La verdad

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Abrió la puerta, como una película la puerta se abría lentamente dejando ver al figura que al principio por la luz estaba oscuro y se iba aclarando. Pero al final de abrir solamente era el amor de su adolescencia y padre de sus hijos. 

-Haz...llegado temprano - Fueron las únicas  palabras que salieron de su boca, miro de arriba abajo, vestía simplemente con unos jeans negros y una camisa blanca con los primeros dos botones abiertos.  

Ella simplemente vestía unas calzas negras y una polera rosa que le llegaba debajo de los muslos.

-Te dije que pasaría alrededor del mediodía - Se apoyo en el marco de la puerta viéndose aun mas sensual que de costumbre. 

-Si... pero no pensé que vendrías tan a la hora. 

-Necesito mi celular para poder trabajar, ademas de que tu sabes que hay un asunto por el cual hablar y no podemos esperar. 

-Iré a buscar tu teléfono. 

-¿Acaso no me vas a dejar pasar? - Alzo la ceja, frunciendo el ceño levemente. 

-No he ordenado nada, esta todo tirado no es agradable atender visitas así.

-Ino, estuvimos juntos en la universidad - La miro directo a los ojos - Se como es tu desorden y lo soporte en esa época ahora no me inmuta. 

-Es-esta bien  - Se corrió a una lado y dejo pasar al azabache, el se dirigio inmediatamente al sillón donde se dejo caer y se volvió a cruzar de brazos. Ella solamente se acerco a el sin cerrar la puerta de su casa.

-¿Y bien?. 

-Aquí esta tu teléfono - Le paso el celular que se encontraba sobre la mesa de vidrio, no se sentó porque esperaba que Sasuke se fuera pronto. 

-Muchas gracias - Lo recibió y lo guardo en su bolsillo - Pero tu sabes que esto no es todo. 

-¿Que quieres de mi Sasuke? - No se quería alterar, pero miraba en su habitación sus dos niños que se encontraban jugando entre ellos y se aterro de lo que podía pasar de estar conversación. 

-¿De quien son tus hijos? - No se inmuto al decir esas palabras que aceleraban el corazón de la rubia. 

-Son míos y de Sai. Nosotros somos sus padres. 

-Pero Sai es estéril. 

-En ocaciones los milagros pueden existir - Dijo intentando mirar a otro lado. 

-No mientras Ino que eres muy mala para eso - Elevo el tono de voz, asustando un poco a la rubia. 

-Bien... yo soy la madre de esos niños - Elevo su tono de voz dando autoridad, era su casa y eran sus hijos y nada lo iba a cambiar... nada - Y eso es lo que importa, cuando quede embarazada de estos milagros no tenían un padre biológico porque huyo al día siguiente y aunque intente por una vez decirle la verdad solo para poder sentirme bien conmigo misma y no tener ese sentimiento profundo de dolor en el pecho el simplemente evito mis llamadas, se cambio a vivir a china con su pareja así que no tienen padre biológico solo tienen a su padre Sai que esta con ellos desde que nacieron y los quiere como nadie mas los va a querer. ¿Te quedo claro? o te lo tengo que explicar en otro idioma. 

-Admites que yo soy el padre de tus hijos. 

-Solo fuiste un donante de esperma, no mas que eso. 

-¡Ino por la mierda! - Se levanto del sofá y se acerco a la rubia - ¡Esos niños que están ahí son mis hijos! 

-¡Si! - Sus lagrimas comenzaron a brotar inconscientemente - ¡Esos niños son nuestros hijos!. 

-Ino... - Se escucho una voz de la entrada de su casa. 


No Me Separaran De El [Saiino][Sasuino][Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora