Una novia para Katsuki | Kacchako

V

Bakugou, luego de, exactamente 2 minutos con 34 segundos decidió decir algo ante el silencio de Ochako.

—Oye, no tengo todo el día, ¿Estás bien?—Miro un tanto nervioso a la chica, está estaba frente a él, sin decir nada.

—Espera.—Ochako dijo algo, Bakugou se alivio de eso.—Espera.—Repitio.—Espera, espera, espera, espera.—Extendió su brazo derecho, dando distancia entre ambos.—¿E-Es una clase de broma?

El rubio pareció ofendido, Ochako abochornada.

—Creí haber sido claro. Estoy siendo serio ante esto, Uraraka.—Se acercó, pero la castaña no le permitió ningún paso más.

—E-Espera, por... Por favor...—La castaña sentía las orejas calientes, no quería ni siquiera ver la cara de Bakugou.—Esta es... La primera vez que alguien me dice que le gustó... ¿P-Puedes darme algo de tiempo...?

—Depende.—Esa respuesta no sé la esperaba la de rostro redondo.

—¿D-Depende?, ¿De qué?—Confundida elevó su rostro hacía él.

—¿Por qué mejor no sólo sales conmigo en vez de pensar si te gustó o no?

—¿Eh?—Ochako con comprendió para nada esa lógica.

—Si te doy tiempo para pensarlo seguramente digas que no, porque no somos cercanos y porque te doy miedo, además de otros motivos, como mi personalidad. En vez de pensar en eso, sólo inténtalo, no creo que pierdas nada.—Elocuente hablo, casi como si hubiera practicado decir aquello.

Ochako no veía fallas a su lógica.

Y al mismo tiempo, el rubio había usado una lógica irrefutable para que ella no se negara a estar con él. Era casi como suplicar que lo intentarán.

Uraraka no evitó reír a carcajadas. El rubio no supo si eso era bueno o malo. Lo que si, es que estaba avergonzado.

—¿Qué se supone que significa esa risa?—La encontraba adorable, no lo negaba, pero no era el momento.

—L-Lo siento.—Ochako medito la situación, reír no estuvo bien.—Es sólo que, no esperaba algo como esto de... Ti, Bakugou-kun.

—¿Qué mierda significa eso?

—¡N-Nada malo!—Uraraka movió sus manos.—S-Sólo que... Nunca nadie se me había declarado, en realidad jamás he salido con nadie, así que, estoy algo nerviosa, n-no se que decir, l-lo siento...

El rubio aprecio ese hermoso rostro más rosado de lo normal, yendo hacía un rojo precioso.

—...—Bakugou pareció nervioso, no sabía que decir, y recordó a su madre dándole ánimos. Ciertamente aborrecía la idea de que su madre haya sido la primera en decirle que fuera por Ochako, pero...—¡Uraraka!

—¿S-Si?—Se sintió sobresaltada.

—Sobre... Tú respuesta...—El rubio gruñó, no le salían las respuestas. No quería una negativa, pero no tampoco obligarla...

—Esta bien, Bakugou-kun.—Ella interrumpió todos sus pensamientos.

—¿Eh?

—Me... Me gustaría intentar salir con Bakugou-kun.—Apenada, nerviosa, y con su mejor sonrisa dió una reverencia.—Por favor cuida de mi a partir de ahora, Bakugou-kun.

El rubio lloraría si no fuera un hombre que se respetaba. Aún así, se peñisco bruscamente la mejilla.

—¿Este es un puto sueño?—Cuestiono sin quitar sus ojos de Ochako.

—¡E-Es la realidad, Bakugou-kun, por favor detente!—Al ver que el rubio dejo los peñiscos y comenzó a golpearse, se preocupó, bastante.

Luego de unos minutos donde el silencio reino. La nueva pareja parecía nerviosa.

Ambos eran primerizos a fin de cuentas. Así que no sabían muy bien que hacer.

—U-Uraraka.—Bakugou aclaro su garganta.—Te acompaño a casa.

—¿A-Ah?—La castaña quiso negarse, pero podía notar como el rubio había tomado mucho valor para decir eso. Por lo cual, tan sólo asintió, con una pequeña sonrisa apenada.—Claro, Bakugou-kun.

El rubio la tomo de la mano.

—Puedes decirme Katsuki... Si quieres.—Murmuro, Ochako enrojecio.

—¡E-Eso sería...!—Le parecía muy vergonzoso el siquiera imaginarlo. Pero a su mente vino algo.—¿Puedo llamarte Kacchan?

El Bakugou tuvo un escalofrío por todo el cuerpo.

—Siempre he querido usarlo, pues Deku-kun lo dice cuando se dirige a ti.—Esa sonrisa brillante y pura lo hizo dudar.

No quería decirle que no, pero...

—¿Puedo llamarte Ochako?—Al ver ese rostro rojo cual tomate, supo que podía ganar algo.—Si puedo llamarte Ochako, puedes decirme Kacchan.

Vio conflicto en Uraraka, quién medito durante todo el camino a su casa. En ningún momento se soltaron las manos, y el rubio disfrutaba bastante los pequeños quejidos de la castaña más baja.

—¡Esta bien!—Al llegar al hogar de la castaña, lo dijo.—¡P-Pu... Puedes decirme Ochako, Kacchan!

El rubio tuvo muchos sentimientos encontrados.

"Kacchan" se oía hermoso desde su boca, pero ese estúpido apodo venía de parte de esa basura con pecas, causándole asco.

—Entonces, nos vemos mañana, Ochako.—Dando un gesto dió media vuelta.

—¡Ah, Ba-Kacchan, espera!

Al voltear vio como ella le mostró su celular, uno bastante... Anticuado.

—Tu... Número...—Sonrojada cubrió un poco su rostro con su mano izquierda, mientras con la derecha extendía su celular.—Quiero... estar en contacto contigo, de ahora en adelante.

Ese ataque había sido sumamente efectivo. ¿Su ternura tenía límite?, Bakugou comenzaba a plantearse la idea de escribir un libro sobre la belleza de esa joven, aún así, su rostro era inexpresivo total.

—Claro.—Soltó, sacando su celular de su bolsillo, intercambiando así número con Ochako.

Su novia.

—¡...!—Esos grandes ojos marrones miraron con tanta ilusión su teléfono donde estaba él de contacto, que por un segundo pensó que estaría bien morir en ese precisó segundo.—¡Gracias!

Y esa sonrisa.

—No hay problema, nos vemos, puedes enviarme un mensaje cuando quieras.—Lo dijo tranquilo, neutral, pero por dentro estaba muriendo de amor, así que se fue con prisa para así poder ir a su cuarto a gritarle a su almohada que lo logro.

Y así lo hizo, al despedirse de Ochako, fue directo a casa, pero una vibración lo detuvo.

🌸Ochako🌸

Ten una buena noche, Kacchan🌙.

Bien...

Definitivamente no le molestaría morir ahora.

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Fin

Nonono, mentira kdkdkdkd

Continúa, recién empieza esto, nos vemos pasado mañana [actualizo día por medio] ♥