Con sus ojos cerrados sonríe mientras sigue en su cuello, respirando su aroma, el único que la enloquecia por completo, el que tanto extrañaba.
Vegeta no entendía cómo era posible, de que a lo largo de toda su vida se enfrentó a contrincantes muy fuertes, con un ki elevado, y que jamás hicieron que se sintiera intimidado o sometido, pero ella, aquella terrícola tan débil, con un ki inofensivo, pero con un carácter tan fuerte como él, lo tenía inmóvil, dando suspiros y jadeos, apretando sus dientes y sus puños, sometido como un perro a su dueña. No le gustaba sentirse así, pero lo exitaba más que nada en el mundo.
Sus pálidas manos no dejaban de tocar cada centímetro de su fornido cuerpo, podía sentir algunas marcas en sus brazos, pectorales y abdominales, al abrir sus ojos pudo ver las cicatrices. Con delicadeza, besó cada una, se detuvo un momento y volvió a verlo.
- Te noto más fuerte, pero lleno de cicatrices. Vegeta se sienta en la cama, aún teniendo a Bulma sobre su regazo, mientras suelta una pequeña risa. Es tu culpa de todas formas, ni siquiera me dejaste hacerte una armadura mejor que esa. Frunciendo sus azulados cejos sonríe, sabiendo que ella tenía la razón, como siempre. Cuando termine aquí contigo, iré a hacerte una armadura decente, ya que a ti te encanta romper todo. Ríe abrazandolo nuevamente por el cuello.
- Puedes hacer lo que quieras, pero sólo después de esto. Él sonríe también y besa su cuello aún sentados. Mi turno.
Como Bulma estaba sentada sobre él, fue muy fácil voltearlos a ambos nuevamente. Se levantó para terminar de quitarse el traje azul, quedando ambos en ropa interior. Y luego volvió a posicionarse entre sus piernas. Bulma lo aferró con fuerza.
Su boca también fue directo a su fino cuello, conservaba el olor de siempre, embriagante y dulce. La mordió, besó y lamió varias veces, mientras conservaba una pequeña sonrisa y movía sus caderas al compás, más rápido que cuando lo hacía ella. Se sentía en casa, después de dos eternos años, estaba con su mujer, si, su única y amada princesa. Sus manos, que habían partido en su cintura, fueron hasta sus caderas, encontrando el tirante de su lencería, que simplemente quiso romper, mientras dejaba un camino de besos por su clavícula hasta su pecho.
Continuará...
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No Eres Fácil De Olvidar V.B TERMINADA
FanficInspirada en la canción "Besos en guerra" del grupo Morat, este Fanfic relatará la historia en un Universo alterno, donde el príncipe de los Saiyajin deja a su terrícola, Bulma Briefs en la Tierra para ir a entrenar al espacio y prepararse para la l...