4

37 10 14
                                    

— ¿Tenemos que grabar ahora una canción nueva? —pregunto a sabiendas que todos quieren saberlo —¿y nuestros días libres?

— Jin no interrumpas —miro a Nam, manteniéndome en mi lugar apretando mis manos con fuerza, reteniendo esa sensación que amenaza en mi interior —y escucha lo que nuestro manager dice.

— Nam no seas tan capullo que no ha cometido ningún delito —le reprocha Taehyung —Jin tiene el mismo derecho que todos a saber asique el único que debería cerrar la boca aquí eres tu.

— Si me disculpa —Nam desaparece después de reverenciar ante nuestro manager.

Imito el gesto aunque intentan pararme, siguiéndole, entrando en la zona de grabación con él antes de que se encierre, cerrando con pestillo a mi espalda.

— ¿Por qué estás tan tenso? —intento abrazarle pero me aparta con brusquedad —Nami.. por favor calmate. No he hecho nada malo por querer saber y tu parece que en cualquier momento vas a matarme ahí mismo. ¿Tanto te molesta que me interese?

— Me molesta que interrumpas sin mostrar respeto —miro su mano alzada —me cansa tu forma de ser Seok Jin.

— ¿Mi forma de ser? ¿Quién ha abofeteado al otro porque si? —me cruzo de brazos —me estás tratando todo el tiempo mal y no creo que me lo merezca. Te lo he dicho ya tantas veces que estoy perdiendo sentido hasta yo. Quiero dejar lo nuestro Nam. Se acabo.

Los segundos, minutos incluso quizá que pasan son escasos pero llenos de tensión, aún encerrados en el estudio de grabación. Nam dándome la espalda me da la ventaja para marcharme pero no me muevo, esperando por su respuesta, poniéndome recto, manteniéndome firme cuando se acerca a mi.

Mi cuerpo reacciona rápido, tensándose cuando me sube a su hombro, golpeando con demasiada fuerza mis nalgas, cayendo con brusquedad en el sofá que casi nunca usamos. Nam sobre mi, forzando un beso que intento detener sin poder, baja mi ropa quedando de un momento a otro con mi cara enterrada en el sofá, gritando cuando me penetra con fuerza, dejando libres mis lágrimas con cada embestida que da sin ser cuidadoso, doliendo en cada uno de los choques a mi espalda.

Cayendo de lado en el sofá, abrazándome a mis piernas desnudas, no puedo dejar de llorar, sintiendo el dolor en todo mi cuerpo y corazón, su semen deslizándose entre mis muslos, mirándole con odio cuando se viste sin dejar de mirarme.

— ¡¿Estás feliz?! —me levanto a pesar de sentir demasiado dolor —¿feliz de haberme agredido sexualmente? Ahora si que lo nuestro se ha terminado y agradece que no te denuncie.

Me visto, sintiendo el dolor en mi cuerpo cuando me agacho para subir mi ropa, cuando camino hasta la puerta, saliendo sin preocuparme por mis lágrimas, abrazándome al primero de los chicos que encuentro frente a mi.

— ¿Qué ha pasado? —las manos de Jhope en mi espalda solo hacen que el dolor aumente —¿qué te ha hecho Nam?

— Ha.. hemos discutido —miento pero no quiero que sepan que me ha violado —he roto con él.. ¿puedo quedarme unos días en tu casa hasta que encuentre un lugar para vivir?

— Puedes quedarte el tiempo que necesites —sus dedos limpian mis ojos —nos podemos ir ya asique iremos a por tus cosas y a mi casa.

Asiento, manteniéndome cabizbajo, sintiéndome roto cuando subimos al coche que nos lleva hasta la casa que ya solo será de Nam.

— No te preocupes si viene porque no le dejaré tocarte ni hablarte —coloco las últimas prendas en mi maleta —¿por qué habéis discutido?

— No me apetece hablar de eso.. solo quiero salir de aquí y olvidarme de él lo antes posible. Aunque será imposible dado que trabajamos juntos. No quiero que esto afecte al grupo.. a vosotros.

— No afectará tu tranquilo por eso —coge mi maleta —¿tienes todo ya?

Asiento, asegurándome cuando cojo mi bolsa que no olvido ni una de mis prendas y le sigo, aún cojeando y sintiendo el dolor por su agresión. Salimos de la casa que ya nunca volveré a pisar, cerrando con la llave que dejo bajo el felpudo, marchándonos definitivamente.


— Dormirás aquí —abre una puerta —siento si no es muy grande pero tiene todo lo necesario para que estés cómodo.

— Con un colchón aunque esté en el suelo me vale —dejo la bolsa sobre la cama y abrazo a mi amigo —gracias por dejar que me quede. No puedo volver a casa de mis padres y cumplir a tiempo con nuestra agenda.

— Aquí estarás bien —sonrío aunque sea una fina linea en mi rostro —descansa y si quieres darte un baño estás en tu casa.

Asiento, de nuevo agradeciéndole. Cierra la puerta cuando sale, dejando yo la bolsa en el suelo, acostándome sobre la ropa de cama que no me molesto en deshacer, dejando de nuevo libres mis lágrimas, sintiendo mi corazón ya si que si roto por completo, intentando cerrar los ojos, manteniéndolos abiertos cuando los recuerdos de la agresión llegan de golpe, llorando sin parar hasta que mi agotado cuerpo cae rendido en un sueño profundo del que ojala nunca despierte.


— ¡Apartate Hoseok! —los gritos de NamJoon en la entrada me hacen encogerme en el sofá —aunque él crea que lo nuestro se ha acabado no es así. Le quiero y tengo que hablar con Jin asique apartate.

Hoy es el tercer día que llevo viviendo con Jhope, sintiéndome poco a poco más tranquilo, a excepción de cada vez que Nam me llama, ignorando tanto sus llamadas como los mensajes que han llegado incluso a dejar mi móvil bloqueado en más de una ocasión.

— No vas a acercarte a Jin porque no quiere verte —responde entonces Jhope —deberías aceptar que lo vuestro se ha terminado. Siempre eres demasiado obsesivo con él y no se lo merece. Calmate y largate a casa. Tendréis tiempo de veros en el estudio y solo si Jin quiere hablareis. Respetale y dale su tiempo y espacio que se lo merece.

Un golpe que resuena desde la entrada por toda la casa me hace estremecerme y abrazarme mejor a mi cuerpo, sintiendo mis ojos de nuevo humedecerse, dejando las lágrimas una vez más libres cuando Jhope aparece en la sala, envolviéndome con sus brazos, dejándome llorar hasta quedar seco, sin decir nada, acariciando con mimo mi espalda.

— Solo te estoy creando problemas.. —me aparto, limpiando mis ojos demasiado hinchados —debería irme y dejar tu espacio personal libre de mis problemas.

— No me das problemas Jinnie —le miro a los ojos —se que estás pasando por un momento duro porque son muchos años de relación y le quieres pero estoy contigo. Soy tu amigo y por ello siempre estaré para lo que necesites. ¿Quieres que vayamos al estudio y practicamos la canción nueva? Te vendrá bien para desconectar un poco.

Asiento aunque realmente ya me da igual que hacer.

Fake LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora