Capítulo 10

17 2 20
                                    

 
  "Sin una familia, el hombre, solo en        el mundo, tiembla de frío."

André Maurois

Al ser la más chica de mi familia, creo y desde mi punto de vista, no fue nada fácil. Puede ser que los más pequeños de la casa sean los más mimados, pero no siempre es así.

De pequeña recuerdo ser una personita muy caprichosa y demasiado charlatana, no había nada que pudiera frenarme. Hablaba y hablaba, ¡hasta las maestras de mi jardín se cansaban! Cada vez que mi mamá iba a recogerme al jardín, le decían que hablaba mucho y que nada podía callarme.

Nunca me gustó el silencio.

Sí, era charlatana y caprichosa, ah y mezquina también, pero era muy feliz y soñadora. Me encantaba soñar en grande, imaginaba que en un futuro sería detective, maestra, ya cuando comencé a crecer un poquito más soñaba con ser empresaria... Muchos sueños.

Pero, no voy a hablar de mí. Creo que me fui de tema.

Como decía, ser la más chica de mi familia, no fue muy fácil que digamos.

Nunca me gustó ver las peleas de mi familia. Tampoco me gusta pelear con mi familia. Siempre hemos tenido muuuchos problemas y peleas. Como toda familia.

Pero, al ser la más pequeña, todo el peso me lo llevaba yo; ¿por qué? Porque quería. Cada vez que había una pelea, o discusión mejor dicho, yo iba y trataba de calmar las cosas; hoy en día los sigo haciendo.
Al no gustarme ver como discutian, yo iba y trataba de levantarles el ánimo.

Yo siempre fui una persona callada en ese sentido, que irónico ¿no?
Siempre dejé que me pasaran por encima, aunque a veces me defendía. Pero siempre fui una persona tranquila y callada.
Me podían decir de todo, que yo no te iba a decir nada.

Con mi familia fui así.

Pero con la persona que más diferencias tuve, y tengo, fue con mi mamá. No se dan una idea la cantidad de veces que peleamos, era a cada rato una discusión.

Mi mamá al ser una persona creyente tuvo muchas diferencias con mis hermanos, conmigo y mi papá. La pasamos muy mal desde chicos.

Era una persona que siempre quiso imponer orden, ser la que mandaba en casa y nunca, pero nunca, le podías llevar la contra. Ufff, ¡el peor error que uno podía cometer!

Y más aún, si eras chico, ah no; 'Sos un chico, no sabes nada de la vida, lo que te falta por aprender.'

Esas situaciones eran las que más detestaba, ¿en serio? ¿por ser joven no puedo opinar de la vida porque me falta experiencia? Uno siendo joven ya tiene experiencia, no hace falta tener cuarenta años para opinar de la vida, tener argumento propio.

Es una persona retrograda. Es una persona que en su mente piensa que todo lo que hace está bien, que todo lo que dice está bien, porque su Dios lo quiere así y que se yo.

Si nosotros sufrimos, no me quiero imaginar lo que sufrió mi papá con ella...

Pero bien, ella quizá es y fue así, pero es mi mamá. Siempre que la necesite, estuvo ahí.
Sí, soy una persona que me quejo mucho, quizá siempre choque con mi mamá por mi carácter.

Ahora de grande puede ser que sigamos teniendo esos choques, pero pude entender que ella no siempre tiene la culpa. Con mis hermanos a pesar de ser todos tranquilos, tenemos nuestro carácter. No somos de demostrarlo, es hasta que nos sacan de nuestras casillas.
Como familia siempre hemos chocado, pero con los demás no. Salvo mi papá, el chocaba con todos.

Pero aún así, entendi como es ella, de chica por ahí las cosas que hacía eran a propósito, y obvio que eso está mal.
Mami te quiero jaja.

Y si hablo de mi familia en general... Mmm todos somos medios locos, a pesar de nuestras diferencias, siempre nos apoyamos los unos a los otros. Somos medios secotes para demostrar lo que sentimos, no somos de abrazarnos y decirnos que nos queremos y esas cosas. Pero, si uno necesita ayuda, ahí estamos.

La verdad que no puedo quejarme de la familia que me tocó, sacando a algunos de mis parientes.

Pero sí, la verdad que puedo decirles que a pesar de las diferencias que tenemos, al final de día ellos están ahí, y no saben lo que me cuesta despegarme de ellos... Las charlas con el mate, las risas... Son ellos. No me quejo.

Pero, una situación que pasó hace casi cinco años, pudo cambiar un poco las cosas entre nosotros. A pesar de esa situación, tratamos de levantarnos y seguir nuestro camino.

Esa situación que deseo haber estado ahí para cambiarla, para que las cosas sigan como antes, para que nada hubiera pasado.

Esa situación tan dolorosa la cual a mi me cambió muchísimo, me afectó de tal manera que a veces pienso que no podré levantarme y seguir mi camino...

CanalizarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora