El secreto de Astrid [Pausado]

Bienvenido

No hable mas del tema con mi madre, no me gustaba hacerlo 

Antes de salir de casa tome mi abrigo gris y me dirigí a la casa de Diego, su casa no estaba tan lejos de la mía, eran unas cuantas cuadras , por ello no me moleste en ir caminando 

Una vez delante de su casa, verifique que mi ropa y cabello estuvieran bien, luego de asegurarme como 5 veces que todo estuviera en orden, decidí tocar el timbre

Enseguida me abrió la Señora Rutherford  

-Querida que gusto que estés aquí, acabamos de regresar del aeropuerto

-¿Que?, pero Diego me dijo que su hermano llegaría mas tarde  

-Tal vez se confundió, o te confundiste, por que Naim llego a las 6:00 am 

No podía haberme equivocado, estaba segura de que Diego me había dicho que a las 8:00 am llegaría su hermano. Tal vez Diego se había confundido, aunque no lo creía, el había estado algo emocionado por el regreso de su hermano, como para equivocarse de hora 

-Si, tal vez eso ocurrió - respondí gentilmente entrando en la casa 

-Diego esta en la sala - oí que me dijo antes de entrar a la cocina 

Me dirigí a la sala y lo encontré sentado en uno de los sillones, jugando con su celular 

Era el único en la sala, supuse que su hermano estaba muy cansado, como para estar ahí 

Llegue por detrás de el y tape sus ojos 

-¿Quien soy?- dije distorsionado un poco la voz, aunque estaba segura de que el sabia que era yo 

-¿Joselin? 

Le di un pequeño golpe en la cabeza, Joselin antes era mi amiga, pero tuvimos algunos inconvenientes y ya no nos hablábamos 

Sabia que Diego había dicho su nombre a propósito ya que el conocía perfectamente lo que había ocurrido entre nosotras  

-Jajaja, que gracioso- dije sentándome a su lado 

-Oye que paso con la llegada de tu hermano 

-¿A que te refieres?- dijo sin despagar la vista de su celular 

-Pues... me dijiste que llegaría a las 8:00 am y tu mamá me dijo que llego a las 6:00 am 

-¡Ah!, si- dejo su teléfono a un lado y se volteo hacia mí - tal vez me confundí - dijo jugando con sus manos 

-No me mientas Diego 

-No te estoy mintiendo 

-Siempre que me mientes juegas con tus manos, justo como estas haciendo ahora 

Rápidamente dejo de jugar con sus manos y se levanto del sillón

-¿Por que me mentiste?- dije parándome junto a el

-No, no te mentí, bueno es que...   

-Es que ¿que?-

-No quiero que te involucres con mi hermano 

-¿Que?, ¿de que hablas?

-Es que no lo entenderías 

-No estoy entendiéndote ahora  

-Y nunca lo harás- dicho esto se marcho 

Pero que acababa de pasar, los pensamientos en mi cabeza, estaban revueltos, no sabia que pensar sobre la actitud de Diego 

Me deje caer literalmente en el sillón, todavía algo confundida por la  reacción de Diego 

Cundo vi que no era la única persona en la sala