Designio Celestial (Completa)

Deseo.

"Joven Lan, este es Wen Ning.....¿Lo dices por A-Ning?....El es un buen chico....Tiene un corazón de oro.....¡A-Ning!....¡A-Ning!....¡A-Ning!"

Lan Zhan se levanto de la cama y cubrió sus oídos fuertemente con ambas manos, quería acallar esas voces en su cabeza, incluso recordar a Wei Ying mencionar una y otra vez a aquel joven Wen para el era un martirio, no lo soportaba, con solo pensar que aquella mirada y atención que solo había sido para el ahora tenían como objetivo a otra persona lo hacían hervir de la rabia, así que sin mas el joven Lan se puso de pie tomo a Bichen y se dirigió hacia la puerta, bajo las escaleras y salio de nuevo de la posada, volvió a tomar el camino hacia el muelle, estaba decidido a volver allí para reclamar la atención del joven Wei, no se iba a retirar tan fácil dejandole el camino libre a aquel joven Wen, así que decidido partió de nuevo al encuentro con Wei Ying, pero cuando llego al lugar observo algo que heló su sangre y corazón, Wei Ying estaba sentado a orillas del muelle,  sostenía la cabeza de aquel joven Wei en sus piernas y acariciaba su pelo, la situación fue tan sorpresiva para el joven Lan que este se congelo en el mismo lugar donde estaba de pie, de repente su cuerpo empezó a temblar, su corazón estaba bastante agitado, sus manos frías y su vista nublada debido a que sus hermosos ojos claros se llenaron de lagrimas, entonces sintió como una ira crecía dentro de el, apretó a Bichen con fuerzas, tenia unas ganas inmensas de ir a ese lugar desempuñar su espada y acabar con aquel joven, quería hacerlo pedazos, desaparecerlo, luego miro a Wei Ying y diviso en su rostro una sonrisa mientras este observaba al joven, entonces su dolor aumento, empezó a retroceder sin retirarle la mirada a ambos y ya a unos pocos pasos de distancia se dio la vuelta y salio corriendo, mientras corría el viento provoco que aquellas lagrimas estancadas al fin salieran, el joven Lan se sentia herido, le dolía bastante, volvió a su habitación, cerro las puertas a su espalda y se reclino en ella hasta caer en el suelo sentado abrazando sus rodillas al igual que cuando era niño, entonces en silencio empezó a llorar.

"¿Por que? ¿Por que Wei Ying? ¿Acaso no soy nada para ti? ¿Todo este tiempo fue en vano? ¿Acaso no soy nada para ti?......¿Eres tonto Lan WangJi? ¿Estas preguntando el por que?....Nunca le has hablado con sinceridad, has callado, no le has dicho quien eres ¿Tengo derecho de culparlo? Pero aun así duele....duele mucho, mi corazón duele". Estos pensamientos pasaron por la cabeza de Lan Zhan, mordía sus labios para que el llanto no se le escapara, quería enojarse con Wei Ying, quería culparlo pero el sabia que no podía hacerlo, no porque lo amara sino porque el sabia que había traído esta situación sobre si mismo por no haber sido sincero antes, luego de un rato el silencioso llanto se detuvo, Lan Zhan se levanto sin fuerzas del suelo y se dirigió a su cama, tenia la mirada perdida, como si estuviera en un trance, tanto que cuando Lan XiChen regreso temprano de la conferencia y toco su puerta para visitarlo e invitarlo a que lo acompañara a cenar, el joven Lan se quedo en silencio, no respondió, entonces XiChen pensó que el aun no había regresado así que se retiro a su habitación, el joven Lan se acostó en su cama de nuevo y cerro sus ojos.

En el muelle los jóvenes Jiang, Nie y Wen se despertaban de su corta siesta, ya un poco recuperados, Wen Ning había regresado a sus sentidos y cuando se dio cuenta en la posición en la que estaba acostado y levanto la mirada para observar a un Wei Ying sonriente, se movió rápidamente y se sentó.

- ¡Vaya! Ya era hora que despertaran.- Wei Ying les regaño.

- ¡Joven maestro!.- Wen Ning estaba algo avergonzado.- Lo...siento mucho, al parecer excedí mi confianza.

- ¡Oh! Eso no es nada, ademas estas entre amigos.

- Ya es tarde debemos irnos.- Jiang Cheng se puso de pie.

- ¡Si! Vamos.- Wei Ying también se puso de pie y ayudo al joven Wen a levantarse.- Es casi lo hora de la cena, debemos llegar a tiempo, ademas hoy no me pienso desvelar, hay algo que debo hacer mañana.