El frente

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Había pasado una semana desde que nos habían sentenciado a ir al frente, había permanecido en el palacio, nuestra ida al frente se había aplazado hasta mañana, debido a que James y lo chicos tenían ya programados exámenes de promoción de grado, Ryan había partido al frente el tercer día para hablar con nuestro coronel a cargo, yo me la había pasado en el laboratorio con Oríon y Evelyn, nuestro progreso había sido bastante lento, pero confío en que Oríon lo logrará, su mente siempre ha trabajado en otro nivel.

Estaciono jeep que Ryan me había asignado, es un largo trayecto del estacionamiento de la base central al campo de entrenamiento, pero tengo entrenamiento, miro al cielo, el clima esta justo como me gusta, frío y nublado, tomo mi mochila de entrenamiento y bajo del jeep.

Al llegar al campo de entrenamiento, puedo visualizar a James sentado en una banca se encuentra revisando unos papeles, hasta que me encuentro a unos cuantos metros de él, es cuando nota mi presencia.

-¿Qué haces?- le pregunto sentándome a su lado

-Papeleo - dice poniendo los papeles a un costado de él - sobre quien viene al frente con nosotros.

-¿Y quién viene?

-Diego, Luke, Iván, Neal, Byron, Chris, Ángel, Adrían, Ben y una chica muy rara llamada Sarah- dice pasando sus manos por rostro.

-Sí, he escuchado de ella, bastante molesta para mí gusto- le digo sonriendo.

-Y bastante bajita por cierto, ha de medir 1.50.

-1.66- le digo dándole un golpe en el brazo.

Esta sería la última vez que el escuadrón entrenaría con sus 80 miembros, el entrenamiento fue como el resto, me separé de ellos cuando me toco hacer el entrenamiento médico, una vez terminado mi entrenamiento, me fui al laboratorio, Oríon sostenía que había algo bastante raro en el virus, que fue extraído de los soldados enemigos, tenía razón la forma en la que se comportaba de una forma muy...muy programada.

Se sentía bien tener la mente cansada, evitaba pensar sobre ir al frente, había entrenado tan fuerte como podía, me había forzado a aprender tantas cosas de medicina, primeros auxilios  y cualquier cosa que me ayudará a salvar a los soldados en el campo de batalla.

Estaciono el jeep frente a mi casa, se siente raro verla aunque se ve exactamente igual a cuando me marche, me quedo sentada en el jeep un buen rato, pensando en cómo le diré a mamá y a mi hermana que me han enviado al frente, me planteó varías veces el regresar al palacio sin decir nada, pero esta podría ser la última vez que las viera, por fin junto el valor necesario y bajo del jeep, me tiemblan las piernas conforme me voy acercando a la puerta, me quedo parada frente a está, toco el timbre con la mano toda temblorosa, respiro de manera errática, oigo pasos acercándose a la puerta, tengo que contener todas las ganas de salir corriendo.

-¡Sarah!- dice mi madre abriendo la puerta con una enorme sonrisa, me quedo parada frente a ella totalmente inmóvil, intento hablar pero las palabras simplemente no me salen- ¿Sarah, esta todo bien?

-Mamá- se me quiebra la voz, inmediatamente pierdo toda mi fortaleza y sale todo lo que había estado reprimiendo durante este tiempo, las lagrimas corren por mi rostro y no puedo más, cómo si fuera una niña pequeña me lanzo a sus brazos y comienzo a llorar sin reprimirme, debí hacerlo tan fuerte que Rose salió a ver que pasaba, como pueden ella y mamá me sentaron en la sala.

-Sarah- dice Rose preocupada, pero soy incapaz de parar de llorar, solo me aferro a los brazos de mi madre.

-¿Terminaste con Ryan?- me pregunta mi madre mientras acaricia mi cabello a lo cual solo niego con la cabeza -entonces dime ¿qué pasa?- no sé como decirlo ¿Cómo le dices a tu madre que te vas a la guerra?¿Cómo le desgarras el corazón a una madre esa forma? - Calma, Rose llena la bañera - le ordena mi madre a mi hermana, Rose sale corriendo escaleras arriba -esta bien, llora todo lo que quieras, sácalo, te hará sentir mejor - mi madre me abraza fuerte, no sé cuanto tiempo me la pase llorando.

¿Guerrera? o ¿Princesa?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora