💗💗💗KIDOXFUDO 💗💗💗
PRIMAVERA:
Iba caminando junto al río, observando cada árbol uno por uno; disfrutaba de la brisa de primavera y escuchaba relajado a los pájaros cantar y el chapotear de los peces.
Kido Yuuto estaba especialmente emocionado ese día. Era el noveno aniversario con su novio Fudo Akio, con quien había compartido tanto los peores como los mejores momentos de su vida. Tantas cosas habían pasado.
Lo conoció como un enemigo, luego rivales sin más, posteriormente amigos y finalmente pareja. En todo ese tiempo su amor por él se había intensificado y seguía haciéndolo con cada caricia, cada palabra suya, con cada suspiro...
Pasando un arco de flores, allí vio a su amado. Sentado tranquilamente en una mesa de piedra en la cual había un mantel, rosas y platos con deliciosa comida.
-¡Akio!- lo llamó emocionado.
-¡Yuuto!- el número ocho corrió hacia el para abrazarlo.
Se besaron con pasión hasta que el oxígeno se comenzaba a agotar.
-Si qué te lo has currado.
-Claro, te prometí que me esforzaría. Por ti soy capaz de lo q sea.
-Nos sentamos?
-Si.
Comenzaron a charlar sobre sus recuerdos juntos. Recordaron la primera vez que se hablaron.
-¿Así que tu eres Kido Yuuto?- dijo el mohicano con malicia.
-¿Quién demonios eres tú?
-Mi nombre es Fudou Akio y pertenezco al nuevo Instituto Imperial!!!
Por aquél entonces se odiaban. Fudou deseaba poder obtener la victoria, mientras el de rastas quería ganar para poder defender el fútbol que tanto amaba.
Además, recordaron cuándo Fudou había comenzado a cambiar junto al Inazuma Japón.
El entrenador Kudo había dejado salir a Fudo al campo por primera vez en todo lo que llevaban de selección.
En ese momento en que Kido lo vio en el campo se dio cuenta de q nadie confiaba en él y, a pesar de que sus pases eran perfectos, le echaban la culpa por q siempre perdían el balón. Minutos más tarde el entrenador Hibiki les contó la verdad acerca de su pasado.
Kudo adivinó q Kido ya estaba preparado para entender, no solo el juego de Fudo si no también al propio Fudo.
En ese partido entre los dos surgió una conexión que los haría inseparables.
-En aquel momento me ofreciste tu ayuda para hacerme ver lo hermoso que es el mundo en realidad.- agradeció Fudo.
-No podía permitir que te destruyeras. Te amo, y no dejaré que caigas de nuevo en el dolor.
Se acercaron un poco para besarse de nuevo.
A continuación, la charla los llevó a la confesión de Fudo.
Ambos se encontraban recogiendo sus cosas después de entrenar cuando Fudo agarró a Kido del brazo y lo arrastró hasta su cuarto en la residencia. A pesar de las protestas del de rastas, lo encerró y lo puso contra la pared.
-Qué.... demonios cre...crees a estás haciendo?- dijo muy nervioso.
-Callate y escucha bien lo que te tengo que decir.- ante aquella imponente mirada, el n° 14 solo pudo asentir.- Te odio... Te odio por q no puedo dejar de observar te, te odio por q me haces suspirar como idiota, te odio por q me sonrojo cuando te tengo cerca, te odio por q mi corazón late deprisa con tan solo oir tu voz, te odio por q me la paso pensando en ti todos los días,... Te odio por que te amo.
