Filias y Parafilias - SEVENTEEN

7. Hierofilia - Jihan

" Hierofilia : Atracción por vínculos religiosos ritos u objetos como biblias y crucifijos "

Las campanas de la iglesia de aquel pequeño pueblo anunciaban el inicio del primer culto del día, los fieles entrando con biblia en mano para aceptar la palabra del señor en sus corazones de aquel cálido domingo y recibir la guía y bendición del padre Hong Jisoo

Hombre fiel y entregado al señor desde hace más de diez años, el padre era amable, cálido y lleno de sabiduría que rondaba los treinta y tantos

¿Atractivo?, si, si lo era, hacia que muchas mujeres del pueblo susurraran su nombre y no sólo mujeres, su atractivo llegaba más allá...

Jeonghan entró a la iglesia de la mano de su querida madre a quien le gustaba acompañar a recibir la palabra, ambos se sentaron en las filas más cercanas, bajo los murmullos mal intencionados de la cucufatas del pueblo, víboras que rumoreaban sobre la orientación sexual del joven de cabellos dorados, este las saludaba sin vergüenza alguna sólo por el gusto de verlas molestas

El culto dio comienzo entre alabanzas y cánticos, con el sacerdote en el ambón iniciando con la palabra

" El amor es paciente, es bondadoso; el amor no tiene envidia; el amor no es jactancioso, no es arrogante; no se porta indecorosamente; no busca lo suyo, no se irrita, no toma en cuenta el mal recibido; no se regocija de la injusticia, sino que se alegra con la verdad "
                                                                                                           - Corintios 13 : 4 - 7

Mentira

Jeonghan sabía perfectamente que cada una de esas palabras era mentira, el amor era todo lo contrario; para él, el amor era impaciente, egoísta, envidioso, el amor se jactaba de ser tan codiciado, era arrogante e indecoroso, buscando lo suyo y lo ajeno, irritante, no soporta el perder, se regocija en la injusticia y cree en las mentiras, así era el amor

" todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. "

Así era su amor por el hombre frente a él

Prohibido y desviado pero intenso

El culto dio fin con la bendición del padre y el recordatorio de los talleres gratuitos que promueve la iglesia, Jisoo se despedía de cada fiel con una sonrisa, viendo de reojo al rubio que se despedía de su madre, Jeonghan acostumbraba quedarse después de uno que otro culto para ayudarlo en lo que se ofrezca, se acercó a él a paso lento esperando que las últimas personas se retirarán

- El culto de hoy fue muy inspirador - Jeonghan acomodo la sotana con una sonrisa pícara que rápidamente desapareció cuando Jisoo saco sus manos viendo de un lado a otro nervioso

- Podrían vernos

- Lo sé, es por eso que deberíamos ir a un lugar un poco más privado - la propuesta no le sorprendió, ni mucho menos la mano entrelazando la suya

Jeonghan lo guió hacia la casa parroquial hasta la pequeña habitación que Jisoo ocupaba cerrando la puerta tras él, las paredes viejas eran adornadas con cuadros de santos y sobre la cama un cristo crucificado, el ambiente despedía aroma a incienso

- No deberíamos estar haciendo esto - la voz entrecortada de Jisoo le decía lo arrepentido que este podía estar, no era la primera vez que se encontraban en aquella situación y si fuera por el tampoco sería la última

El rostro de Jisoo fue acunado por las manos de Jeonghan, tan suaves y delicadas, observó su rostro por un momento tan lleno de vida, sus ojos brillantes es como ver un ángel, el más hermoso de todos y al mismo tiempo como ver la tentación encarnada, el peor de los pecados hecho hombre, los labios rojos como una manzana tocaron los suyos en un beso lento y todo se oscureció, había probado el fruto prohibido y no hay retorno