Universo Zero

Capítulo I: "El inicio del todo"

Hace mucho, mucho tiempo atrás, incluso antes que la existencia del universo mismo, habían dos grandes naciones que se disputaban por controlar la nada; la nación de la Luz, conocido también como el Reino Imperial, o la nación de las Diosas; y, la nación de la oscuridad, conocido como el Territorio de Demonios, en donde únicamente habitaban seres corrompidos por maldad pura, no solamente demonios como tal.
En una de sus grandes guerras en medio de la nada, muchos Demonios y muchas Diosas de gran poder mágico murieron, causando así que cada gota de su sangre generara un universo, habiendo muchos similares y otros muchos diferentes entre ellos. De esa gran guerra también surgieron Demonios que querían controlar todos esos universos, usando bestias incontrolables y despiadadas para esto, de ahí nacieron los universos D, D justamente de Demonio. Los universos empezaron a clasificarse bajo muchos criterios para poder controlarlos mejor, sin embargo las Diosas no permitirían que los Demonios conquistaran todo, por lo que un Dios Supremo empezó a crear miles de millones de subordinados con un gran poder que puedan enfrentar a los Demonios, y así lograron quitarle muchos universos a los Demonios, sin embargo no pudieron con todos, en especial con los del grupo D. De ahí surgieron 7 subordinados que destacaron sobre el resto por su gran capacidad de usar magia, fuerza física, capacidad de liderazgo, inteligencia, y otras muchas más cosas, esos 7 fueron llamados los Arcángeles; los Arcángeles era un grupo de 7 seres divinos con la capacidad de destrucción tan poderosa como la de las Diosas y la de los Demonios juntos.
Una segunda gran guerra se desató con la finalidad de ver quién se quedaría a cargo de supervisar los universos que se habían creado, sin embargo esta gran guerra terminó con un acuerdo de paz en donde dijeron que tanto Diosas como Demonios no intervendrían en el desarrollo de cada universo, dejándolos crecer o perecer por su cuenta. En esta segunda gran guerra, la cual fue llamada la Guerra Omega, hubo una Diosa que a pesar de todo lo que sucedió en el pasado, se enamoró de un Demonio, ambos tuvieron un amor prohibido el cual muchas veces estuvieron a nada de ser descubiertos, sin embargo, nunca pudieron separarlos, y juntos empezaron a tener aventuras a escondidas.

» Amor, deberíamos tener un hijo, siento que ya es hora de darle a conocer a todos que el amor entre Diosas y Demonios es algo normal. «

« Lo mismo pienso, cariño, sin embargo, sabes que podríamos iniciar otra guerra por culpa de eso. »

» No me importa, sería para enseñarles a todos las barreras que puede romper el amor. «

« No lo sé, siento que aún es muy pronto, a penas llevamos 575 años como pareja. »

» Son 600 años, si cuentas los años que tardamos en agarrar confianza y poder hablarnos bonito. «

« Aún así, es muy pronto. »

» Astaroth, quiero un bebé y quiero que tú seas el padre. «

« ¿Siquiera ya pensaste en el nombre para ponerle? »

» Sí, se llamará Zero. «

« ¿Zero? »

» Sí, porque cuando dé a luz, ese año será el año Zero, el año en que Diosas y Demonios se unan en una sola nación. «

« Ja, sí que tienes todo pensado, sin embargo, ¿Tienes un plan para que eso ocurra? »

» ¿Un plan? «

« Sí, bueno, digo, un objetivo sin un plan es una simple ilusión. »

» No necesito un plan, verás que todo será tal cual. «

« Gaia, no me ofrezcas una ilusión, quiero que me ofrezcas un objetivo, una meta, algo en lo que esté seguro de que todo saldrá bien. Te amo, y como no puedes imaginar, y es por lo mismo que te quiero ayudar para que puedas cumplir con eso que tienes en mente. Tu corazón es muy noble al pensar que Diosas y Demonios pueden convivir en paz y en armonía, pero la realidad es muy distinta, la maldad y la bondad nunca podrán tener un final feliz, siempre terminará siendo algo que afectará a alguna de las dos partes. »