quierela a ella, no a mi.

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-¿se puede saber que te sucede, perro? - el ciervo rojo Frunció su ceño con ganas hacia el lobo que movía su cola de un lado para el otro.

-no me sucede nada, louis - murmuró legosi, dándose cuenta de lo que minutos antes había hecho.

Ahora, ambos, en la habitación, a solas, legosi solo quería morir.

Sabía que había actuado bajo instinto, uno distinto al que estaba acostumbrado a sentir, así que no tenía explicación - en realidad si, pero no se lo diría a louis, claro que no-.

-¿Quieres que me crea eso? - la voz de su amigo exigía repuestas y no las que le decía legosi.

-lo siento, louis - louis le miro unos segundos antes de darse la vuelta e ir por una copa.

El silencio se hizo, legosi sabía que louis está pensando en cómo sacarle toda la información que quiere tener y también sabe - pobre lobo que se atiene a las consecuencias - de que lo logrará sin mucho esfuerzo, después de todo era el lindo y más fuerte herbívoro que tenía enfrente.

Cuando el ciervo se dio de la vuelta tenía en su mano un vaso con algo que parecía Ron, le movió un poco antes de tomar un sorbo.

Manteniendo el sordo silencio entre ambos.

-sucedió algo con Haru, ¿no es así? - aunque parecía una burla más bien era ironía, legosi no sabía diferenciar muy bien entre ambas.

-mmmh... ¿Si? - no murmuró aunque trató de hacerlo.

-ah-louis suspiró, dando otro trago - en realidad no me interesa, pero creo que debes descargarte con palabras y no con mordiscos, sino, pobre de mi.

Legosi agachó las orejas, siento consciente de que era un broma, muy recurrente de louis.

-bien, dejemos mi pierna en paz. ¿Que sucedió? - dando un último sorbo a su bebida se sentó en su gran sofá para uno.

Legosi se sentó en una silla cualquiera.

-en realidad... - legosi se rasco la cabeza, pensó en como decirle al pobre de louis que ya no estaba con las conejita.

-¿problemas maritales? ¿Sigues virgen? - legosi pasó sus manos por su cara, sonrojado por la facilidad de palabras de louis.

-yo... Ah, hum.., si.

La risita sarcástica de louis, extrañamente, le relajó.

-entonces es eso... - murmuró el ciervo, aún así el lobo le escuchó.

-¿que cosa, louis? - louis desvío su mirada al gran ventanal.

-estas celoso por que pensante que me había acostado con ibuki y tu aún no lo haces con Haru, pero para tu desgracia, no me acosté con Ibuki - y por último cruzó sus piernas y volvió a llenar el vaso con Ron.

Legosi Frunció su ceño, aliviando pero enojado.

-si estaba celoso, pero no por ser yo virgen... - suspiró, se tomó la cabeza y movió su cola lentamente -, realmente pensé que habías tenido sexo con él, eso me hace enojar por qu...-

Antes de terminar de hablar, analizó lo que estaba diciendo, rápidamente levantó la cabeza y pudo ver cómo el vaso casi se resbala de la mano del lindo siervo atónito.

-¿qué...? - Louis no pudo modular correctamente esa ni ninguna otra pregunta por largos segundos.

Segundos casi eternos para legosi.

Recuperado y listo louis comenzó a preguntar.

-es normal para un lobo pervertido como tu, tu y tu complejo de herbívoros... - legosi Frunció el ceño-, se te pasará y luego volverás a por Haru.

Los puños de legosi se cerraron fuertemente y sin querer comenzó a mostrar sus colmillos-falsos pero buenos - para hacer callar a louis.

Pero el ciervo siguió hablando.

- quizá te pase por temporadas, pero no quien sabe, después te enamoras de una cebra- casi murmuro con fastidio.

La sangre comenzó a hervir en el cuerpo de legosi, la rabia se acumulaba hasta casi cegar su visión.

Y antes de que eso pase, legosi habló.

-¡¡NO HABLES DE MIS SENTIMIENTOS COMO SI FUERAN UN JUEGO!! - la respiración agitada y las mandíbula apretada eran signos de su rabia.

Todo en louis gritaba "peligro corre, escondete, sobrevive, no mueras" pero, siendo louis, simplemente miró a legosi.

-¿y qué, vas a comerme? - soltó, legosi suspiró.

-no quiero hacerlo, el solo pensar que puedo lastimarte otra vez... Me dan ganas de morir - los músculos de legosi en su cuello estaban tensos.

Louis se acomodó en su sofá.

-es... Tan distinto a lo que sentía con Haru y a la vez tan similar... - louis dio un sorbo a su trago, desviando su mirada un vez más.

Sus ojos vidriosos, legosi recordó el día en que ese pequeño siervo lloraba enfrente de él.

- no tengo palabras para esto, es mejor que salgas de aquí - gruñó casi como un carnívoro más legosi lo sintió casi como un ronroneo, algo tonto por que los siervos no pueden hacerlo.

-louis - llamó, sin rabia, sin nada más que un toque de tristeza y decepción.

Suficientes para hacer estallar a louis.

-¡NO BASTA, ¿POR QUÉ NO ERES NORMAL? VE Y CÁSATE CON UNA LOBA, JUNO ESTARÁ CONTENTA, TENGAN HIJOS, SEAN FELICES, ¿QUÉ ESPERAS, LEGOSI? - estaba de pie ahora, dejando caer el vaso al suelo, la rabia le estaba consumiendo, el dolor, el cariño, el... Todo. louis lo sentía todo.

Legosi no sabe cómo ni cuando - al igual que louis -, tenía aprisionado al ciervo contra la pared, las manos arriba de su Cabeza y con una de sus manos grandes sostenido ambas de louis.

Mientras que la otra mano sostenía la mandíbula del siervo, haciendo que le mirarse hacia arriba mientras que legosi - como pocas o casi nulas veces - estaba completamente estirado alcanzado su altura completa.

-louis °sempai, sólo te quiero a ti. Desde siempre y, hasta ahora, me di cuenta. Lo lamento por Haru, pero, solo a ti te quiero- louis cerró sus ojos.

No quiso ver, no quiso sentir.

Pero la mano que sostenía su mandíbula viajó hasta sus caderas.

-louis °sempai - fue llamado una vez más.

-legosi..., tengo una prometida con la cual debo casarme y dar un descendiente, mi vida está planeada. incluso si soy el jefe de todos esos leones..., no soy quien para decidir nada- abrió sus ojos y pudo ver la compasión en los de legosi.

-¿puedo besarte?

-no, perro.

- por favor...

-no.
Legosi bajó sus orejas.

-lo haré de todas formas.

-lo supuse - susurró louis, con aceptación.