Thor y Carol (Tharol) - Oneshots y Minihistorias

Los mejores cinco años

Hulk y Rocket subían la cima de la colina. Valkiria les había dicho que ahí en lo más alto vivía Thor. Es entonces que se sorprender de ver una casa grande con detalles asgardeanos y reluciente cual sol. Como si fuera un mini castillo de Nueva Asgard.

Estaban a punto de tocar la puerta, pero escuchar los truenos de Thor del jardín posterior les hace caminar hacia allá. Encuentran al rubio de espaldas y lo iban a llamar hasta que se quedan mudos de la impresión al ver a una pequeña rubia descender de los cielos, irradiando truenos.

– ¡Papi! – exclama una pequeña de ojos celestes aterrizando para correr hacia Thor

– ¡Princesa! – Thor la recibe en sus brazos para elevarla en los aires a lo que la pequeña ríe – ¿Cómo te fue en el espacio con mami?

– ¡Fue fantástico, papi! – exclama feliz la niña – Mi mami nos enseño a volar a mi y a Tristán

– ¿Y dónde están ellos?

– Aquí – responde Carol aterrizando con un pequeño rubio en sus brazos, plenamente dormido – Tristán se durmió, debe de estar cansado de haber pasado la noche jugando Fornite contigo – se burla Carol para reír junto con Thor quien deja a Sol en el suelo para cargar a Tristán en sus brazos, dándole un abrazo ya que lo había extrañado

– Mi campeón

– ¿Papi? – susurra el niño somnoliento, empezando a levantarse

– Tranquilo, pequeño – dice acariciándole su cabello mientras lo balancea en sus brazos – Duerme, papi ya esta aquí

– Quiero jugar Fornite – bosteza mientras se soba la vista para despertar

– Si salió a ti – dice Carol a lo que ambos ríen

– ¿Podemos jugar con mi papi, mami? – le pregunta Sol emocionada a Carol

– Tal vez... – alza la mirada viendo a su hogar pero se encuentra con Hulk y Rocket mirándolos con la boca abierta – Después...

– Sol ¿Por qué no vas con tu hermano a ver a la tía Valkiria? – le propone Thor

– Si, papi – responde la niña para tomar la mano de su hermanito e irse ambos de ahí volando hacia el centro de Nueva Asgard

El par de rubios cruza miradas y asintiendo con la cabeza a la vez caminan hacia sus amigos, tomados de la mano. Como la pareja que eran.

– Banner, dime que no soy el único sorprendido

– No lo eres... – asegura aun en shock – ¿Ustedes...? ¿Ellos...?

– Si, son nuestros hijos y nosotros nos casamos – responde Thor alzando sus manos de ellos para que vieran sus anillos

– ¿¡Qué!? – pegan el grito en el cielo espantando a las aves

– También me alegra verlos – dice sarcástica Carol

– Pasemos a la casa, mejor – propone Thor y los cuatro caminan hacia el lugar

El par de invitados se ven sorprendidos cuando ingresan ya que el lujo en que vivían era similar al de la antigua Asgard. Además de tener aparatos muy tecnológicos, que al parecer no eran de la Tierra.

Caminan hacia la sala y en la gran pared de esta observan un recuadro de la pareja con sus hijos.

– Sigo sin comprender ¿Cómo...?

– ¿Cómo tuvimos hijos? – se adelanta a la pregunta con una sonrisa picara – Bueno, no soy el adecuado para decirte como los hice, pero ya que insistes... – abraza por detrás a la rubia y besa su cuello