Unidos Por Ti (COMPLETA)

Completamente enamorada

Me desperté algo cansada por el viaje que incluso se me pegaron las sábanas. Pero al tratar de levantarme no puedo, no puedo mover mi cuerpo. Y hace mucho calor. Tanto que creo que moriré de un golpe de calor. Abro los ojos y no puedo evitar sonreír. Aunque no se como llegamos aquí.

Recuerdo que dejamos el auto en el estacionamiento y después subimos a mi casa. Le ofrecí un café a Gabriel y cuando lo estábamos tomando el hizo que me sentará en su regazo. Y después.........¿Que pasó después?

Veo su rostro y no puedo creer que este con éste hombre. Como puedo estar tan tranquila estando así de cerca de el. Si cualquier mujer mataría por estar entre sus brazos así como lo estoy yo. Aunque hay veces que me saca de quicio. Y quiero molerlo a golpes. Aún asi casi siempre es el quien termina por dejarme sin habla y más enamorada que antes.

-¿Terminaste? -El calor escapa de mi cuerpo en cuanto escucho lo que sale de la boca de Gabriel y quiero ocultar mi cabeza como una avestruz. Pero después me molesto, porque el fingió estar durmiendo.

-Si -Respondo molesta y quito su brazo de mi cintura para levantarme. Pero el no deja que si quiera me aleje. Su agarré se hace más fuerte y en cuanto veo su rostro. Veo que el tiene una enorme sonrisa en el, cosa que hace que me moleste aún más -Gabriel. En serio voy a patearte si.... -No llegó a terminar de hablar y el aprisiona mis pies subiendo el suyo y acercandome aún más.

-No sabes cuanto me gusta tenerte así entre mis brazos. Hace que mi ser primitivo quiera tomar el control. -Dice y se acomoda más, cosa que se que no está bien.  Tal vez el tenga controlado a su ser primitivo, pero yo soy muy nueva en eso. Así que mejor me alejo.

-Gabriel, si no voy a trabajar, me despiden -Digo tratando de que me suelte. Y no puedo creer lo que veo. Gabriel tiene una sonrisa enorme.

-No sabes como lo siento -Dice y ahora si se ganó un golpe.

Pero como no puedo mover mi cuerpo, pero si mis manos, lo pellizco y el de inmediato me suelta con una expresión de dolor.

Corro a mi baño y me doy una ducha rapida. Necesito estar lista en cinco minutos si quiero llegar a tiempo.

-☆-

Tomó un taxi ya que con lo pesado que se puso Gabriel para que no vaya a trabajar me negué por completo a que me lleve al trabajo en su auto y casi le grite a mi chofer para que acelerará. No puedo darme el lujo de llegar tarde. No cuando soy sólo una asistente.

Llegó con un minuto de retraso, pero no creo que  alguien se de cuenta. Dejó mis papeles y todo lo demás en el escritorio y tomo asiento.

Busco con la mirada a Lorena y me extraña que no este aquí, ella siempre llega antes de la hora. Tomó mi celular dispuesta a llamarla hasta que la veo entrar. Pero algo llama mi atención. Tiene el pelo suelto y este cubre la mayor parte de su rostro. Que incluso no puedo verlo.

Se acerca y pone todas sus cosas en su escritorio. La miro con detenimiento y siguiendo cada uno de sus movimientos. Y mientras más la veo más interrogantes se forman en mi cabeza. Hasta que levanta un poco su rostro y al fin la veo. Pero no me gusta nada como se ve.

Tiene el rostro algo pálido y unas ojeras enormes. Como si hubiese estado llorando o no hubiese dormido en días.

¿Que pasó con ella?

Me levanto y voy a su escritorio, la verdad nunca la había visto en ese estado. Para mi es demasiado raro que ella no sea la Lorena feliz y hasta algo molesta por la forma en la que me atormenta con sus conversaciones subidas de tono.

Me acerco a su escritorio y ella levanta un poco su mirada y ahora puedo ver muy claro que no está bien. Algo le paso y por eso tiene esa cara demacrada y triste.