Todo Por Amor

Capítulo 5

Advertencia: Ninguna.

Historia basada en un video musical.

°
°
°

"A veces solo te hace falta, una persona para sonreír"

-Anónimo—

°
°
°

Kristoff caminaba como león enjaulado en su propia habitación algo le inquietaba notoriamente ¿Tal vez el comentario de Elena? No, no podría ser eso ¿O sí? Es decir ¿Era importante no estar enamorado en esos momentos? Tenía veintitrés años acaso ¿No le faltaba muchas cosas por explorar? Tenía una carrera como consejero académico en la preparatoria misma donde estaban sus mejores amigos Hans y Elena.

También poseía un buen departamento, se divertía a veces los fines de semana como cualquier joven adulto, un trabajo estable ¿Qué más le faltaba en su vida? Amor, esas cuatro palabras todavía faltaban en su vida según opiniones de Elena y tenía razón poseía todo menos eso, no es como si nunca hubiese tenido novia las tuvo en sus años de adolescencia hasta su ingreso a la universidad. Han pasado cinco años desde entonces Kristoff tenía presente que algún día conocería a alguien y esa persona podría ser su amor verdadero.

Recordó especialmente a la persona que le dijo aquellas palabras, fue una niña de once años y cabello pelirrojo recogido en dos trenzas Kristoff iniciaba apenas a la Universidad y se encontraba desanimado por una ruptura amorosa ahí fue entonces que aquella niña se acerco a él con su voz parlanchina preguntándole porque estaba tan decaído, el joven sin saber la razón le conto. La niña sonrió y antes de marcharse dijo:

—El destino te tiene preparado algo mejor, no lo apresures—Dijo como si de una adulta se tratara—Estoy segura de ello algún día encontraras a tu amor verdadero.

Esas palabras se quedaron en su mente y por muchos años trato de encontrar a aquella niña existían muchas con el cabello pelirrojo pero los ojos azules de ella reflejaban la más pura y desinteresada bondad, nunca logro encontrarla muchas veces se preguntaba dónde estaría ¿Iría a la escuela? ¿Se mudaría a otro lugar? Kristoff sabía que probablemente nunca volvería a verla pero albergaba una esperanza de que así fuera. Algo exasperado se recostó en su sillón exageradamente grande, paso su mano por su cara como si eso fuera a relajarlo ¿Qué debía ser? ¿Tener una cita a ciegas como Elena le aconsejo? No, no podría estar tan desesperado, hizo nota mental de no pasar demasiado tiempo con su excéntrica amiga, Hans tenía razón Elena podría ser demasiado entrometida a veces. Con la única chica que había salido era precisamente Elena pero pese a las apariencias nunca podría mirarla con otros ojos, siempre la vería como una hermana a la quien cuidar.

Posiblemente por el hecho de conocer lo que le había ocurrido en la preparatoria, si él lo sabía y solo el porqué Elena nunca podría confesarle a Hans que fue víctima de una violación ni que desconfió de el al verle interesado en Elsa. No, Elena siempre fue muy cerrada en ocultarlo, esquivaba las preguntas de ambos cuando comenzaban a preguntar sobre su pasado y si en un principio no les intereso saber la razón Kristoff tuvo sospechas nadie evitaba hablar sobre su vida a menos de haber vivido algo terrible ¿Cierto? Duro tiempo observándola buscando alguna pista no encontró nada extraño en el momento hasta que un joven profesor le toco sin querer la cintura al intentar agarrar unas copias, la castaña dio un salto retrocediendo mientras miraba al joven con miedo y desesperación.

Eso no fue normal y entonces se dio cuenta, Elena no le permitía a nadie tocarla solamente Hans y el podía hacerlo, y no fue hasta que ella misma se lo confeso con la mirada apagada pudo entenderlo.