Sufrimiento

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Querido dirario: 

No, no me lo ponen nada fácil. Debo de librar esta batalla diaria y social yo sola. La victoria constará de derrotas. Pero lo lograré. Les ganaré y se arrepentirán de lo que hicieron.

Verán sobre mi lo que ellos mismos crearon a base de linchamientos, y lo que verán será una persona nueva y perfecta.

Hoy él vino y se arrastró como un gusano. De nuevo le dije que no. 

"Me arrepiento de haberte dejado, de verdad te sigo queriendo", dijo.

De lo que me alegro es de que me mostrase su verdadera cara y me dejase.

Puede que yo lo extrañe de igual manera, y si fuese débil ahora caería de nuevo. 

Pero no será así.

Diario del pequeño corazón apuñaladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora