II - Problemático -

1.9K 248 145
                                    

Chan despertó, paseó su mirada por el cuarto en el que se encontraba, las paredes estaban de color verde pastel y su cama era amarillo de también tono pastel. La puerta se abrió dejando ver al joven humano que le había ayudado ayer, le dedicaba una sonrisa reconfortante.

—Buenos días— su voz profunda resonó en los oídos de Chan.

"Debe cantar como el mismo coro de ángeles"- pensó.

—Siempre tardas en contestarme—puchereó.

—Lo siento— se levantó— Buenos días.

—¿Cómo te llamas? —preguntó sentándose en la orilla de la cama

— Bang Chan. —respondió analizando a su acompañante.

—Hwang Hyunjin. — le tendió la mano— un gusto.

Chan miró su mano y la tomó apretándola un poco admirando su calor.

—Sigues helado— comentó HyunJin.

—Así es mi temperatura corporal—quitó su mano metiéndola en las bolsas del pantalón deportivo.

—Vamos a desayunar.

Se levantó y chan le siguió sintiendo el calor del piso de madera, Jin le señaló la mesa y chan se sentó esperando a que Hyunjin regresara.

—No soy el mejor cocinero pero creo que no morirás intoxicado. -le tendió un plato con una especie de plasta blanca con grumos.

—Esto no es suficiente para matarme— comentó removiendo la plasta con la cuchara.

—Lo que tienes en el cuello— habló Hyunjin caminando hacia chan — ¿Qué es? —intentó tocar el cuello y el collar de chan, pero este le detuvo tomando su muñeca con fuerza.

—Es un collar y por favor no lo toques. —Hyunjin asintió y regresó a sentarse a su silla.

—¿Tienes galletas? —preguntó Chan aun removiendo la plasta.

—Sí, galletas saladas— respondió Hyunjin caminando a su alacena.

—Prefiero comer esas—le siguió Chan.

Hyunjin rebuscaba en la alacena hasta que encontró un paquete rojo que decía "Crakets", se dio la vuelta chocando con el pecho de Chan, levantó la vista y vio la cara inexpresiva del demonio que sólo miraba el paquete que él sostenía.

—To-Toma— le dio el paquete.

Chris tomó la caja sacando un paquete y comenzó a comerlas.

—¿Por qué saladas? Yo sólo las como con ensaladas. —chan le miró con las mejillas llenas de galleta. —Pues—tragó— me encantan las galletas saladas, desde que se fabricaron.

Hyunjin lo miro con duda.

—Pero las galletas de esa marca tienen cien años y tú tienes como unos veinte.

—Exacto—respondió metiendo más galletas en su boca.

Hyunjin no comprendió pero no preguntó, su atención se centró en el collar de piel negra y púas metálicas plateadas, quería tocarlo, el collar tenía un arco de metal en el frente que suponía era para una cadena.

—Mira—señaló la ventana y Chan tontamente giró su cabeza, Hyunjin aprovechó y tocó el collar delineando las pues con sus dedos, Chan le tomó la muñeca con una expresión de enojo.

—Eres problemático—al decir eso, una cadena se formó desde aquel arco hasta la mano de Hwang.

—¿Qué es esto? — miró la cadena.

—Una cadena—Respondió Chan sobando su entrecejo fruncido. —Mira—suspiró— soy un demonio— Chan explicó su vida de demonio y que fue castigado por amar a los humanos.

—No te creería si no viera la cadena en mi mano— acarició la cadena que tenía una inscripción. — ¿Qué dice?

—Amo y mascota, lazo inquebrantable, lazo eterno, fidelidad y devoción de la mascota, mano dura y firme del amo, cadena de castigo, collar de propiedad— Hyunjin miraba los extraños símbolos sin creer que tantos trazos raros dijeran eso.

—¿Cómo la oculto? —miró a Chan.

—Sólo presiónala con fuerza y no sé, piensa que me he portado bien o algo así, no sé, esto es nuevo para mí—se encogió de hombros.

Hyunjin presionó con fuerza la cadena hasta que esta se tatuó en su piel hasta llegar a su cuello, miró a chan quien ya no tenía la cadena.

—Genial— Hyunjin miró a Chan con ojos brillantes. —Te quedarás conmigo siempre—sonrió entusiasmado.

Chan no entendía ¿A qué tipo de humano le gustaría tener un demonio a su lado? Miró a Hyunjin que brincaba por la cocina.

—Nunca más estaré solo— gritó— Esto es mejor que mis amigos de la universidad.

Hyunjin resbaló y cayó de cara.

—Tan problemático—lo ayudó a levantarse.

El resto del día se la pasaron en tiendas de ropa para Chan e incluso el demonio se ofreció a cocinar para que Hyunjin no hiciera más masas extrañas.

—Chan —le llamó el menor desde la sala—Mañana tengo clases ¿Qué harás mientras salgo?

—Esperarte afuera —respondió sin más—Problemático—susurró de nuevo.

"악̷마̷" ϲнαиנιи  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora