Lazos (en Pausa)

Capítulo 3

Sin muchas respuestas

-¿En serio Jericho? ¿Un traje formal para ir a una fiesta infantil? - Preguntó Wanda mientras terminaba de planchar su cabello y veía a su novio por el espejo.

-Hablando de eso...-Dijo el hombre rascando su nuca.

-Ni se te ocurra, no podemos cancelarle a Nat.

-No planeaba eso, puedo pasar a dejarte y después recogerte, no creo que dure mucho tiempo.

-No es agradable que cambies los planes de un segundo a otro, tenemos este compromiso desde hace dos semanas - Dijo Wanda con tono enojado.

-Tus planes. -Corrigió. -Natasha extendió esa invitación a ti, además esto fue de improvisto entre unos colegas y yo, estarás bien sin mi.

-No me creo que sigas pensando que Natasha te odia.

-Ese odio no es sólo de Natasha, créeme que sé perfectamente cómo nos miran todos. - Confesó Jericho poniéndose de cuclillas frente a ella.

-Jericho, no lo tomes así, la gente extraña me has enseñado a no tomarla en cuenta y bueno mis amigos no te conocen tanto como para convivir como lo hacen conmigo.

-Wanda, lo digo para que te enteres, pero sinceramente no me importa y tampoco tengo interés de ser amigo de tus amigos después de cómo me han tratado.

-Ellos me importan, y al menos yo jamás he visto que te falten al respeto. - Dijo Wanda mirándolo extrañada.

-Son tus amigos y los respeto, sólo no quiero más allá de esa relación cordial y sabes que debes entenderlo. - Explicó el hombre.

-Sabes, tomare un taxi, es mejor.

-Claro, mi amor. - Respondió Jericho levantándose y dándole un beso en la cabeza a Wanda para alistarse por su cuenta.

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-¡Hola! ¿Y tu novio? Steve esta ya en la barbacoa con Sam y Bucky por si tienes hambre o si quieres algo de beber dime y te lo preparo.

-Gracias Nat, te aceptaré la bebida, Jericho no pudo venir tenía asuntos pendientes.

-Vale vamos... Oh ahí esta tu ahijado, ¡James!

No muy lejos de donde ambas mujeres estaban, llegó corriendo un pequeño niño pelirrojo en un traje de buzo de Paw Patrol luciendo una sonrisa desdentada.

-¿Me recuerdas? -Preguntó la sokoviana.

-Si, eres tía Wanda. - Respondió James y saltó sin pensarlo a los brazos de la mujer.

-Woo, James, lo de mojarse era sólo para los niños, te traeré una toalla Wands.

-Está bien. - Respondió Wanda bajando con cuidado a James quien corrió de nuevo hacía la piscina. - Por los dibujos de la invitación sabía que sería una fiesta así.

-Pues te queda muy bien ese look. - Dijo Nat en aprobación al short de mezclilla y la playera blanca de tirantes gruesos de Wanda.

-¿Y si nos sentamos en esas sillas? Así me secaré con el sol.

-¿Segura que no quieres una toalla?

-Estoy bien, descuida. Ten, espero le guste. - Dijo Wanda dándole el regalo que estaba en su brazo y que aparentemente el niño no vio.

-Gracias, vamos.

Después de saludar a todos y comer algunos bocadillos, Nat y Wanda se sentaron en unas sillas inclinables cerca de la piscina mientras la fiesta estaba en su apogeo.