Al llegar a las bebidas nos encontramos con que no había nadie atendiendo.
-¡Disculpa! ¿¡Quien atiende aquí!?-Grité lo más fuere que pude al aire para intentar que alguien se acerque.
-¡Oh! ¡Lo siento, creo que el encargado de fue!-Escuché una voz reconocida a mis espaldas y volteé exhalada entre el ruido.
Lo miré, el me miró y hubo un silencio entre nosotros repleto de música rock.
-¡¿GREG?!-Pregunté sorprendida por fin reaccionando.
-¿Perla?-Se notó la misma sorpresa en su expresión.
Nos acercamos un poco más para poder hablar sin tanto ruido.
-Wow, no imagine que las vería en un lugar así.-Dijo rascándose el cuello mientras miraba al suelo.-Por cierto, hola Garnet, ¿como has estado?
-Excelente.-Dijo Garnet con su característica calma.
-Y bien, ¿qué las trae por aquí?-Preguntó mientras se dirigía atrás de la la mesa donde se encontraba la hielera con las bebidas.
-Pues...ah...mmm...-No sabía que decirle ya que Steven era la razón por la que vinimos.
Steven POV
-¡YUJU, este si que es un gran concierto!-Le dije a Amatista con entusiasmo mientras saltábamos.
-¡Si que lo es amigo!-Me respondió enérgica.-¡Pero ya me está dando algo de sed! ¿¡Qué te parece si vamos por una bebida!?-Al decir eso yo asentí y comenzamos a abrirnos camino hacia el puesto de bebidas.
A unos metros logré distinguir a Perla junto con Garnet en el puesto a donde nos dirigíamos.
-Mira Amatista, son las chicas.-Le dije con una sonrisa mientras tomaba su mano y corría hacia ellas.-¡Hey! ¡Chicas!-Ellas distinguieron mi voz y voltearon a verme dejando un espacio entre ellas que dejaba ver al hombre que me había ayudado anteriormente, me estremecí y comencé a caminar soltando a amatista.
-Vaya, ¿y ese cambio de velocidad?-Yo solo la miré, traté de sonreír y seguí caminado con ella a mi lado.
Al llegar con ellas el hombre se entusiasmó y me sonrió.
-¡Quien lo diría, si llegaste!-Yo solo sonreí y salude.
-Me di un momento para relajarme y disfrutar de la música.-El después de un momento miró alrededor.
-¡Dios! Donde están mis modales mis modales. Ellas son...-Antes de que terminará lo interrumpí.
-Garnet, Amatista y Perla, si las conozco.-Me miró confundido y después miró a Garnet.
-Hay mucho de que hablar Greg.-Dijo Garnet mientras limpiaba sus lentes.
Cuando finalizó el concierto Greg nos dirigió a su van y el se colocó en el asiento del piloto dejándome a mi como copiloto y a las chicas en la parte de atrás.
-Bien, comencemos por lo primero.-Dijo Greg masajeando sus sienes.-No siquiera se tú nombre amigo.-Yo lo miré con algo de pena.
-Me...me llamo Steven.-Ahí fue cuando dejó de masajear su cabeza y me miró sorprendido para después dirigir su mirada a las chicas.
-Sabemos que esto es algo difícil pero antes de que hagas alguna pregunta necesitamos que escuches.-El solo empezó a derramar lágrimas sin expresión alguna.
-Dime que no es verdad.-Las chicas solo bajaron la mirada y su llanto se volvió doloroso.-Nunca pensé que este día llegaría. Yo nunca me prepare para esto.-Trato de recuperar la compostura y me miró.
Sin avisarme el solo me abrazó mientras seguía llorando. Yo me quede paralizado por un momento y después de unos segundos le correspondí al abrazo y empecé a llorar junto con el.
Así pasamos unos momentos hasta que el decidió romper el abrazo y me vio directamente a los ojos.
-Debemos de ponernos al día...hijo.-Yo me estremecí con esa palabra, viniendo de una figura paterna era mucho para digerir.
-Eso creo...-Me arme de valor y continué.-Papá.-
Las chicas me miraron tiernamente mientras sonreían, me acerqué a Perla y la abracé.
-Creo que tú y Greg deberían de ir a la casa a descansar un poco.-Dijo Perla abrazándome.
-¿Hablas de la cabaña de Rose?-Preguntó Greg algo alterado.
-Si Gre...Papá, ¿por qué?-Pregunté corrigiéndome a mi mismo.
-Pues, no se si me encuentre listo para...-Hizo una pausa tratando de contener las lágrimas.-No estoy listo para volver ahí.
Yo suspire algo triste y lo miré.
-¿Qué te parece si, vamos y estacionas la Van afuera así nos ponemos al día y cuando llegue la hora de dormir yo iré adentro de la casa y tú duermes dentro de la camioneta.-El me miró con una sonrisa y puso su mano en mi hombro.
-Está bien hijo.-Después de eso arrancamos la camioneta y nos encaminamos a la playa.
Un rato pasó antes de que llegáramos y de la nada Garnet recibió una llamada.
-Oh, si, claro, por supuesto que iremos a la fiesta de Jazmín.-En ese momento miró a las chicas y ellas asintieron al mismo tiempo.-Perfecto, nos vemos ahí, adiós.
-¿Quien era Garnet?-Pregunté curioso.
-Una amiga cumplió años y debemos de visitarla.-Se dirigió a papá diciendo.-Necesitamos que nos dejes en Funland.-Yo me confundí por un segundo y después papá como si nada se detuvo donde le indicó Garnet.
-Mucha suerte allá, en el cumpleaños.-Garnet, Amatista y Perla lo miraron mientras salían de la camioneta.
-Gracias Greg.-Dijo Garnet.
-Ten por seguro que estaremos bien Greg.-Dijo Perla
Amatista solo se acercó a la ventana del conductor y abrazó a papá como pudo.-Gracias...-Dijo ella para después soltarlo y encaminarse a la entrada con las demás.
-Nos vemos Steven.-Garnet me dijo mientras agitaba su mano en el aire en señal de despedida, las demás hicieron lo mismo y esperaron a que nos fuéramos.
-Vaya, ¿qué fue eso?-Pregunté a papá mientras nos alejábamos retomando nuestra ruta.
-Cosas de gemas hijo.-Yo solo inhalé fuertemente y me maldije por no notarlo antes.-Pensé que ya lo sabias.-Me miró extrañado.
-Creo que aún no me acostumbro, eso es todo.-Lo miré devuelta, le regalé una sonrisa y el la correspondió.-Deberíamos de escuchar algo de música antes de llegar.-Sugerí.
-¡¡Oh!! Esto te va a encantar, soy yo cuando era joven.-Sacó un disco y lo puso en el reproductor.
Era una melodía tranquila con una guitarra que tenía muchos filtros y dos voces que se preguntaban qué podían hacer por el otro.
-Tú madre tenía la mejor voz del mundo sin duda alguna.-Dijo mi padre con algunas lágrimas en los ojos.
-Sin duda alguna.-Le respondí mientras mis ojos comenzaron a lagrimar, la canción terminó.
Llegamos a la cabaña y así como nos lo propusimos, nos pusimos al día, contábamos cosas graciosas, tristes e incluso personales. Cuando la noche cayó nosotros no queríamos detenernos.
-Hijo, me parece que dentro de la cabaña se encuentra mi antiguo asador, podríamos sacarlo y cocinar unos hotdogs para tener un poco de luz.-Dijo levantándose de su silla y encaminándose a la casa, yo lo seguí curioso. Al pasar las escaleras y llegar a la entrada se congeló.
-¿Estás bien, papá?-Le pregunté poniendo mi mano sobre su hombro, el se volteó a verme y después agachó su mirada.
-Aun no puedo entrar, no estoy listo.-Suspiró y se apartó de la puerta.-¿Podrías ir tú? No está muy escondido, debajo de la barra de la cocina lo vas a encontrar.-Yo asentí y le sonreí con una emoción nueva para mi.-Regreso rápido.
Al entrar me acerqué a la cocina mientras pensaba: Pobre de mi padre, después de tantos años en los que no vio a mamá un día como si nada se entera de que está muerta.
De repente un sonido fuerte en la entrada de la casa me saca de mis pensamientos y volteó rápidamente.
-¡Papá!-Ví que dos tipos encapuchados se lo estaban llevando a rastras mientras el luchaba como podía, a pesar de todo era inútil ya que lo superaban en número, fuerza y tamaño.
Corrí hasta la puerta y la abrí mientras veía como los tipos bajaban a mi padre por las escaleras de forma nada delicada.
Continuará...
Coño al parecer nadie la está leyendo, si hay alguien que si lo haga pues espero que haya disfrutado el capítulo de hoy y que espere ansioso por el quinto!
Puede que sea una serie algo larga ya que quiero hacerla lo más detallada posible y además que tenga una transición suave en cómo se conocen los personajes.
