태국 Posesivo → Kooktae [ ̶a̶̶d̶̶a̶̶p̶̶t̶̶a̶̶c̶̶i̶̶ó̶̶n̶ ]

𝓬𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝓽𝓻𝓮𝓼.

Taehyung soltó suaves jadeos cuando los besos húmedos de Jungkook descendieron hasta su cuello. Enredó sus dedos entre la melena de él y gimió al sentir el contacto de su lengua. Cerró sus ojos con fuerza y echó su cabeza hacia atrás para gozar mas del tacto.

Jungkook presionó sus caderas contra las de Taehyung y éste formó una linda "O" en sus labios.

—Oh. —Jadeó Taehyung de nuevo. A Jungkook le gustaba que su novio fuera ruidoso y es que en verdad Taehyung lo era demasiado.

Jungkook dejó dos marcas dignas de apreciar en el cuello del pelirrojo.

Seguramente dentro de unos minutos éstas empezarían a tornarse de un tono morado. Jungkook dejó un último beso sobre estos y se apartó de ellos para poder ver aquellos preciosos ojos verdes.

—Eres insaciable, amor. —Comentó
Jungkook juntando sus frentes sintiendo la respiración semi agitada de Taehyung. Al menor le gustaban esos tiernos apodos que el pelinegro le decía y no pudo evitar sonreírle mostrando la segunda perdición en la vida de Jungkook, aparte de su sonrisa.

—Tú tienes la culpa. — Contestó Taehyung jugando con el cabello de su novio y dándole un corto beso en sus labios. Jungkook aún seguía sobre él y si alguien entrara a la habitación en ese momento creerían que Jungkook estaba masturbándose, porque su gran cuerpo no dejaba que el de Taehyung se viese.

—¿Yo? —rió Jungkook y Taehyung asintió con una sonrisa que jamás se desvanecería mientras el mayor estuviese. —¿Quién me despertó con besos en el pecho esta mañana?

Taehyung sintió sus mejillas sonrojarse por un momento y enterró su cabeza entre el cuello de Jungkook, sintiéndose apenado y a la vez gozando del aroma que su novio desprendía en su piel. Jungkook delicadamente se alejó y se recostó en la cama a su lado, atrayéndolo mas a él rodeando al menor con sus brazos, el pelirrojo no dudó en acurrucarse más al mayor.

Le gusta estar así, sintiéndose seguro como cada vez que está al lado de Jungkook. Desde un principio se sintió así de acogido y hasta la fecha aún lo siente así.

El pelinegro acariciaba su cabello suavemente y Taehyung empezó a cerrar sus ojos otra vez, queriendo que estos momentos se repitieran siempre y mas seguido.

Jungkook soltó una suave risa haciendo que el pelirrojo se derritiera al oírla. No solo se sentía dichoso de ver a un Jungkook por las mañanas, sino de ser el primero en el día de escucharlo reír.

—No te duermas, tienes colegio. —habló y Taehyung soltó un gruñido. No quería ir a clases, no quería levantarse de la cama y menos alejarse de Jungkook.

—No quiero ir — se quejó enterrando su cabeza en el pecho desnudo de su novio, soltó un suspiro tonto nuevamente porque definitivamente le gustaba despertar así cada mañana.

—Tienes que ir, te toca examen de biología. —Le recordó Jungkook mientras de reojo veía la linda escena de su pequeño recostado en él.

—¿Tendría ganas de ir, sabes? Pero una persona empezó a tirar piedras a mi ventana interrumpiendo mi lindo sueño a mitad de la noche y desde ahí ya no me dejó dormir.

Jungkook rió. —¿De verdad? No entiendo porqué le abriste tu ventana entonces y lo dejaste entrar.

—Era un chico guapo no podía dejarlo afuera. —recató Taehyung levantando su vista hacia Jungkook y topándose con sus ojos. A Jungkook le empezó a latir rápidamente el corazón.

—Él quería estar contigo. —Susurró sin despegar los ojos de su pequeño.

Con su otra mano recorrió el brazo de Taehyung que estaba sobre su pecho y encontró su mano para entrelazar sus dedos. Taehyung admiró esa escena con ternura prestando su atención a sus dos manos entrelazadas.