Suicide Sould

Capitulo 5

Por primera vez me siento viva, veo que el mundo está tomando un rumbo diferente, siento que la vida me está dando oportunidades por segunda vez. Por primera vez en mi vida me siento feliz.

Notó que la sábana y una parte del suelo, están manchadas de sangre. Que flojera levantarme y tener que lavarla pero no tengo de otra, debo hacerlo.

Voy levantándome de a poco recuperando fuerzas de la noche anterior. No era raro que me quedara inconsciente, siempre me pasaba. Corte, corte, sangre, sangre, inconsciente, inconsciente.

Me cambie de ropa, me puse todas las pulsera que pude y baje a lavar la sabana. Lo bueno era que estaba sola en la casa, nadie podía molestarme. El día estaba hermoso en Villarrica, el sol pasaba por la ventana, sin nubes ni nada. Fui al equipo de música que teníamos en la cocina, le apreté play apareciendo la canción Todo por ti de Alana.

Me quede dentro de la casa mirando hacia afuera, no tenía muchas ganas de comer, mi cuerpo estaba acostumbrado a que no comiera.

Mis pensamientos se alejaban de a poco, estaba saliendo de la realidad adentrándome en mis sueños, en mis expectativas y en mis metas. Todo lo que quería…

-Fran- Susurro, aún teniendo su mano en mi brazo- Déjame verlo

 Si veía mi brazo estaba perdida, no podía. Negué preocupada.

-Vamos, Fran, no te juzgare ni nada, solo quiero verlo y curarlo

Trate de mostrarme segura de lo que hacía, asentí con miedo. Él levanto la manga del uniforme y ahí estaban, mis cortes. Él los miro con horror, yo solo quería tirar el brazo, pero él lo tenía con un agarre fuerte. Por un minuto pensé que me juzgaría, que me acusaría, que me regañaría o que se iría. Fue todo lo contraria, sentí sus labios en mi brazo, rozaba las comeseduras de sus labios en mis cicatrices y nuevos cortes. Siguió subiendo hasta llegar a mis labios. Mi primer beso, con mi mejor amigo, mi primer novio.

-Jamás te dejare- Murmuro, mirándome con encanto

No pienses en eso, Fran, ya no vale la pena. Pensé con tristeza. Ojala hubiera cumplido su promesa, me dejo sufriendo, me dijo que jamás se iría y fue lo primero que hizo, ¿Por qué?, porque hubo alguien mejor, porque yo soy una total mierda y él lo noto.

Saque todo pensamiento de Sebastián, no quería pensar en él, no ahora. Note que la canción había cambiado a una de Safree, el ritmo de la canción se mezclaba con la de la puerta, estaban tocando. Mierda, no me había dado cuenta.

Me levante y la abrí. Frente a mí se encontraba Diego, con una sonrisa de oreja a oreja, me saludo.

-Hola

Solo atine a sonreír, era agradable verlo aquí tan temprano.

-¿Quieres salir?- Logro decir después de minutos de silencio