¿Más que un simple profesor?

Capítulo 6: Tarde de compras.

NARRA HELENA.
-Holaa, ¿Hay alguien en casa? Pregunto ya que recién volví del colegio.
-Holaa. Escucho desde arriba la voz de Franco.
Me dirijo hacia su cuarto para saludarlo y luego hacia el mio para cambiarme el uniforme por una playera negra y unos jeans.
Luego, voy hacia la cocina para preparar el almuerzo pero veo que en la mesa ya está lista la comida.
-Espero que te gusten. Dice Franco a mis espaldas.
-¿Cocinaste tú? Pregunto asombrada.
-Sí, todo solito. Dice y en su rostro aparece una sonrisa perfecta.
-¿Cómo es que no hay rastros de incendio? Digo en forma de broma.
El se ríe y dice:
-Vamos, a comer que se enfría.
Entonces, me lavo las manos y empiezo a comer.
-La verdad, debo admitir que estos macarrones con queso están deliciosos. Le digo ya que es la verdad.
Al terminar de almorzar, un mensaje de Sofia me llega al móvil.
CHAT CON SOFÍA:
-Hola amigaa, ¿podrías acompañarme ahora al centro comercial? Es que necesito de verdad ayuda porque no tengo ropa para mañana.

Mierda, quería quedarme en casa pero es Sofi, mi mejor amiga que siempre está para cuando la necesito así que debo ir.
-Hel, hoy compré helado ¿Quieres? Pregunta de repente mi hermano.
-Obvio que quiero, sabes que me encanta el helado pero me acaba de mandar un mensaje Sofi y me tengo que ir.
-Tú te lo pierdes. Dice y se mete una cucharada enorme de helado de chocolate en su boca.
Voy rápido a mi habitación, agarro un poco de dinero de mis ahorros y lo meto en mi mochila. Me hago una media colita y bajo las escaleras.
-Chau Fran. Digo rápidamente, ya abriendo la puerta.
-¿Vas así? Escucho que me pregunta y rápidamente me freno.
-¿Así cómo? Pregunto, ya que no entiendo.
Él no dice nada, pero me señala con su mano mis pies.
-Uy, lo había olvidado por completo. Digo, ya que casi voy de compras en pantuflas.
Entonces entro de nuevo a mi casa, me pongo unas zapatillas y ahora sí me vuelvo a despedir de mi hermano y empiezo a caminar ya que sino se me va a hacer tarde.

Luego de 20 minutos caminando, al fin llegué.
-Holaa. Decimos las dos.
-¿Vamos? Digo y señalo el shopping que está frente nuestro.

Empezamos a recorrer los locales y nada. Hace ya dos horas que estamos aquí, fuimos y vinimos de un montón de locales, pero Sofia no se decide por nada.
-¿Te falta mucho? Le pregunto a mi amiga que está del otro lado del probador.
-No, ahora salgo.
Sale y me pregunta:
-¿Te gusta?
-Hace ya dos horas que estás mostrándome ropa, y un montón de opciones me encantaron pero a ti no.

Siguió durante treinta minutos más probándose ropa, hasta que.
-¡¡Helena!!
-¿Qué ocurre?
-Mira lo que encontré. Dice y me muestra un conjunto realmente hermoso.
-Pruebatelo. Le digo.

-¿Lista? Le pregunto y ella sale del probador. Se ve preciosa con ese short negro y top blanco.
-¿Te gusta? Me pregunta.
-¡¡Me encanta!! Digo y ella se empieza a reír.
-Oye, se me ocurrió una idea.
-¿Qué idea? Le pregunto.
-Ya que yo voy a ir así, tu puedes ir igual a mi pero distinto color.
-¿Cómo?
-Mira, es así. Como yo voy a ir con este short negro y top blanco, tú puedes ir con short blanco y top negro. Dice con una sonrisa en su rostro.
-¿Segura? Pregunto ya que no estoy muy convencida.
-Obvio, vamos ya a buscar ropa para tí. Dice y me agarra de la mano.

-¡Aquí Helena! Dice y voy hacia donde está.
-¿Me lo pruebo?
-Obvio. Me dice y me da la ropa.
Voy hacia el probador, me pruebo el conjunto y la verdad que me gusta y mucho.
Le muestro a Sofia, y esta saca de su cartera su celular para tomarnos una foto en el espejo.

Las dos pagamos lo que mañana vamos a usar y nos vamos hacia el patio de comidas.
Luego de merendar unos riquisimos tostados con jugo de naranja, me despido ya que Franco me dijo que regrese a casa antes de que oscurezca.

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Holaa, espero que les haya gustado el capítulo.
¡Se acerca la fiesta!
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