Asaltacunas «Vhope»

tres

Hoseok observó a cada uno de sus amigos, notó a Seokjin morderse los labios, su rostro demasiado rojo parecía que en cualquier momento explotaría.

—Bien —suspiró resignado —Ya… pueden reírse si es que lo desean —Apenas y finalizó todos sus amigos explotaron en fuertes carcajadas, notó a Jimin lagrimear y sostenerse por Namjoon que al igual algunas lágrimas se escaparon de sus ojos por la risa.

—Hoseok —jadeó Seokjin a duras penas, quien con gran esfuerzo tomó aire para seguir viviendo —¿Estas bromeando? Eso no puede ser cierto.

—Ojalá Jin, ojalá y todo fuera una broma de mal gusto.

—Es que… —Jimin se secó algunas lágrimas —No puedo creer que el chico que tanto hablaste tenga dieciséis es hilarante.

—Lo más gracioso es el hecho de que Hoseok buscaba una relación con un hombre maduro —Namjoon soltó otra carcajada.

—¡Nam, ya basta! —Jimin regañó a su novio y al verlo reír ocasionó que soltara otra carcajada.

—Bien, bien —Seokjin suspiró —Estoy bien —Levantó los brazos una vez que se recuperó, su estómago dolía —Qué paso amiguito con lo de “me conseguiré a alguien maduro” —imitó Seokjin con una voz muy chillona.

Era consciente que terminaría pasando esto si comentaba a sus amigos sobre el asunto, claro, que él también se avergonzaba de la situación. Recordó muy bien las palabras que dijo cuando dio por finalizada su última relación hace ya un tiempo: Me conseguiré un hombre maduro, ¡no más juegos de niños! Tal vez ese plan se fue directo a la basura porque ahora solo podía pensar en ese niño que lo hacía derretirse por completo.

—Deberías mandar tu caso a esos programas de televisión que ve mi madre, sería un éxito —bromeó Jimin.

—¿Quién diría que nuestro a Hoseok-ssi le iban este tipo de cosas? —siguió Namjoon molestándolo también. La pareja de insoportables, así los denominó Hoseok.

—¿Tanto querías un novio virgen que ahora te conviertes en un asaltacunas? 

—¡Cállense estúpidos! —El pelirrojo se cruzó de brazos con enojo evidente, su rostro estaba hirviendo, casi era visible el vapor escapándose por sus orejas.

—Sí, paren —regañó Seokjin a ambos —Dijiste que te conseguirías un sugar daddy ¿cambio de planes? —levantó una ceja con picardía —Nunca espere eso de ti, estoy en shock total. 

—¿A qué rayos te refieres Jin? —Hoseok realmente se sorprendió por las palabras de su amigo —No lo entienden, Taehyung no se ve acorde a su edad. Esa es la razón.

—¿Cómo así? —preguntó Namjoon. Al fin los tres pararon de hacer bromas, Hoseok agradeció internamente a los cielos. Los conocía lo suficiente como para saber que se burlarían, por mucho tiempo de su bochornosa situación sentimental.

—Bien, véanlo con sus propios ojos —Hoseok dejó su teléfono frente a ellos sobre la mesa. Con los brazos cruzados, sus cejas casi juntándose por tanto fruncir el entrecejo. En una ocasión —hace varias semanas atrás— el pelirrojo aprovechó la oportunidad y tomó una foto de Taehyung. 

Los tres intercambiaron miradas, no pudieron evitar quedarse boquiabiertos por la sorpresa. Hoseok sonrió victorioso por la reacción de cada uno de sus amigos. Ahora el que los encaraba con burla era él.

—¿Qué diablos les dan a nuestros niños de ahora? —exasperó Seokjin, levantó el teléfono de Hoseok y lo coloco a escasos centímetros de su rostro —¡Mierda! No luce para nada como un chico de dieciséis —lloriqueó —Si todos los niños de ahora son de esta manera, nunca imaginé decir esto en mi vida, pero —hizo una pausa dramática —Me dieron ganas de regresar a la preparatoria de nuevo. 

—No puedo creerlo, yo aún tenía mis mejillas de bebé a su edad —Jimin hizo una mueca de disgusto.

—Qué dices aun sigues siendo un bebé —Namjoon respondió a su novio con un tono infantil totalmente enternecido, el rostro de Jimin rojo como un tomate en segundos.

—No comiencen, ahórrenme el trauma —El mayor los cortos antes de que comiencen a ser empalagosos como solían ser cada vez que salían —¿Hoseok por qué invitamos a estos dos babosos? 

El pelirrojo ignoró al ataque de asco del hyung más dramático de todos —¡Ven! Ahora no pueden seguir juzgándome. El chico no se ve acorde a su edad. Creo que cualquiera se encontraría en una situación igual que la mía, ¿no se me puede considerar un pedófilo por eso o sí?

—Por un lado, tienes razón —opinó Seokjin un tanto incomodo por la pareja a su lado que no dejaban de susurrarse cosas al oido y soltar risitas cómplices. Ya debería estar acostumbrado a eso, pero igual era raro —Como sea, tal vez el juez disminuya tu condena con eso, es un buen argumento.

Hoseok se alarmó —No estoy considerando salir con él —aclaró —Es guapo eso es todo, tampoco es como si pudiera ser un crimen sentirse atraído.

—¡Suenas como todo un pedófilo! —gritó Jin lo suficiente fuerte para llamar la atención de varias personas.

El pelirrojo pateó a su amigo, ya se estaba arrepintiendo de haber abierto la boca —Deja de gritar —en un susurro Hoseok tapó con ambas manos la boca de su amigo —Solo, no sé qué hacer. Me gusta mucho, ya saben como soy cuando me gusta alguien.

—Sí, deprimente —respondió Jimin metiéndose de nuevo a la conversación.

Hoseok rodó los ojos.

—No veo el problema de que sea menor de edad —Namjoon llamó la atención de los tres, dejándolos bastante sorprendidos. Se aclaró la garganta —Es lo que pienso, tienes una ventaja. Admitámoslo, no parece ser ningún chico de dieciséis años. 

Jin asintió y sonrió emocionado —¡Exacto! Solo deben aclarar las cosas, la edad es lo de menos eso es lo que pienso. Si el sentimiento es mutuo, claro.

—No quiero terminar como un idiota de nuevo —Hoseok apoyó su frente sobre la mesa —Y si solo es un adolescente hormonal con ganas de ganar experiencia.

Seokjin rodó los ojos, odiaba la negatividad del pelirrojo en ocasiones —Vamos, digamos que tú tienes más experiencia. En especial con idiotas, sabrás sus verdaderas intenciones al pasar el tiempo —suspiró —Deja que las cosas fluyan y date una oportunidad de nuevo, aunque sea un menor de edad —reprimió una carcajada —Al menos pueden conocerse más, quien sabe ser amigos. Te vendría bien para un alma vieja como tú.

Hoseok bufó. Ser amigos no sonaba mal, al menos así podría mirar su hermoso rostro de cerca y perderse en esa sonrisa tan bonita.

Cualquiera querría perderse en su sonrisa, cjau soy muy débil por este hombre.