Hoy, ten miedo de mí

Capítulo IV

Y aquí estamos en el entrenamiento, todo sería perfecto de no ser por el pequeño detalle de que… ¡Ahí está! ¡Ahí está esa mocosa!, Ha venido a apoyarte, solo se oyen los: ¡Vamos Kiminobu! ¡Tú puedes! Que niña mas boba, incluso las admiradoras de Rukawa me parecen intelectuales a comparación de ella.

Todos te comienzan a avergonzar con comentarios como: “Quién lo diría Kogure, tan seriecito que te veías”, “Bien escondidito te lo tenías Kogure” o “Ya preséntala, cuatro ojos, mira que si no alguien te la puedo robar.

“Doho” es lo único que pude decir al oír el último comentario dicho por Sakuragui, pero siento que alguien me mira y al voltear me esta mirando Rukawa.

—Jajaja perdón, ya se que esa es tu frase, pero la situación lo ameritaba—y le sonrio francamente, él se acerca y me dice al oído.

—Es tan obvio lo que sientes, si no quieres que se dé cuanta deberías disimular mejor—O_O .

Me dejó helado con ese comentario. ¡Se ha dado cuenta y lo peor es que en ese preciso momento nos mira Kogure! ¿El también se habrá dado cuenta?

Pero me saca de mis pensamientos una vocecita chillona que dice: ¡Kimi tu puedes anota por mí! 

Pero que ser mas simple, sin ideas y predecible. ¿Cómo hago que se calle? Mmmmmm ¡ya sé! El fuego se combate con más fuego, luego entonces una niña boba se combate con más niñas bobas. Discretamente, me acerco a las admiradoras de Rukawa.

—Van a dejar que esa esa las opaque? ¿Acaso ustedes no llegaron primero? Saben, hace un momento cuando Rukawa se acerco a decirme algo… ¿lo notaron?—mueven la cabeza en signo de afirmación— Me dijo que se sentía muy desanimado, que ya nadie lo animaba, que las extrañaba y que posiblemente dejaría el basketball ¿¡Van a permitir eso!? 

Mueven la cabeza frenéticamente es signo de negación.

—Entonces… ¡Ánimo muchachas! ¡Apoyen a Rukawa con todo sus fuerzas! Y no quiero ver que la tonta esa logra gritar mas fuerte que ustedes.

Y después de eso se oía en todo la cancha un: "¡¡¡VAMOS RUKAWA TU PUEDES!!!"

Con una fuerza que me recordó los partidos finales jajajajaja definitivamente no se oía la voz de Mika.

Un Rukawa molesto se acercó y al notar lo que había hecho me miro, con su mirada más fría me dijo: “Doho” Yo lo mire y le sonreí.

—Vamos Rukawa no te molestes que acaso no te gusta todo ese apoyo—él me miró, y al notar mi plan cínico y vil sonrío, soltamos la carcajada jajajajajaja.

De repente sentimos la mirada de todo el equipo atónito, en primer lugar por ver a Rukawa reír de una forma tan abierta, y en segundo lugar por ver que yo había logrado lo inimaginable, y al ver a todos tan atentos de nuevo reímos.

Pero pude notar que Rukawa miró a Sakuragui para ver su reacción, el solo fingió indiferencia, pero yo, conocedor de ese tipo tácticas, no me pudo engañar, estaba celoso. Y cuando te busque con la mirada ahí estabas mirándome con algo de asombroso.

Pero al notar que te miraba me sonreíste y esa Mika se acercó y te tomo del brazo para decirte algo al oído, tú te sonrojaste y yo en ese momento, descarté la posibilidad, definitivamente tú jamás sentirías algo por mí, tú querías a esa tonta, y yo... yo no soy quién para interferir, pero no puede evitar que mi corazón se rompa en mil pedazos.

Porque ¿sabes? y si
no lo sabes no importa.
Yo sé lo que siento
yo sé lo que cortan
después unos labios,
esos labios rojos y afilados.
Y estos puños que tiemblan
de rabia cuando estás contento
y que tiemblan
de muerte si alguien
se acercara a ti.