Hoy, ten miedo de mí

Capítulo VI

—Jajajaja tu realmente no me conoces, yo tomo lo que quiero cuando lo quiero y en este momento te quiero a tí. ¿O es que acaso no te has dado cuenta de lo mucho que te deseo? ¡A claro! Como has estado tan ocupado con la mocosa, no te habías enterado de mis sentimientos hacia tí.

...O me vuelva una estrella
y te estreche en mis rayos
y todo por no hacerme
un poco de caso
ten miedo de mayo
y ten miedo de mí.

—No llames "mocosa" a Mika ella es una persona muy querida para mí—y fue entonces que enloquecí , no podía soportar oír su nombre en tus labios, oír que la querías mas que a mí.

Con la mayor de la rudezas te besé, entré a tu boca a la fuerza y encimé mi cuerpo sobre el tuyo, mordí tus labios y te dije al oído:

—Pues lo siento Kimi, pero esta noche definitivamente serás mío—y te arranque el pantalón, te quité la ropa interior, y quedaste completamente desnudo debajo mío.

Comencé a besar tu cuello, tu abdomen, y mordí con desesperación tus tetillas. Quiero que me sientas, quiero dejar marcas en tu cuerpo. Quiero que nunca olvides que yo fui el primero en tocarte.

Tratas con desesperación de librarte, pero definitivamente soy más fuerte que tú, además tengo más mañas en esto del forcejeo. Y con una sola mano logro someterte y atrapar tus dos manos sobre tu cabeza, con mi mano libre recorro tu cuerpo y te exploro en forma total. Al fin puedo librarme de esta necesidad de tocarte.

Llego a tu entrepierna, comienzo a masajear tu miembro, comienzas a temblar y a gritarme que me detenga, pero no pienso hacerlo, ahora que he llegado tan lejos. Tu miembro comienza a endurecer, pero tu te resistes a disfrutar

—¿Por qué haces las cosas más difíciles Kimi? Es mejor que te dejes llevar. ¿O es que acaso no te gusta?. Tú cuerpo dice otra cosa—y sonrío en forma maliciosa, al ver que eh logrado que se encuentre completamente erecto.

Es entonces que no puedo más, necesito que seas mío, con mi mano libre me quito la camisa, y abro el cierre de mi pantalón. Mi urgencia es tal, que ni siquiera me lo quitaré, y cuando estoy apunto de culminar lo que tanto deseo, te oigo...

—Claro que me gusta, pero siempre soñé que mi primera vez sería con alguien que me amara— y comienzas a llorar…

¡Pero qué estoy haciendo! No soporto verte llorar y te dejo libre, me quito de encima tuyo y me dejo caer de rodillas en el suelo.

Porque no vaya a ser
que cansado de verte
me meta en tus brazos
para poseerte
y te arranque las ropas
y te bese los pies.

Y de rodillas al lado de tu cama, esa cama en la que por poco te tomo a la fuerza, comienzo a llorar como nunca antes lo había hecho. Tapo mi cara con mis manos, no quiero que me veas, no quiero que ver el odio en tu rostro, no quiero.

Pero debes de saber, debes de saber lo que en realidad siento, no quiero que pienses que es solo deseo lo que me trajo hasta aquí, y con la voz entrecortado comienzo a decirte:

—Yo… Yo te amo, te amo desde el primer momento en que te ví, yo se que no tengo derecho a sentir esto que siento por ti, pero no puedo arrancarme este sentimiento. De verdad lo intenté, pero no puedo, no puedo, y el simple hecho de tenerte cerca me lastima. Sé que, diga lo que diga, no tengo derecho a pedir tu perdón, me iré y me alejaré de tu vida para siempre. Perdóname… Perdóname por favor.

Y comienzo a llorar de nuevo, no tengo el valor de mirarte a la cara, pero tu dices nada. Ahora ¡como me gustaría simplemente morir!

Pero siento un abrazo muy calido, que me reconforta y trata de calmar mi dolor. ¡Eres tú! ¡Me estas abrazando! Pero ¿por qué? ¿Que acaso no me odias por lo que te hice? ¿Por traicionar tu amistad?

No quiero preguntarte y solo lloro en tu hombro. Cuando me encuentro más calmado. Me alejas con delicadeza de tu pecho, y me sonríes. ¡Me sonríes a mí! ¡Que acaso no me tienes miedo!

...y te llame mi diosa
y no pueda mirarte de frente
y te diga llorando después:
"Por favor tenme miedo
tiembla mucho de miedo mujer
porque no puede ser...

—Yo también te amo, pero nunca pensé que llegaras a corresponderme, y es que soy tan invisible para todos, que jamás soñé que alguien tan lindo como tú se fijaría en mí— Pero qué estas diciendo, acaso es un sueño.

—Me amas?—Te pregunto con una incredulidad que no puedo ocultar. ¿Cómo un ser tan puro como tyu, ama a un ser tan maligno como yo? ¿Cómo? O es que acaso ¿te quieres vengar de mí, burlándote de lo que siento? Mi mirada se ensombrece y al notarlo tu simplemente me dices:

—Claro que te me amo, pero veo que no me crees. Tengo que demostrártelo—y sin más me estas besando, al principio es un beso tímido, limpio, puro, así como tú.

Y yo tardo en reaccionar, pero al sentir tus labios te tomo de la nuca y profundizo el beso, sentir mi lengua recorriendo tu boca. Es exquisito y lo es mucho más cuando siento tu lengua en la mía, veo que te sonrojas y te ves de lo más delicioso.

Mi cuerpo vuelve a reaccionar, así que termino el beso rápidamente porque, si continuo, no podré detenerme de nuevo. Me miras y veo que has notado lo que me pasa, te levantas, me extiendes la mano, yo me levanto también, me llevas hacia tu cama y me susurras al oído.

—Tómame—yo no sé que decir.

—No quiero que te sientas forzado Kimi, yo puedo esperar.

GuerreraFlor: ¡Por favor! ¿A quién tratas de engañar!
Mitsuito: ¡No me mires así! Claro que si puedo esperar, solo necesito una bucha de agua a menos 10 C.