P R O L O GO. . .

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Península de Corea 1945.

Los relámpagos, el caer del agua que emanaba de las nubes cayendo contra la tierra, era lo único que se escuchaba en la habitación de dos hermanos asiáticos, abrazados, con temor de lo que sucederá, pensando, llorando, haciéndose miles de preguntas sin resolver, con las voces quebradas de tanto llorar, tenían miedo ¿Por qué, si su más grande enemigo se encontraba muerto?, esperaban, ¿A qué?, su destino ser dictado por dos poderosas naciones.

Minutos, horas se podría decir, no lo sabían, pero, como si los pensamientos invocaran la discordia y la miseria, el americano acompañado del soviético, salieron de la habitación, al fin, dirigiéndose a los menores; uno de ellos tomando la mano de uno de los mellizos, se alejó y hablo, dirigiendo sus palabras asía los demás presentes.

— Después de un extenso dialogo, La representación de La Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, y. . . yo Los Estados Unidos De América, tomamos una decisión. . .— Se detuvo, mirando con cierta pena, giro su cabeza a para poder observar a su acompañante soviético, buscando la forma correcta de expresar lo que se diría a continuación.

—Se. . .señor, ¿Por qué se detuvo?— Hablo el mayor de los dos hermanos, la mirada del americano se posó en la del joven, con algo de amargura se dispuso a continuar.

— Se ha decidido dividir la Península de Corea —Hablo con firmeza el Soviético quitándole las palabas al americano— lo que involucra la separación de los herederos del ya fallecido Imperio Coreano, con su servidor la Unión Soviética, con la custodia del menor Corea del Norte y mi contraparte Estados Unidos de América con la custodia del menor Corea del Sur.

Finalizo el Soviético, dirigiéndose a los menores, agarrando con brusquedad y firmeza la mano de Cora del Norte, imitando la acción del socialista el americano tomo la mano de Corea del Sur, para dirigirse a una salida contraria del ruso.

Perplejos de la situación, los mellizos, se resistieron a los agarres de sus mayores, no querían alejarse, no debían, no estaba bien, pataleaban, lloraban, tratando de huir de quienes los sujetaban solo para por lo menos darse un último abrazo, pero todo era en vano.

"¡SUÉLTEME!" "¡Déjeme que por lo menos que me despida!" "No. . . No hagan esto. . .por favor"  "¡¡PAREN!!"

Tomaron con más fuerza a los menores y con una última mirada se observaron antes de perderse entre la intensa lluvia . . .  



Los demás acontecimientos ya los conocemos. . .

The union of two 【Countryhumans】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora