TU POLLITO •ym•

8° Pan con pollo

Yoongi se limpió con la servilleta en cuanto acabó su segundo pan con pollo, viendo con cierta gracia como Jungkook iba por el tercero, y según él, el ultimo.
—Hermano, la palabra idiota la inventaron para ti —Dijo entre mordidas el menor.
—cállate, no ayudas —Refunfuñó Yoongi, tratando de no mirar el restaurante que estaba cruzando la calle, aunque pese a sus esfuerzos, podía ver con su vista periférica una sombra amarilla moviéndose animadamente.

—Deberías reclamar el copyright de idiota, ya sabes, te harías rico solo por existir —Se burló Jungkook, recibiendo el bendito karma instantáneo. Yoongi esperó pacientemente a que Jungkook dejara de ahogarse con un pedazo de pan.

—¿Si quiera estás escuchando? —Yoongi susurró, dándose cuenta que el mesero parecía estar a punto de echarlos de la pequeña cafetería.
—Por supuesto, por eso te estoy insultando.
—No sé por qué te cuento esto a ti —Yoongi volteó disimuladamente para ver a Jimin en la esquina, preguntándose cuanto más duraría su castigo. Las cosas fueron bastante bien. Pensó sonriendo. Tal como Yoongi sospechó, Jimin era el amor de su vida.

Jungkook rodo los ojos como si estuviera escuchando sus pensamientos.
—Porque subí tres kilos en una semana para que tú conquistes al pollito de la esquina. Me debes chismes ardientes.

Le dio mordiscos pequeños a su infinito pan con pollo ¿Cuánto tiempo llevaba comiéndose ese pan? Yoongi suspiró e ignoró a su mejor amigo en cuanto este decidió guardar las bolsitas de azúcar y cremas sobrantes en sus bolsillos.
—Eso suena terrible —Dijo en cambio.
—Es más patético de lo que suena —Murmuró Jungkook por lo bajo.
—¡Jungkook!
—Está bien, que no se te alboroten las plumas ¿Cuál es el problema con que te invite a su casa? ¿No es tu lindo novio o algo así?
—Aun no lo es, hemos salido un par de veces —Yoongi jugaba con la servilleta destrozándola en pequeños pedacitos y haciéndola bolitas. El camarero le echó otra mirada a su mesa.
—Van lento pero seguro —Jungkook había acabado de comerse el pan, por fin.
—Nos mensajeamos todo el tiempo —Yoongi comenzó a sonreír al recordar todas las cosas que había hablado en los textos, Jimin y él se entendían muy bien y tenían muchas cosas en común.
—Está perfecto —Una mueca extrañada en el rostro del menor.
—Hablamos desde la tarde, hasta el día siguiente.
—Eso....Bueno, son cursis pero ni modo.

Yoongi sonrió al ver por fin que Jungkook le prestaba atención y se acomodó en su asiento como un cachorro emocionado.
—Tenemos muchas fotos juntos, me presentó a su mejor amigo el otro día, oh también conozco a su hermana y...
—Wow wow, detente ahí señor de los pollos, creí que iban lento —Ambos recibieron una mirada fulminante del camarero. La voz de Jungkook alcanzaba escalas un poquito altas.

—Estamos yendo lento —Susurró Yoongi confundido.
—Hyung, acabas de describir una relación de al menos un mes —Dijo Jungkook con paciencia, repentinamente sintiendo que le hablaba a un niño de seis años.
—No entiendo
—¡Idiota! Es. Muy. rápido —Jungkook decidió que no tendría niños.
—Pero, es como si nos conociéramos de toda la vida —Jimin seguía bailando en la esquina y el camarero seguía mirándolos irritado, uno ajeno a su importante conversación y el otro demasiado enfocado en ella.

—¡Se conocen hace cuatro días y su primera cita fue ayer!

—Somos compatibles.

—Bien, tu ganas. No hay nada extraño o apresurado en su relación. ¿Cuál es el problema con ir a su casa a almorzar?

—No es solo un almuerzo y... Trátame bonito que Jimin es amigo de aquel cuya mayonesa te podría llevar a prisión.

—¡No es menor de edad! —Carraspeó antes de añadir a regañadientes —Ese no es el punto, hyung, dime ¿No es un almuerzo?
—Es una reunión familiar, literalmente, con toda su familia.

El silencio se hizo en la pequeña mesa, el camarero suspiró un 'por fin', un poquito alto.
—Dile que no y corta lazos con él, luego múdate —Jungkook asintió resolviendo el asunto y por supuesto, recibiendo un golpe ligero en la frente.
—¡Auch!
—Esto es serio.
—Lo digo en serio. Por cierto, tu violencia me abrió el apetito de nuevo así que pediré otro pan con pollo. —Se levantó ni bien terminó la frase y en unos minutos estaba de vuelta, con un enorme pan con pollo en las manos.
—Creí que querías perder esos tres kilos —Dijo Yoongi.
—Mientras no tenga rollos, puedo tragar en paz —Yoongi tocó un poquito de piel sobrante en un costado de Jungkook, haciendo que este lo piense un momento.
—Bien, entonces tragaré, pero sintiéndome extremadamente culpable. ¿feliz?
—¿Y yo soy el idiota? En conclusión ¿Le digo que sí y me preparo para conocer a su familia?
—Nop, múdate a Bora Bora y olvídate de Jimin pollito feliz, alguien más le cepillara las plumas en las noches.
—Haz tragado tanto que tu corazón está lleno de grasa ¡No eres capaz de amar! — Yoongi se calló en cuanto vio al camarero junto con el que parecía ser el dueño de la cafetería acercarse.

Él suspiró. —Les pido amablemente que se retiren.

Yoongi asintió calladamente, mientras Jungkook comenzaba a reírse envolviendo su restante pan con pollo en una servilleta. No era la primera vez que amablemente los echaban de algún lugar, pero al menos Yoongi ya sabía qué hacer con la invitación de Jimin.

No pedirle más consejos a Jungkook era un buen comienzo.