Una mami para papi (Richard Camacho Y Tú) TERMINADA

CAPITULO 12

Estaba en la habitación, desde que Lali dio a luz, no me había separado de ella, ni del bebé, se parece tanto a ella, los bebés cogieron mi color y cara de ella. Los bebés llevan cinco días, me sentía muy feliz, ___ nunca me dio mellizos, ni gemelos, pero eso no significa que no la ame, me gustaría que estos bebés sean de ella y mio. Lali se encontraba tumbada boca arriba con Leia, yo sentado con Sebastián.

Richard: todavía no me creo que tenga mellizos.

Lali: ni sho tampoco.

Richard: has sido muy valiente, este es el mejor regalo del mundo.

Lali: es mi mejor regalo.

Richard: como me gustaría que ya caminaran.

Lali: a vos te gustaría todo. Parece que quieres mucho el futuro.

Richard: real, baby. Te amo.

Lali: te amo - me acerqué a ella y ella a mi y nos besamos.

Richard: cuando sean mayores y nos vean besando nos castigaran. - reí.

Lali: oh, si, no lo dudes - rió. - amor, quiero salir con los bebés.

Richard: vamos entonces. - nos levantamos.

Fui a traer el carro doble y bajé con Sebas, Lali venía con Leia.

Richard: saldré con Lali. ¿Pasa algo? - estaban raras. - oh, no sabía que habían llegado. Oye, ¿me van a contestar?

Ana: ¡___ esta en el hospital!

Richard: ¿Porque, que le pasó?

Ana: va a dar a luz.

Richard: ¿De verdad? Me alegro. No hace falta que pongan esa cara, todo va a estar bien, la saludan de mi parte. - salí con Lali y los niños.

Llegamos al parque y nos sentamos empujando el carrito de un lado a otro. 

Lali: estoy muy feliz por ___, sha va a dar a luz.

Richard: si, cuando vuelva a casa le felicitaremos.

Los bebés empezaron a llorar, justamente a la vez, les miré histérico, no sabía que hacer.

Lali: tienen hambre - dijo calmada.

Richard: ah, si, ya lo sabía, dale de comer a Leia y yo iré con Sebastián a calmarlo.

Lali cargó a Leia y le dio leche de su pecho, eran tan preciosas, dos ángeles juntas. Me giré y seguí caminando  y tarareando para que no llorara.

[...]

___: se llamará Jason Zurita Alexander. - no me gustaba poner el apellido de Juan pero debería.

Enfermera: esta bien - lo apuntó - me llevo al niño para bañarle y vestirle, luego le traeré y le darás de comer.

___: claro - salió y entraron los chicos.

Zabdiel: que valiente.

___: gracias, muchas gracias, chicos.

Erick: de nada, cualquier cosa por ti, ___, sabes que te queremos.

___: yo también os quiero.

Zabdiel: y bueno... ¿de que sexo es? - dijo emocionado.

___: es niño.

Erick: ¡Ye! ¡Los chicos ganamos!

___: ay, vosotros - reí. - ¿Pueden llamar a las chicas?

Zabdiel: claro, yo lo hago.

Empezó a llamar seguramente a Aitana, le contestó y empezaron a hablar, gritaron, ya que Zabdiel alejó el móvil haciendo una mueca.

Zabdiel: vienen.

___: bien.

Minutos después entraron las tres con una sonrisa, yo estaba dando leche a mi niño.

Ana: oh... - quería llorar. - que mono. ¿Es chico, no?

___: si, se llama Jason.

Najolin: me encanta su nombre.

Aitana: se parece a ti.

___: ¿Tú crees?

Aitana: claro, tiene tus ojos, tu nariz, tu boca.

Ana: ¿Juan lo sabe?

___: no, ni se lo pienso decir.

Ana me miró no muy convencida, pero sabía lo que hacía.

Erick: ¿Saben donde esta Richard?

Najolin: salió con Lali y los bebés.

___: ¿Con los bebés? - me sorprendí.

Ana: si, tiene dos.

___: me alegro. - Ana me abrazó. - ¿Pasa algo?

Ana: debería yo preguntártelo.

___: pues si, estoy bien, ¿porque debería estar mal? - dije de inmediato.

Erick: deberíamos dejar a ___ descansar.

___: no, estoy bien, gracias.

Erick: igualmente saldremos, mañana volvemos.

___: esta bien, gracias por venir. - salieron. - ay, mi amor, no sabes cuanto te amo, a ti y a tu hermana, te prometo que la encontraré, pese lo que me pese, en cuanto salga de aquí.