siénteme ー chanin.

xv.

Dos semanas después.

Jeongin tenía que reconocer que las visitas diarias que hacía en el instituto donde trabajaba Minho, no eran por su primo ni una mera casualidad del destino.

Había estado visitando el lugar con la intención de encontrarse siempre a Christopher y lo lograba con tal éxito. A pesar de que sólo podía acompañar al alfa a la salida y cruzar pocas palabras, aún así no le molestaba. Por alguna razón que reconocía que no intentaba descifrar, el aroma cautivador del mayor, calmaba a su ansioso omega por verlo. Incluso los pequeños roces y apretones en el brazo eran un bálsamo personal. Sin embargo, estaba consiente que cada día que pasaba, su omega se volvía más exigente y le pedía que el contacto fuese más seguido y algo mejor que su mano prendida del antebrazo de Christopher. Necesitaba abrazarlo y sentir su característico olor oculto en su cuello.

— Eso sería extraño y fuera de mí — murmuró para si durante el receso, terminando un dibujo que el paisaje de la universidad lo había inspirado a hacer.

Y pensaba seriamente que desde que conoció a Christopher, no había vuelto a ser el mismo. Él jamás hubiera tomado demasiada confianza con un alfa, mucho menos lo hubiera buscado para estar a su lado y deleitarse con su presencia. Ese no era Jeongin.

— ¿Por qué cambie? — se preguntó en un susurro.

La respuesta estaba frente a sus narices, no obstante, su terquedad la nublaba y la hacía difícil de ver. No podía reconocer aquello que por tantos años evitó. No, no podía.

Cerró su bloc de dibujos con brusquedad, casi odio. Su mente divagando en recordar si había alguna tarea o trabajo en el que pudiera trabajar para distraerse a si mismo lo suficiente para dejar de lado aquella desagradable lucha interna y realidad. Pero pronto recordó que ese día no tenía nada en específico que lo distrajera. El día sería largo, al menos hasta que se librara de sus horas en la universidad.

Tal y como había pasado en los días anteriores, Jeongin se encaminó de nuevo a la escuela. Ingresó como de costumbre y subió la escalera. A esa hora finalizaba la jornada de clases de Christopher así que podría verlo.

La risa fuerte de alguien lo hizo alzar la mirada. Unos metros delante de él, recién saliendo del salón donde Christopher daba clases, vio salir a Felix junto a dos chicos, un omega y un alfa, a los que había visto una vez pero no recordaba sus nombres. Incluso recordaba haberlos visto en compañía de un omega menor y cacheton.

Bajó la mirada intentando pasar desapercibido por ellos, sobre todo por Felix (a quien miraba por primera vez en esas semanas). Pero parecían demasiado distraídos como para notar al omega que se ocultaba de ellos, por lo que Jeongin podía observarlos sin temor a ser descubierto, viendo como el alfa mayor tomaba de la cintura al omega de gran sonrisa y tras unas palabras (que no podía entender) le guiñaba un ojo. Sospechaba que el chico coquetearía así con cualquier omega que se le cruzara en el camino. Era el tipo de persona que detestaba.

Apuró su paso y esperó a que los últimos alumnos salieran mientras el aroma a eucalipto y frambuesa lo cautivaba.

Se removió ansioso hasta que vio su oportunidad de entrar y estar a solas con el alfa.

Lo miró guardando sus cosas en su maletín. Estaba seguro que pronto se marcharía y apenas tendría tiempo para preguntarle como le había ido durante el día. Razón por la cual se vió a si mismo pensando en una forma para pasar más tiempo a su lado, una excusa que lo atara a él.

Christopher se había vuelto necesario en su vida, no sólo para mantener a su omega tranquilo, sino también como inspiración para sus proyectos. El alfa lo había inspirado lo suficiente para finalizar muchas de sus obras (muchas de las cuales antes no tenía protagonista). Jeongin siempre que pensaba en eso se avergonzaba, parecía colegiala enamorada.

— Jeongin, buenas tardes.

La voz del mayor lo sacó al instante de sus pensamientos.

Sonrió, aún sabiendo que él no podría verlo.

— Buenas tardes, Hyung, ¿Qué tal el día de hoy?.

— Oh, excelente. Lix vino a ayudarme; bueno su ayuda es solo una excusa — su sonrisa hizo sonreír a Jeongin, quién se animó a acercarse unos pasos más a él.

— ¿Excusa?

— Digamos que a Felix le gusta un omega — casi al instante, la imagen del omega de gran sonrisa apareció en su mente —. Bien, ya debo irme. Mi hermano me debe de estar esperando. Nos vemos mañana, Jeongin.

El menor comenzó a maquinar una excusa para retenerlo por más tiempo. Pero con cada paso que daba, su desesperacion crecía y su mente trabajaba más rápido.

Hasta que, segundos antes de cruzar la puerta, lo tomó del brazo.

— Jeongin...

— ¿Le molestaría enseñarme a leer en braille?

Pronto se dió cuenta, al ver la cara del mayor, que su pregunta había sido demasiado extraña e inusual. Él ya tenía a su primo, quien podría enseñarle.

Sin embargo, el alfa rió suavemente y tomó su mano con delicadeza para separarla de su brazo.

— Mañana a esta hora, se puntual, Jeongin.

El omega simplemente sonrió, viendo al mayor alejarse y sus rubios rizos rebotando al caminar con la elegancia que sólo Christopher Bang tenía.

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Hey guys, espero que hoy hayan tenido un buen día hoy, yo lo tuve ksjdfhgk, he estado demasiado ocupado by the way.

Necesito contar esto jksdhfg, si tienen iPhone posta, nunca dejen que se llene la memoria al punto de no poder ni entrar a WhatsApp porque eso lleva al celular a un estado que te da alto ataque de pánico, conocido como "white screen of death", literal, no enciende porque se queda trabado en el logo de apple, pero funciona totalmente e incluso se descarga, se queda literalmente trabado por horas ahre, solo no dejen que pase eso, no sean como yo y dejen a su celular con buena cantidad de memoria libre o solo expandan la memoria ahre, ahora tengo que reparar mi celular con un programa en la PC y si no funciona, ingresar a mi cuenta apple desde un ordenador y restaurar todo, osea, perder todo lo que haya subido a la nube y lo que quedó en el celular, que tragedia jahsgdhjs chao gente espero actualizar pronto ahREee.

—sebastián.