5. E

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Unos días después, los chicos tomaron sus cosas y salieron fuera para buscar cosas que puedan servirles para algo. Comida enlatada, armas, repuestos para coches que podrían usar para los suyos, gasolina o simplemente ubicar algunos grupos de personas que podrían suponer un peligro.

-Procura seguir vivo hasta que vuelva -le había aconsejado Chanyeol. -Y no hagas cosas estúpidas, aún estás herido.

LuHan asintió a todos sus consejos sin dejar de sonreír. Le gustaba que alguien se preocupara por él, le hacía sentir mejor. Les deseó buena suerte y los vio alejarse. No sin antes ver a SeHun rodar los ojos y soltar un gruñido irritado.

Con paciencia y lentitud, LuHan y Bran caminaron hasta la granja para ayudar en algo. Tal vez podía darle de comer a los animales de nuevo, era un trabajo que no demandaba demasiado. Además, si se quedaba otro día más en la casa iba a volverse loco.

Cuando viajaba con el grupo de Kris, nunca se quedaban en un lugar demasiado tiempo. Por lo tanto, LuHan caminaba y estaba siempre al aire libre. El recuerdo le hizo pensar en sus ex compañeros. ¿Dónde estarían? ¿Al menos estarían vivos?

-Hola, Lu -Ren se acercó cuando vio. Llevaba su jardinera de mezclilla y sus zapatillas deportivas llenas de barro. El típico atuendo para un chico de granja. -¿Estás mejor?

-Sí, eso creo -sonrió intentando ocultar la culpa. Estaba mejor, claro, pero le había dicho a Chanyeol que no iría a la granja hasta estar completamente recuperado. -¿Qué puedo hacer?

-¿Qué te parece simplemente alimentar a las gallinas? No quiero a tus compañeros de casa sobre mí de nuevo. -Ren rió, pero parecía algo asustado al pensar en sus compañeros.

-Lamento eso, fue culpa mía -LuHan siguió a su amigo hasta el establo, donde guardan las bolsas de lona llenas de comida para las gallinas.

-Está bien, lo único que pido es no volver a repetirlo -Ren le entregó una cubeta pequeña llena de maíz seco -Ten, preferiría que no levantaras cosas pesadas aún.

LuHan la tomó sin chistar y salió a buscar a sus pequeñas amigas hambrientas. Bran se escondió en algún lugar, seguramente para dormir durante horas y luego despertar para comer. Se entretuvo unos minutos acariciando a las vacas y persiguiendo a los cerditos bebés.

La parte dura fue cuando tuvo que volver a la casa vacía. Se había acostumbrado a tener a alguien cerca, así que era algo extraño para él caminar por los pasillos vacíos, esperando escuchar algún ruido proveniente de otra habitación. No pudo conciliar el sueño hasta pasadas las 2am, y todo fue gracias a Bran que subió a la cama y se acomodó junto a él. Su respiración pausada y su cuerpo peludo y cálido le hicieron cerrar los ojos.

Los siguientes dos días se convirtieron rápidamente en una imitación del primero. Trabajar un poco en la granja y después volver a casa junto a Bran. Había intentado hacer amigos, pero cualquier persona fuera de la granja lo ignoraba o lo miraba como si tuviera algo horrible en la cara. Incluso sus compañeros de casa eran más amables, a pesar de que no es técnicamente lógico debido a sus papeles en la comunidad.

El cuarto día, LuHan salió de casa un poco más tarde. Se había quedado dormido y necesitaba asearse antes de ir a la granja. Se dio una ducha rápida y usó la ropa que Kyungsoo le había dejado antes de irse. Ojalá tuviera más ropa que escojer.

Bran lo esperó en la puerta moviendo la cola frenéticamente y mostrando la lengua. Ya había comido y tomado agua fresca, al igual que LuHan. Salió y se estiró en el porche, aunque el ligero dolor de la herida lo obligó a hacerlo despacio. La herida parecía mucho mejor, pero no estaba totalmente cerrada. LuHan despertaba cada día esperando que así sea. Se moría por hacer más cosas además de darle de comer a las gallinas.

PRODIGIUM ° HunHan °Donde viven las historias. Descúbrelo ahora