Iglesia

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Cuando Saúl regresó a su casa necesitaba desahogarse sin lujo de violencia, por lo cual iba a hacer algo que no hacía desde hace tiempo, lo cual era escribir en su diario, pero al momento de quitar el espejo para sacarlo de su escondite se encontró a parte de su diario, cierta alcancía que cierto chico le había regalado. Así que la tomó un momento, la analizo y sintió una pequeña tristeza al tenerla entre sus manos, así que optó mejor por dejarlo nuevamente ahí y colocar nuevamente el espejo en su lugar, sin haber escrito en su diario en ningún momento.

Y es que fue tanto el shock que sintió Saúl debido a la alcancía que mejor opto por irse a dormir, pero justo esa noche, empezó a llover fuertemente acantaros.

Eran alrededor de las 2 de la mañana, y mientras llovía afuera sobre las calles de la Ciudad de la México, un castaño estaba teniendo pesadillas según él. Él daba vueltas sin parar en su cama, cuando de pronto se despertó de golpe con la frente sudorosa y con la respiración agitada.

Saúl: N-No puede ser, S-Soñé con él, S-Soñé con un H-Hombre

El sueño que el castaño tuvo era de él con Mauro juntos, tomados de la mano, besándose y teniendo relaciones intimas. Y era tanta la intensidad lo que provocó que despertara

Inmediatamente después de despertar, Saúl se levantó de su cama y tomó inmediatamente el fuerte que el sacerdote le había obsequiado, para luego quitarse el camisón que tenía puesto dejando al descubierto todo su cuerpo desnudo a excepción de sus partes intimas que eran ocultadas por su ropa interior.

Cuando se despojó de su ropa para dormir, rápidamente Saúl se comenzó a auto castigar golpeándose varias veces en la espalda con el fuete, mientras comenzaba a rezar el padre nuestro, imitando la acción del padre que lo fue a visitar y a azotar la otra vez.

En está ocasión, las lagrimas comenzaron a brotar de los ojos del castaño debido a los golpes, pero Saúl continuaba aumentando la fuerza de cada golpe para tratar de olvidar aquel sueño y a aquel muchacho.

Sus gritos y lamentos no se alcanzaban a escuchar en la casa ya que los truenos que se oían afuera eran tan fuertes que se los impedían.


A la mañana siguiente

El sol salía y los gallos cantaban, y Roberta como todas las mañanas debía de ir a levantar a Saúl, y cuando entró a la recamara....

Roberta: Joven hora de levantarse.... -Se cubre la boca-

Y es que lo que vio Roberta, fue a un joven castaño tirado en el piso dormido con el torso descubierto y con varios golpes en su espalda

Roberta: Dios mío joven levantase -Lo levanta- ¿Se encuentra bien?

Saúl: B-Buenos días Roberta

Roberta: Joven por dios ¿Que le ocurrió? ¿Por que trae toda su espalda sangrando?

Saúl: Es que anoche tuve un sueño prohibido Roberta, y me tuve que auto castigar para que se me borrara de la cabeza

Roberta: ¿Y tan siquiera funcionó?

Saúl: -Comienza a llorar- No

Roberta: Ay joven siéntese en la cama, no tardo -Se va-

Saúl se quedó sentado en su cama llorando, ya que para él no era posible que hizo lo que el cura le había dicho y aun así no haya podido olvidar ese sueño de él con Mauro. De pronto, del baño de la habitación salió Roberta con un poco de alcohol etílico y un pedazo de algodón

Roberta: Haber joven permitame -Moja el algodón- Puede que arda un poco

Cuando la sirvienta hizo contacto el algodón con la piel del castaño, este último hizo un gesto de dolor por el ardor que sentía

Mal Visto (Aristemo/Sauro)Where stories live. Discover now