombre ya no estaba y Celia decidió no darle más importancia. Mónica y ella caminaron por las calles hasta llegar a sus casas. Cuando Celia llegó su madre la esperaba fuera con una maleta.
-¡Celia! Te estaba esperando.
-¿Porque?
-Bueno, me han llamado desde Londres y me han aceptado en el trabajo. Voy a subir estas maletas al coche haz la tuya q nos vamos mañana por la tarde.
-Enhorabuena, mamá. Pero necesito despedirme de mis amigas. Haré mañana la maleta.
-Si, claro. Tu hermana llegará pronto pero hará lo mismo.
Celia sonrió y se fue.
La verdad es que ella quería quedarse, pero ese trabajo lo era todo para su madre y era una gran oportunidad.
Celia entró corriendo y cogió el teléfono del salón para llamar a Mónica.
-¿Si?
-Hola, Moni soy yo, Celia.
-Ah,hola ¿qué pasa?
-Nos vamos a Londres, pero no de vacaciones, nos vamos a vivir allí.
-¿QUÉ?
-Lo que oyes Moni.
-Dios mío, necesito despedirme.
-Si y yo. ¿Vienes a mi casa?
-Por supuesto.
Celia colgó el teléfono y una lágrima se le derramó por su sonrojada mejilla.
Al poco tiempo alguien picó a la puerta. Celia abrió la puerta y se encontró con Mónica. Ambas se abrazaron y Mónica no se contuvo, empezó a llorar. Celia al ver a su amiga llorando le abrazó más fuerte indicándole que podía desahogarse en sus hombros.
Tiempo después, mientras ellas veían una película, alguien tocó al timbre.
Celia abrió y allí en la puerta estaba aquel hombre.
-¿Quién es usted?
El hombre no respondió y se fue.
-¿Qué ha sido eso? Celia, ¿lo conoces?
-No. Pero me lleva mirando desde hoy por la mañana en la parada.
-¿Qué?
-Si y lo que no sé es como sabe donde vivo.
-Deberías llamar a la policía.
-No gracias, es un tonto que me sigue nada más.
Mónica se rió y Celia cerró la puerta.
Al día siguiente Celia se levantó y bajó las escaleras para desayunar. En la mesa ya estaban su madre y su hermana pequeña.
-Buenos días.
-Hola Celia.
-Desayuna hija que hoy es un día largo.
-Ya.
Después del desayuno Celia fue a su habitación para hacer la maleta.
Cuando la acabó fue a la habitación de su hermana y la ayudó a hacer la maleta. Luego subieron las maletas al coche y se fueron al aeropuerto.
Allí cogieron el avión y se marcharon.