Only Friends | Jimsu / Taegi «Fem»

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Después de estar unos buenos minutos llorando en el baño de aquella cafetería, oí como tocaban suavemente la puerta, yo estaba decidida ignorar a quien fuese, abrí la llave del lavabo con el objetivo de mojar un poco mi cara, para que los rastros de lágrimas no fueran tan notorios. Pero me vi interrumpida por alguien que abrió la puerta y se adentró sin más a aquel lugar.

Yo pegué un brinco del susto al observar a Taehyung ahí parado viéndome con una expresión neutral en su rostro.

-¡¿Qué crees que haces?!-Pregunté alarmada.

-Voy al baño.- respondió con simpleza.

-¡¿Al de damas, estás loco?!

-Ehm... no, al de caballeros, ¿acaso no te diste cuenta de que entraste en el baño equivocado?

En ese momento los colores se me subieron al rostro, de verdad que no podría estar más avergonzada, era imposible.

"Hoy definitivamente no es mi día." -Pensé.

Él se acercó al lavabo que se encontraba al lado del que yo estaba ocupando y con toda la naturalidad del mundo mojó sus manos, yo, aún avergonzada me dispuse a salir de aquel baño, pero la voz del castaño me hizo detenerme en seco.

-Deberías limpiar un poco tu rostro, aún hay restos de lágrimas en él.

Yo caí en cuenta de que no pude lavarme la cara por el repentino y vergonzoso encuentro. A pasos lentos me devolví al sitio inicial y ahora sí lave bien mi rostro, luego saqué mi estuche de maquillaje para aplicar un poco, pero el castaño que ahora se encontraba observándome me detuvo.

-No deberías usarlo esta vez, te vez bien sin maquillaje.-Espetó mientras aún sostenía su mirada hacia mi. Se acercó más a mi, para acomodar algunos mechones rebeldes de cabello, y luego volvió a hablar. -¿Puedo hacerte una pregunta sin sonar como un chismoso?

-C-creo que de igual manera sonarás como uno.-Solté, en un tono burlesco y algo tembloroso. A lo que él soltó una risa.

-Entonces como buen chismoso preguntaré, ¿por qué llorabas?

Yo respiré a profundidad, a la vez que meditaba si estaba bien contarle todo lo ocurrido meses atrás a alguien que acabo de conocer.

-Es por esa chica, ¿verdad?-Yo hice un asentimiento con la cabeza.-Eran amigas antes por lo que puedo deducir.- Yo repetí el gesto.- No deberías llorar por alguien tan antipática como ella ¿sabes? Cuando te fuiste Jiso noona le preguntó que porqué te estaba ignorando y ella respondió muy arrogantemente que no sabía de quién hablaban.

Yo bajé mi rostro aun más triste y con los ojos acuosos.

-A lo que me refiero es...-Suspiró.- Esa chica tan odiosa no puede ser merecedora de gotitas tan valiosas y cargadas de tantos sentimientos, no sé qué haya sucedido con ustedes, pero es claro que no fue culpa tuya.

-C-como puedes estar tan s-seguro de eso.-Mi voz se cortaba un poco debido al llanto.

-Porque tú brillas mucho más que ella, es decir, lo que transmites es mucho más cálido, a comparación de ella, tú eres como el chocolate caliente.

-¿A q-qué te refieres exactamente?

-A que tú eres como el chocolate caliente: dulce y te salva del frío invierno, y en este caso ella es ese frío invierno.

-¿Cómo puedes deducir eso si me acabas de conocer?

-Noona nos habló bastante de todas ustedes, y por como las describía saqué mis conclusiones. - Respondió, encogiéndose de hombros como si no fuera la gran cosa.- Además, se puede ver claramente en la actitud de las dos.-dijo, con una hermosa sonrisa geométrica en su rostro.

-¿Cómo así?

-Bueno... Dicen que las rupturas de las amistades duelen mucho más que las amorosas.- Hizo una pequeña pausa.- Ella está siendo fría y desinteresada, mientras que tú estás aquí llorando, eso quiere decir que eres más cálida que ella, que te importan más los sentimientos de tus seres queridos y así.

-¿Y tú cómo sabes todo eso? ¿acaso eres psicólogo?- Él soltó una carcajada fuerte.

-Yo no... pero mi mamá sí lo fue.

-¿lo fue..?

-Sí... Ella falleció hace 4 años.

-Oh... L-lo lamento...

-Tranquila, no eres tú la que lo tiene que lamentar.- Esbozó otra de sus hermosas sonrisas, para luego dirigirse a la puerta del baño, abrirla y colocarse a un lado, haciendo referencia a que saliera yo primero; yo avancé para cumplir con lo indicado. - Espero que te gusten las papas fritas, porque pedí muchas.

-Me encantan las papas fritas, gracias.- Dije con un leve sonrojo en mis mejillas.

Una vez estuvimos en la mesa, Seokjin y Jiso estaban sentados juntos hablando de quién podía comer más papitas fritas.

Taehyung y yo tomamos asiento juntos y comenzamos a platicar de cosas triviales.

Kim Taehyung ese día fue mi ángel de la guarda; el que hizo que me olvidara completamente de las cosas que me hacían estar triste. En pocas palabras hizo que me olvidara de Jimin.

Y muy en el fondo deseaba que siguiera siendo así, que Taehyung siguiera siendo mi ángel protector, pero no podía confiar plenamente en alguien que apenas conocí, sólo porque me dio un buen consejo y me hizo reír.

Si fuera así, estaría aun más lastimada.

Ojalá Taehyung sea diferente...

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