4° Pollo a la plancha

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—Que hermoso pollito, mira su colita, quien esté dentro de ese pollo tiene que ser una gran persona —Yoongi soltó un suspiro exagerado, Jungkook no lo entendía.

—¿Qué tiene que ver su culo de felpa con que sea una gran persona? —Se burló, comiendo de buen humor, se había convencido de que el pollo a la plancha era saludable porque venía con ensalada.

—No entiendes, lo nuestro es especial, atragántate —Yoongi le frunció el ceño, casi había terminado de comer y disfrutaba sus últimos bocados observando al hiperactivo espécimen en la puerta del restaurante, esta vez no se le escaparía.

—Si esto no estuviera bueno, te lo tiraría en la cabeza —Masculló Jungkook con la boca llena.

Yoongi se sentó derecho, mirando a Jungkook con curiosidad, él era el que siempre le decía que se consiguiera pareja.

—¿No deberías estar emocionado? Es la primera vez que me gusta alguien desde Seokjin.

—Eso fue cuando tenías diez —Jungkook pensaba que su mejor amigo no tenía sentido.

—Él fue mi primer amor —Yoongi lo miró con gravedad.

—Él es tu primo, hyung... —Jungkook le señaló obvio, a punto de reírse.

—Por eso ya no es mi amor —Murmuró Yoongi, cortando el ultimo trozo de pollo en su plato.

—¡Hyung! — Reprochó Jungkook.

—¡Yo no sabía que era mi primo! —Saltó Yoongi exaltado.

—¡Eso no! ¡Ya no está el maldito pollo! —Jungkook soltó un grito de frustración y Yoongi solo se quedó mirando la puerta.

Se negó a darle una ojeada al resto del restaurante que los miraban con extrañeza.

Maldita sea.

TU POLLITO •ym•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora