Yo no soy tu fan!!! (Makia )

Capítulo 2.21

Maratón 4/5

Natalia.-

Estos días han sido algo raros... mejor dicho Hailee anda algo rara. Está más cariñosa y sobreprotectora que nunca y no me quejo, que mi novia me consienta y tenga detalles lindos conmigo es bonito pero siento que hay algo más detrás de eso.

  Cada vez que tengo una reunión con Makis me pide acompañarme, y si no puede ir me envía mensajes cada diez minutos o me llama para preguntarme si ya terminamos... A veces puede ser algo sofocante.

Por otro lado esta Makis , ella es otra que me está volviendo loca. Juro que estoy tratando de luchar contra este amor que tengo hacia ella pero cada vez que trato de alejarme sale con alguna locura que me lo hace imposible.

Hace unos días me llego un arreglo enorme de rosas, primero pensé que había sido Hailee pero al leer la tarjeta me di cuenta que estaba equivocada.

"Sé que la forma de demostrar mi amor es bastante cliché, pero no existe nada en este mundo para mostrarte lo mucho que te amo. Te puedo llenar de flores, de detalles, te puedo regalar mis mejores canciones... todo por una oportunidad para demostrarte que nuestro destino es estar juntas y amarnos por el resto de nuestras vidas, aunque yo preferiría que fuera por toda la eternidad. M.D.A."

En ese momento estaba tan feliz por sus palabras que no me había dado cuenta que Hailee había llegado a la oficina con Cata. Si no fuera por mi mejor amiga que dijo que era un regalo de Jay, me hubiera quedado congelada por no saber que decir.

Aunque esa no fue la única vez que Makis me sorprendió, un día saliendo de la disquera me dijo por favor la acompañe a comer, para evitar problemas le avise a Hailee que no lo tomó con mucha gracia; sin embargo, lo entendía, no era lindo saber que tu novia va a comer con su ex. Pero Mak seguía teniendo una especie de poder sobre mí que no podía decirle que no. Makis había reservado en el edificio más alto de L.A. casualidad? No lo creo... 

- Te acuerdas de este sitio? - Cómo podía olvidar el día que me pidió dar un paso más en nuestra relación y vivir juntas? Sólo asentí ligeramente mientras le daba una media sonrisa. – Lo siento, esta vez no pude cocinar yo, pero preparé el postre antes de nuestra reunión – en su mirada veía cierta ilusión. Y hasta ese momento no me di cuenta de la bolsa que cargaba – Espero no se haya arruinado.

  - Makis, yo... sabes que sólo podemos... 

- Ser amigas, lo tengo claro. – Y esa mirada de ilusión fue sustituida por una mueca de desilusión.

  Durante la cena trataba de ser algo cortante o mantener una línea clara entre nosotras, pero sus ocurrencias, sus chistes algo tontos y tiernos al mismo tiempo hacían que empiece a relajarme y sólo disfrutar el poco tiempo que podía compartir con ella. Era como si nunca hubiera pasado nada malo entre nosotras, podíamos hablar de nuestros recuerdos juntas sin sentirnos incómodas, contarnos alguna tontería, o incluso mantener silencios mientras nos mirábamos a los ojos y eso ya era suficiente.

Aún tenía algo de curiosidad porque a pesar de ser su equipo de marketing y planificación para su nuevo álbum, se negaba a enseñarnos el video. Y aproveche que la noche iba bastante bien para conseguir algo que permita saciar a mi fanática interior. ¿Qué? Es cierto que habíamos terminado, pero todo el tiempo que estuvimos juntas bastó para volverme su fan número uno. Igual no sirvió de nada porque trataba de esquivar el tema o me decía que era una desesperada y debía esperar la sorpresa como todos los demás. Qué la única manera que me lo diga primera es si volvía con ella.

- Un beso al menos? – Sugirió

- Makis ... - le dije con cierto reproche.

  Fue así que pasamos directo al postre. Alto, no piensen mal.